Las veinte finales de OKC Thunder

Ya solo estamos a 20 partidos de que termine la temporada regular, y OKC Thunder está en la séptima posición del Oeste, aunque con posibilidades de ascender al sexto, quinto o cuarto puesto incluso si Memphis Grizzlies, Los Angeles Clippers o Utah Jazz tienen un final de temporada malo y OKC entra en una buena dinámica de cara a los Playoffs. El récord actual de la franquicia entrenada por Billy Donovan es de 35-27, y viene de perder los dos últimos partidos fuera de casa contra Phoenix Suns y Portland Trail Blazers. Russell Westbrook y compañía están en progresión de hacer 46 victorias al término de la temporada regular, una marca nada mala teniendo en cuenta todos los cambios sufridos, aunque no sabemos si suficiente para evitar ser el séptimo de conferencia y tener una ronda verdaderamente complicada contra un equipo que podrían ser los eternos San Antonio Spurs. Me dispongo a repasar los 20 encuentros que tenemos por delante, y los posibles resultados en cada uno de ellos, así podré constatar que no tengo ni p*** idea de baloncesto y que solo sigo la NBA por postureo:

El primer partido es esta misma noche, el último de una mini-gira por el Oeste, jugando contra los Dallas Mavericks, un equipo que está peleando por ese último puesto que da acceso a Playoffs, que actualmente ocupa Denver Nuggets. OKC Thunder fuera de casa es un misterio, y Oladipo sigue de baja, así que depende de los jugadores el no dejar solo a Westbrook y volver a casa con una victoria bajo el brazo.

Luego nos quedamos una semana en casa como el que espera en el centro de la plaza a que salga el toro (no, no vienen los Bulls). Primero vienen Damian Lillard y sus amigos, que nos ganaron el otro día, aprovechando que estábamos generosos en el último cuarto. Después, los San Antonio Spurs visitan Oklahoma City, y según fue nuestro anterior enfrentamiento, puedo apostar y apostaré a favor de que Kawhi Leonard nos hará trizas de nuevo. El último partido de esta estancia será contra Utah Jazz, algo positivo, ya que las dos victorias contra ellos (también hubo una derrota) han sido prácticamente los dos mejores partidos del año para OKC Thunder,contra una de las mejores, o incluso la mejor defensa de la liga, con lo cual, hay esperanzas puestas en recobrar la esperanza, valga la redundancia.

Después, nos vamos a disfrutar de la brisa atlántica jugando contra los Brooklyn Nets, un partido que hay que ganar sí o sí, al menos en condiciones normales. Continuaremos allí para visitar Canadá e intentar vengarnos de unos Raptors sin Lowry que nos ganaron al principio de la campaña, y jugando contra Ibaka en su nuevo equipo (por segunda vez en esta temporada), y tras haberle sufrido en los Magic.

Volveremos a Oklahoma City, que se convertirá en California por unos días, ya que, de manos de un base californiano, como lo es Westbrook, recibiremos a Sacramento Kings, a quienes deberemos ganar, y a Golden State Warriors, en lo que, con KD lesionado, será un partido más, aunque hay muchas ganas de ganarlo. Por último, deberíamos ganar a los 76ers, a los que no vemos desde el primer partido del año.

Después, viajamos a Texas para jugar dos días consecutivos. Primero, encuentro de candidatos a MVP entre Westbrook y Harden, en lo que será una dura prueba para la defensa de OKC Thunder, y después iremos a Dallas, partido que intentaremos predecir tras ver el de esta noche para curarnos en salud. Viajaremos a Florida para visitar a Orlando Magic, que ya no cuentan con Ibaka para amargarnos, y que debería ser una victoria nuestra.

Otra vez en casa, otra vez vienen los Spurs, y otra vez me jugaré dinero a favor de ellos, independientemente de lo que haya pasado en las tres semanas que hay en medio. Luego vienen de manera consecutiva Milwaukee Bucks y Charlotte Hornets, en una bonita simetría con lo que fue el comienzo de 2017, donde visitamos ambas ciudades de manera consecutiva, y perdimos ambos partidos, así que, para completar el espejo, estaría bien ganar ambos partidos.

Haremos un tour de despedida por las vastas praderas del Oeste del continente norteamericano, donde visitaremos a Memphis Grizzlies, rival al que, como Utah Jazz, puede dar mucha satisfacción ganar, además de que podemos estar ahí en la pugna con ellos por un sexto o quinto puesto. Visitaremos Phoenix, de donde salimos escaldados el pasado viernes, aunque probablemente no se jueguen nada, y deberíamos ganar. Escalaremos las Rocosas para jugar en Denver a una altura prácticamente inhumana, el único sitio donde Westbrook tuvo que hacer una jugada andando, contra un equipo que podría estar jugándose los Playoffs sobre la bocina, y, por tanto, muy peligroso. Terminamos el viaje visitando Minneápolis, donde la primavera estará peleando por derretir los témpanos de hielo, en un partido que también deberíamos ganar, pese a que ya nos dieron una fea sorpresa. El último partido será, ya en casa, de nuevo frente a Denver, otra vez muy peligroso, ya que vienen con inercia de la bajada desde su cumbre, y quien sabe si con la obligación de ganar.

Tampoco es que me haya mojado mucho, para qué engañarnos, pero la inconsistencia de este equipo nuestro me avala en mi decisión de ver los toros desde la barrera en la mayoría de partidos. Aun así, me voy a lanzar a la piscina y voy a decir que ganaremos 12 partidos de los 20, dejando el récord de OKC Thunder en 47-35, tres victorias más de las previstas. Ahora, hibernaré hasta Semana Santa para evitar los apaleamientos por posibles gafes que pueda crear con este artículo.