La serie entre los Washington Wizards y los Atlanta Hawks viajaba este sábado a Atlanta para su tercer partido. Con 2-0 en la eliminatoria para los de la capital de Estados Unidos, los Hawks estaban obligados a brindar una victoria a su afición, de lo contrario podrían haber quedados heridos de gravedad.
Así fue, los Atlanta Hawks demostraron que tenían urgencia por ganar y dominaron el encuentro de cabo a rabo. En apenas tres minutos de partido, los locales ya dibujaban una ventaja de dobles dígitos en el marcador, y todavía en el primer cuarto llegaron a alargarla hasta los 20 puntos de diferencia. Los de Mike Budenholzer se fueron 18 arriba al final del primer cuarto, misma ventaja con la que se fueron al descanso. La única oposición de los Wizards llegaba de manos de John Wall, muy solo en el partido, anotando 21 de los 46 puntos que llevaba el equipo.
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Un parcial de 10-3 a la vuelta del descanso a favor de los Wizards daba la impresión de que la dinámica podía cambiar, pero solo fue un espejismo, y rápidamente los Hawks volvieron a poner tierra de por medio y se marcharon de nuevo por encima de la veintena de puntos de ventaja. Partido casi sentenciado al final del tercer cuarto, con 67-90 en el marcador. Los Wizards volvieron a dar una pequeña sensación de no rendirse con otro parcial de salida de 14-3, poniéndose solo a 12 puntos. A partir de ese momento, los Atlanta Hawks volvieron a reaccionar con un parcial de 9-0 y dejando a los capitolinos más de tres minutos sin anotar. Sin más sobresaltos, los Hawks se hacían con la victoria por 98-116 y se apuntaban su primer punto en la serie.
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John Wall, solo ante el peligro
John Wall fue el único que se salvó en los Wizards, acabando el partido con 29 puntos y 7 asistencias y con una hoja de tiro casi inmaculada, con 10 de 12 en tiros de campo. Más allá del base, solo Brandon Jennings y Bojan Bogdanovic lo intentaron, con 13 y 11 puntos respectivamente desde el banquillo. Mal partido para Bradley Beal, con solo 12 puntos y un paupérrimo 6 de 20 en tiros de campo, igual que Markieff Morris, que acabó con 9 puntos y 4 de 14 en tiros de campo. Mención aparte la poca aportación de Marcin Gortat, que solo anotó 2 puntos y casi no apareció en el lado ofensivo del equipo.
En los Atlanta Hawks, Paul Millsap y Dennis Schroder se encargaron de liderar al equipo a la victoria. El ala-pívot firmó un doble doble de 29 puntos y 14 rebotes, además de 5 asistencias, en un excelente partido del All-Star de los Hawks. Por su parte, el base acabó con 27 puntos y 9 asistencias, dirigiendo con buena mano al equipo hacia la victoria.