Miami gana sin convencer, 2-0
Charlotte, muy lastrado por los problemas de Big Al
Al Jefferson era seria duda para disputar el segundo partido de la serie por culpa de las molestias en el pie que le impidieron rendir ya en el primer encuentro. Al final salió en el cinco inicial, aunque no estaba al 100%. Pero ser titular dio un plus de moral a sus compañeros, que salieron muy motivados a pista.
Esa motivación extra les permitió disputar de tú a tú los primeros minutos del encuentro, donde los intercambios de canastas se sucedían y ambas franquicias alternaban el liderato con facilidad. No obstante, Jefferson tuvo que abandonar el encuentro camino de vestuarios otra vez, y los de Clifford se desmoronaron momentáneamente. Así, Miami obtuvo una ventaja de 10 puntos gracias a que los Bobcats estuvieron más de tres minutos sin anotar. Al final del primer cuarto la ventaja siguió en esa decena, 29-19, con un triple at the buzzer de Luke Ridnour.
En el inicio del segundo período, aún sin Big Al, la ventaja de los Heat se amplió hasta el +13, 34-21. Pero en ese momento volvió el Center de Charlotte a pista y, aunque jugó el resto del partido visiblemente cojo y con muecas de dolor constantes, aportó en ataque y, sobre todo, ayudó a nivel psicológico a sus compañeros a rehacerse y luchar por la victoria.
Esa reacción llegó de la mano de Kidd-Gilchrist, que estuvo muy activo durante todo el choque y lideró el intento de remontada visitante hasta colocarse 38-35. Sin embargo, gracias a un buen trabajo de LeBron James, Miami volvió a ampliar la ventaja y no dejó acercarse a Charlotte en ningún momento del cuarto, rondando las diferencias los 10 puntos.
Se llegó a la media parte con un 57-47 en el luminoso. Charlotte debía mejorar en el control del balón (12 pérdidas en 24 minutos) y debía frenar a LeBron, ya que el de Akron se marchaba al descanso con 18 puntos y 4 robos de balón.
En la segunda parte Jefferson tomó el control del partido y con su clase suplió sus problemas físicos, haciendo un clínic de recursos ofensivos en la pintura. Gracias a él los Bobcats consiguieron acercarse a tres puntos otra vez, 65-62, pero en el apartado defensivo no conseguían cerrar a James y éste mantenía las diferencias entre los 5 y 7 puntos de ventaja para los locales. Así se llegó al final del cuarto, 79-72.
El último período fue un quiero y no puedo de Charlotte, con diferencias que por momentos se iban a 13 puntos y luego volvían a bajar a solo 5. En un último intento a falta de 1:40 se pusieron a solo tres puntos, 97-94, e incluso doce segundos del final un triple de Kemba Walker dejó la diferencia en la mínima, 98-97. Pero LeBron metió los dos tiros libres y Wade robó el siguiente balón, ya sin tiempo para más. Convirtió unos de sus dos lanzamientos desde la línea y terminó el encuentro, 101-97.
Charlotte tuvo como hombres más destacados a MKG con 22p-10r, Al Jefferson con 18p-13r pese al dolor y Kemba Walker con 16p-8a (pero 5/18 en tiros). En los locales sobresalió el «Big Three»: LeBron James con 32p-6r-8a-4robos, Bosh con 20p (4/5 en triples) y Wade con 15p-6r.
Miami lidera la serie 2-0 tras la segunda victoria en casa, pero parece que han llegado ambas más por la lesión de Big Al que por un buen rendimiento de los propios Heat. La pregunta es: ¿Están haciendo lo necesario para ganar o es que realmente no pueden dar más de sí? Esperemos que en los próximos encuentros se despeje esta duda.
Redactado por: Javier Sámano y Alex Güell