Objetivo claro en Houston: El campeonato
La franquicia texana aspira a todo esta temporada
Una cuestión merodea por las entrañas del Toyota Center. ¿Es la hora de los Rockets? ¿Por qué un equipo que cuenta, según más de uno, con el mejor pívot y el mejor escolta de la liga, no puede ganar un anillo? El caso es que la ciudad de Houston ha recobrado el amor por el baloncesto de antaño, y no es para menos. Este bloque de jugadores, de halo anárquico en su mayoría, se encuentra ante una oportunidad histórica a todos los efectos, y es que no todos pueden decir que tienen un anillo de campeón de la NBA. Sin embargo, para alcanzar la gloria previamente deben sumarse determinados e indispensables factores. Nadie sabe cuál fue el motivo del bajón ante Portland en la primera ronda de los pasados PlayOffs que desembocó en la precoz Eliminación de los tejanos, pero desde SomosNBA intentaremos desgranar las claves y hallar el por qué.
Ese declive puede venir a causa de la frágil moral de los de Kevin McHale, que, por ende, causó que el sólido entramado defensivo consolidado durante a Regular Season se transmutara en un auténtico queso gruyere. Por ejemplo, Dwight Howard (Que se denominó él mismo como «el mejor pívot de la NBA» ). Este dominante Center, de físico imperial y guarismos solemnes, fue rotundamente vilipendiado por otro espectacular jugador como es LaMarcus Aldridge en la fatídica eliminatoria de post-temporada, y es que en los dos primeros encuentros de la misma (jugados ambos en el Toyota Center) el «5» de los Blazers sobrepasó los ¡¡40!! puntos.
Los de Houston, además, han perdido al tercer activo más productivo de la plantilla, ya que Chandler Parsons ha decidido firmar por los Dallas Mavericks, lo que significa que los «Red» se han visto abocados a hacerse con un sustituto del alero, Trevor Ariza. Y ojo con el ala-pívot lituano Donatas Motiejunas, que en caso de ratificar en los primeros partidos de la próxima campaña las grandes actuaciones que ha firmado en la Liga de verano contaría con un peso mayor en la ya soberbia rotación interior de McHale, capitaneada por Howard y una de las revelaciones de la pasada temporada, Terrence Jones. También se debe contratar a un playmaker, ya que las marchas de Aaron Brooks y Jeremy Lin dejan prácticamente huérfana una de las posiciones primordiales por excelencia de este deporte, aunque James Harden está también capacitado para subir el balón y ejercer de base en la parcela ofensiva, ya que sus dotes para el pase y bote le avalan con creces. El principal punto fuerte de los Rockets es, sin lugar a dudas, el acierto desde más la línea de 3. Si se logra dar continuidad a esa solvencia en el tiro exterior, aparte de sumar de tres en tres, los tejanos tendrán más opciones por dentro, ya que las defensas rivales se verán obligadas a increpar a excelsos tiradores y grandes hombres interiores.
Un equipo hecho para ganar. Durante la campaña 2014-15 obtendremos las respuestas a las cuestiones que se pregunta todo aficionado Rocket.
@23javitoS