James Jones, el especialista en triples

James Jones, que llegó a la NBA en el impresionante Draft deñ año 2003, está ya consolidado como uno de los mejores reservas de la liga. Ahora tiene 33 años, y su rol en los Cleveland Cavaliers será aportar frescura saliendo del banquillo y anotar desde la larga distancia, su especialidad.

Estar en la disciplina de un conjunto que aspira al anillo y que cuenta con grandes posibilidades es un gran reto. Ha realizado unas declaraciones en las que explica como ha sido su paso por la mejor liga del mundo:

«Me levanto cada día pensando quien soy. Me marco una rutina, así que hago lo mismo todos los días.Cuando llego al estadio lanzo desde la línea de tres. Mi mentalidad es la misma: si lanzo van a entrar.»

Dice que la noción del bienestar es la más importante, ya que la confianza en uno mismo es imprescindible. Él cree que ahí está la clave. También ha explicado como esta disciplina se debe a la parte psicológica.

«Es más un estado mental que otra cosa. Lo conocen sobre todo acerca de los números con este juego. Siempre estoy psicológicamente condicionado para convencerme de que yo tiro por encima del promedio. Algún día podré tener un 7/7 y otros un 1/7 pero mi mentalidad va a ser la misma: cada vez que lance va a ir dentro.»

«Para jugar a este nivel tienes que ser realmente bueno en unos o en otros muchos aspectos del juego. Cuando dominas muchos de los aspectos mayor será tu capacidad de rendimiento. No se puede ser bueno en todo, pero tienes que ser bueno en alguna cosa, porque cada jugador de la NBA tiene algo que le hace especial.»

Sus grandes dotes de tirador le llevaron a conquistar el concurso de triples de 2011.

«Creo que el tiro es algo más mental que físico. Es la capacidad para mantener la concentración y seguir a adelante. Yo escogí ser tirador con mi mentalidad, lo que me ha facilitado tener una buena carrera. Mi juego se basa en el tiro y trato de lanzar con grandes porcentajes, buscar una buena selección… La belleza de la vida radica en la comprensión de que es lo que tiene que adaptarse a ti.»

Ya cuenta con dos anillos en su palmarés y seguro que le gustaría tener alguno más en el futuro.

«Cada jugador es único, y no hay otra manera de trabajar que no sea entrenando. Aprendí mucho de Reggie Miller. Se debe entender que hay una gran cantidad de factores: la acción, la longitud del brazo, tamaño de la cadera, la longitud de los dedos. Todas estas cosas hay que tenerlas en cuenta a la hora de entrenar.»

También ha hablado sobre su nuevo compañero Shaw Marion:

«Él tiene un sólo tiro, que para mí no funciona. No hace falta decir que no es muy eficaz, sin embargo, es uno de los mejores jugadores que ha tenido este deporte.»

Su trayectoria habla por sí sola. A sus 33 años, se ha unido a los Cavs, con los que volverá a jugar siendo un especialista desde larga distancia. Esperemos que tenga una gran etapa en la franquicia de Ohio.