Anthony Davis, el jugador más temible de la NBA
Su progresión es brutal en los tres años que lleva en la liga
El día 11 de marzo del 1993 nacía en Chicago el, con certeza, actual mejor ala-pívot de la NBA, Anthony Davis, segundo de tres hermanos junto a Antoinette, su gemela, también jugadora de baloncesto.
Como jugador, es un power forward de 2,08, 22 años que destaca por su capacidad atlética, su rebote, su tapón y, por encima de todo, su capacidad de mejora, progresión y superación. Con sólo 22 años, aspira a ser uno de los mejores jugadores de la historia y a, en un futuro no muy lejano, el MVP si las lesiones le dan tregua.
Ya en el instituto se veía que iba a ser un gran jugador. Acudió al Perspectives Charter School en Chicago, un centro con un programa académico famoso por sus programas de matemáticas y ciencias. Le conocían como «el pequeño que lanza triples desde la esquina». Con 14-15 años medía 1,83 metros y ya apuntaba a un gran jugador. La siguiente campaña creció 10 cm y mejoró su juego interior y sus padres pensaron en trasladarle de instituto a uno con mayor repercusión mediática. Sin embargo, Donnie Kirksey, amigo del padre de Anthony, desaconsejó tal opción diciendo que «si eres bueno, da igual donde juegues, te encontrarán».
Tras su etapa en el instituto, Anthony se trasladó a Kentucky para jugar en los Kentucky Wildcats en 2011. Estaba en un equipo en el que también jugaban Darius Miller, Michael Kidd-Gilchrist y Terrence Williams, entre otros. Destacó por jugar de ala-pívot y por sus grandes capacidades de rebote y tapón. En su único año en la NCAA, Anthony Davis promedió 14,2 puntos, 10,4 rebotes, la brutalidad de 4,7 tapones, 1,3 asistencias, 1,3 robos y un 62,3% en tiros de campo. A eso también se le sumaron el MVP, el novato del año y el título al mejor jugador defensivo de la temporada.
Su equipo acabó ganando el campeonato ante la universidad de Kansas con un bajo rendimiento en ataque por parte del jugador (1-10 en tiros y 6 puntos), pero con una inmensa actuación defensiva (16 rebotes y 3 robos). Eso dio paso a que unos días después, se declarara elegible para el draft de la NBA.
En el draft, Anthony Davis fue elegido por New Orleans Hornets en la 1ª elección de la primera ronda, por delante de Damian Lillard (séptimo y ROY de esa promoción), Bradley Beal, Dion Waiters y Andre Dummond, entre otros.
http://www.youtube.com/watch?v=8c4w73ZU9v4
En su primera temporada como «Hornet», Anthony Davis pasó muy desapercibido debido a la lesión que sufrió al principio de temporada y que le tuvo apartado del juego 1 semana, la falta de minutos (28,8 por partido) y la pérdida de 18 partidos en la temporada. Lideró la clasificación de rookies en rebotes (8,2) y en tapones (1,8), pero no pudo ser el Rookie del Año, como muchos predecían, incluido un servidor. También participó en el Rising Stars Challenge en el Team Chuck y fue elegido en el mejor quinteto de rookies.
http://www.youtube.com/watch?v=Yls3mqgfAp4
En su segunda temporada, el equipo cambió y pasó de ser Hornets a ser Pelicans. Y él mejoró notablemente. Pasó de ser el rookie desapercibido que apuntaba a Novato del Año y que no lo pudo conseguir a ser el jugador franquicia de Pelicans y uno de los mejores ‘4’ de la NBA. Fue el tercer jugador más joven de la NBA en conseguir más de 40 puntos y más de 20 rebotes en un partido. Lideró la liga en tapones y también quedó tercero en la clasificación por el premio de jugador más mejorado de la NBA, por detrás de Goran Dragic y Lance Stephenson. Promedió unos números en nada comparables con los de su pasada campaña. Fueron 20,8 puntos, 10 rebotes, 2,8 tapones, 1,6 asistencias, 1,3 robos, un 51,9% en TC, un 79,1% TL y un 22,2% en T3 que no sirvieron para meter al equipo en Play-Offs, pero que sí sirvieron para alentar a la franquicia de Louisiana de que les esperaba un futuro prometedor con el Pelícano Anthony en sus filas.
Su tercera temporada ha empezado como un tiro. Después de haber aumentado en casi 10 kg su peso, con un récord de 6-4 y un equipo mejorado respecto al de la temporada pasada, Anthony está promediando 25,5 puntos, 11,4 rebotes, 3,9 tapones 2 asistencias y 2,3 robos (todos ellos siendo los más altos de su carrera) y siendo crucial en las victorias contra Orlando, Charlotte, Spurs, Lakers, T-Wolves y Sacramento, el último con el duelo Cousins-Davis incluido.
También ha participado en grandes citas con su selección. En los JJOO de 2012 sustituyendo a un lesionado Blake Griffin y con el papel de reserva, el Ala-Pívot debutaba con el «TEAM USA» en la victoria de su selección por 98-71 ante Francia anotando 3 puntos en 8 minutos. A los 2 años de esto, esta vez como jugador estrella junto a Kyrie Irving, James Harden y Sthepen Curry, en el Mundobasket 2014 celebrado en España. Se proclamó campeón promediando 12,3 puntos, 6,5 rebotes (2,2 ofensivos), 0,7 asistencias, 2,1 tapones, 0,8 robos y un 55% en TC en casi 20 minutos y aunque no pudo estar en el mejor quinteto debido a la entrada de Pau Gasol y Kenneth Faried, fue uno de los mejores jugadores del torneo.
http://www.youtube.com/watch?v=NOy_HH1WJfc
Es evidente que el techo de este jugador es inmenso y la capacidad de mejora y progresión que tiene es brutal. Ya dijo Monty Williams que su techo no había llegado ni mucho menos a su tope. Dijo que tenía solo 22 años y que aún le faltaba ser muchísimo mejor de lo que es ahora.
La personalidad juguetona de Davis hace imposible olvidar que sigue siendo un neófito en la NBA, pero juega con el mismo esfuerzo que uno que lleve 10 años más que él. Le espera un futuro prometedor y claramente lejos de terminar.
Algunos le comparan con Tim Duncan, Pau Gasol, David Robinson, Patrick Ewing e incluso con el mismísimo Hakeem Olajuwon. Davis tiene mejores promedios que ellos a su edad.
Como cualquier gran jugador, Davis necesita ayuda para que New Orleans se convierta en un aspirante al título y decidió (contra los mejores deseos de fanáticos de los Bulls que quieren que siga los pasos de James por el regreso a casa) permanecer en Louisiana durante un largo periodo.
El tiempo dirá si Davis cumple con las expectativas y es capaz de convertirse en el mejor jugador de la NBA.