Ya es hora de ver esa defensa

Una nueva derrota, pero con algo positivo

El pensamiento de los aficionados de Boston en el último partido en el TD Garden era claro: «Para una vez que defendemos…». Los de verde mostraron su mejor actuación defensiva hasta la fecha, pero fue el ataque el que esta vez no funcionó, provocando la derrota ante Portland. El marcador final de 94-88 a favor de los de Oregon, muestra que los pupilos de Brad Stevens fueron capaces de contener en gran medida el gran ataque de los Blazers, y también que se anotaron menos puntos de lo habitual en esta temporada.

Los Celtics venían de ganar en Philly a unos perdidos Sixers, aunque el partido no fue muy bueno pese a la victoria. Sólo una buena racha en el segundo tiempo de Brandon Bass y Jared Sullinger privó a Philadelphia de conseguir su primera victoria de la temporada. Los jugadores verdes mostraron mejores caras en la derrota ante Portland que en su último partido ganado. Y todo ello se debe a esa ligera mejoría de la defensa que ofrece una corriente de optimismo para la presente campaña. Stevens mostró esas buenas sensaciones tras el partido y declaró que ya tenían una base con la que trabajar en el largo parón en el que Boston está inmerso. Avery Bradley también destacó la intensidad defensiva del equipo; recordemos que se enfrentaban a jugadores como Damian Lillard y LaMarcus Aldridge. El jugador subrayó que con ese esfuerzo las buenas defensas y las victorias vendrán pronto.

Los Blazers llegaban al encuentro siendo el tercer mejor ataque de la liga con 105 puntos por partido. Este dato hacía temblar Massachusetts, ya que el equipo no era el más adecuado para bajar esa media de puntos. Aunque parezca increíble lo hicieron y dejaron el marcador rival en «solo» 94 puntos. En los últimos tres partidos, los Celtics promedian 99.3 puntos recibidos, lo que les colocaría entre las mejores diez defensas de la liga, y no en los puestos de cola que ocupan realmente. Esta gran defensa saltó sobre todo en la primera parte del choque, mientras que en la segunda no fueron tan efectivos. De aquí se saca una conclusión muy clara: si Boston quiere ganar, tiene que conservar ese nivel defensivo y mantenerlo durante más tiempo. Si se consigue esto y el ataque vuelve a funcionar como a lo largo de la temporada, no sería raro ver como los verdes mejoran sus resultados.

Rajon Rondo mostró también cierta esperanza tras la derrota, y alabó el trabajo del cuerpo técnico mostrando su total confianza en ellos. El base siempre se ha mostrado optimista con la situación de su conjunto, y no duda de la calidad de sus compañeros para dar la vuelta a su récord en la temporada. Recordemos que Rondo es el capitán de este equipo, y por ello debe mostrarse como tal. Además, la previa del encuentro se vio algo empañada tras los rumores de traspaso de Jeff Green y Brandon Bass.

Es cierto que la marca de cuatro victorias y ocho derrotas puede ser engañosa, ya que el calendario en este mes de noviembre no ha sido muy favorable para el equipo. Un ejemplo de esta situación son los dos próximos partidos. Los Chicago Bulls y los San Antonio Spurs visitarán el TD Garden en los próximos días; dos rivales complicados para los Celtics. Al termino de este mes, parece que Boston tendrá unos partidos algo más asequibles, y podremos ver si este equipo puede optar a más o no. En palabras del entrenador, en Navidad se sabrá el exacto nivel del equipo.