Mar Gasol se impone en el Staples Center

Séptima derrota, en ocho partidos, en el Staples Center de Los Angeles Lakers, esta vez sus verdugos fueron unos Memphis Grizzlies que se consolidan como los todopoderosos líderes de la conferencia Oeste. El  partido fue extrañamente igualado, más si cabe, si pensamos que Lakers es el peor equipo del Oeste, y Grizzlies el mejor, tanto por sensaciones como por resultados.

 Pero ciertamente los púrpuras salieron decididos a cortar la racha gloriosa de resultados de los de Memphis, marcándose un buen primer tiempo. Unos primeros 24 minutos donde los californianos consiguieron poner en aprietos el solido juego de los Grizzlies. Bien es verdad, que los de Tennessee demostraron esa apatía del equipo ganador cuando sale a jugar contra el colista.

 Lakers se llevaron la primera mitad, se fueron al descanso con un +5 que daba rienda suelta a las ensoñaciones propias del que se sabe perdedor, pero que quizás por una noche sea su noche. Bien es verdad, que Lakers venían de vivir su propio Oasis en esta mitad, cuando se ponían +9 en el marcador. Las vibraciones eran buenas, pero quedaba lo mas difícil, reafirmarse como equipo ante los lideres del Oeste.

 Pero las cosas cambiaron radicalmente en la segunda mitad, los Grizzlies no estaban para perder partidos absurdos ante el colista del Oeste, y lo demostraron saliendo de otra manera en el tercer cuarto. Doce minutos donde los de Memphis no pararon de anotar, y donde los locales se vieron impotentes para seguir el ritmo marcado por unos Grizzlies muy mejorados con respecto a la primera mitad.

 Pero Lakers, pese a ser un equipo perdedor en esta temporada, es un equipo que a base de arreones se planta en los minutos finales con opciones. Son esos instantes donde el rival se lleva el partido, y donde los californianos demuestran no tener soluciones para cuando vienen mal dadas.

 Así es como los púrpuras se plantan en un final de partido apretado, otra vez, contra un líder de conferencia, cuando tiemblan las piernas, cuando el gigante sabe qué hacer, y cuando el colista se convierte en diminuto.

 Las claves del partido las debemos poner en la capacidad defensiva de los Grizzlies, apretaron cuando quisieron, dando una sensación de superioridad más que notable en el tercer cuarto, para ponerse por delante del marcador, lugar donde acabarían el partido para sumar su victoria nº 13, en 15 partidos.

 En todo esto, fue clave el liderazgo de Mike Conley y Marc Gasol. El primero, demostró estar muy por encima de cualquier base local, se iría a los 19 puntos 7 asistencias, siendo básica su dirección de partido en la remontada final de los Grizzlies.

 Pero sin duda, Marc Gasol demostró, de nuevo, tener galones en estos Grizzlies.  El pequeño de los Gasol, ya es todo un gigante, demostrándolo partido a partido en su temporada más completa, desde que es jugador NBA. Marc firmaría un nuevo doble doble, con 19 puntos 11 rebotes, pero sobretodo fue la referencia ofensiva y defensiva de los de  Memphis, y cuando eso se concentra en un sólo jugador, es que ese jugador tiene algo realmente especial.

 El complemento ideal a todo este engranaje de los visitantes, fue Zach Randolph, que ha dado un paso hacia atrás en beneplácito de otros, pero que sigue siendo igualmente destacable entre las piezas de los Grizzlies. Hoy, Zach , acabaría con 16 puntos, 9 rebotes, 4 ofensivos.

 Por parte de Lakers, las cosas siguen igual, siguen sin oler la química que lleva a las victorias. La ofensiva acaba y empieza en Kobe Bryant, y cuando no es así aparecen Jeremy Lin o Nick Young, pero eso no parece ser suficiente para empezar a ganar partidos. Y hoy más que nunca se pudo trasladar al partido.

 La mamba negra acabaría con 22 puntos 4 rebotes, pero Kobe ya no es ese jugador que mantenía a los suyos suspendidos en la magia de la noche, capaz de mantener e incluso llevarse partidos imposibles. Ahora Kobe necesita más, mira a un lado y no lo tiene.

 Hacia ese lugar donde mira La mamba, pudiese ser un lado más interior, esta noche el interior de Lakers fue un pequeño solar, donde sólo Jordan Hill pareció reaccionar por momentos. Complicado ganar con estos peros al líder de la conferencia Oeste.

 Tras el final del partido en el Staples Center, la vida sigue igual para los dos oponentes. Memphis Grizzlies siguen liderando con mano férrea el Oeste, son el equipo de moda, sin lugar a dudas, con permiso de los Raptors en el Este. Por su lado, Lakers siguen colistas, ya son el segundo peor equipo de la liga, y es que a todo hay quien pierda, sino que lo pregunten por Philadelphia.