Desmontamos cómo queda Boston Celtics tras el traspaso de Rondo

Analizamos la actual situación de la franquicia

Una vez reposado un poco la que ha sido la noticia del año en la NBA (con permiso de LeBron), el traspaso de Rajon Rondo a los Dallas Mavericks, ahora al aficionado de Boston – mucho más tranquilo tras haber bajado toda la corte celestial y haberse acordado de cada familiar de Danny Ainge – solo le queda una pregunta, ¿Cómo ha quedado mi equipo tras este traspaso? Respuesta corta: hecho un solar. Respuesta larga, a ello vamos.

1. Actual Plantilla.

Es de suponer que el de Rondo no sea el único traspaso que haga Ainge antes de acabar la temporada. De hecho, si ha habido tanta carrera de última hora para cerrarlo es para poder traspasar a los jugadores que ha recibido Boston – a saber Brandan Wright, Jae Crowder, Jameer Nelson – en Febrero. Además, aquellos jugadores de los Boston Celtics con cierto talento y que no hayan sido drafteados después de las últimas finales –Jeff Green, Brandon Bass y Gerald Wallace – también pueden tener las horas contadas.

Los únicos que pueden tener su futuro en Boston asegurado, o medianamente asegurado, son aquellos jugadores que han recalado en los Boston Celtics en los últimos tres años vía draft y que tienen cierta ascendencia en la plantilla. Estos son, Avery Bradley, Jared Sullinger, Kelly Olynyk, James Young y Marcus Smart. Aunque tampoco sería un disparate que alguno de ellos saliese junto a Jeff Green y Brandon Bass en un trade que acabe con una gran estrella en Boston, especialmente uno de los dos ala-pivots.

2. ¿Qué hemos perdido?

Pues aparte de a Rajon Rondo, jugador franquicia, capitán, líder y último superviviente de la más reciente época de gloria de la franquicia más laureada de la NBA, también salió destino a Dallas al joven ala-pívot, Dwight Powell. Si bien es cierto que se ha pasado casi toda su época como verde en la D-League, su marcha ha cabreado también a no pocos fans debido a que el jugador apuntaba buenas maneras con el tiempo.

3. ¿Qué hemos ganado?

Brandan Wright es quizás el que más nombre tiene de los nombres que recalan en Boston. Un pívot de 27 años y 2.08 metros de altura que estaba siendo una de las referencias en el banquillo de los Mavericks y que le va a venir bastante bien a los Celtics, sobre todo si se implica un poco más en defensa y protege mejor el aro.

Jameer Nelson es un base de 32 años y 1.87 metros de altura que anota más de lo que asiste, aunque esto tampoco lo hace mal, y que vendría a ser el suplente de la gran apuesta de los Boston Celtics en estos momentos, Marcus smart.

Jae Crowder, por último, ha llegado este alero de 24 años y 1.98 metros de altura, que vendría a dar minutos de descanso al ahora jugador franquicia, Jeff Green.

Una Trade Excepction de unos 13 millones de dólares, que aligerará las cuentas de Boston de cara al siguiente verano y deshacerse de un contrato tóxico, como era el caso de Vitor Faverani, que ha sido cortado hoy.

4. Rondas del Draft.

También hemos obtenido una primera ronda del draft de Dallas, que será altísima y que se une a la que ya teníamos de Clippers, que será igual de alta. La buena noticia es que con el desarme que se ha producido en el equipo, la nuestra va a bajar bastante con la esperable caída que sufrirá el equipo en la clasificación

También obtenemos una futura segunda ronda, con lo que el margen de maniobra de Danny Ainge en los próximos años será de 9 primeras rondas y hasta 10 posibles segundas rondas.

5. Madre de Dios, ¿Qué puedo esperar de este equipo?

El plan de Danny está claro y así lo ha explicado él en alguna ocasión. Su manera de entender la reconstrucción es o mediante la adquisición de una o varias estrellas mediante traspaso, o mediante el draft. Lo primero está francamente difícil salvo que haya alguna franquicia dispuesta a soltar a un gran jugador a cambio de un paquete compuesto por un par de jugadores más que válidos (Green y Bass), algún joven talento (Sullinger u Olynyk) y alguna ronda; lo segundo, como hemos visto, es una lotería, el aspecto positivo es que tenemos un montón de boletos y el General Manager tiene un objetivo claro, Jahill Okafor.

Por último, pese a tener un gran margen financiero, la llegada de cualquier Agente Libre queda descartada por la imposibilidad histórica que ha tenido Boston para atraer a ninguno con renombre.