El vendaval Plumlee arrasa a Denver
Denver Nuggets 96 - 102 Brooklyn Nets
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Los Nuggets llegaban a Brooklyn, tras haber sido masacrados en Charlotte, para enfrentarse a unos Nets que recuperaban a Brook Lopez, baja los últimos 8 partidos por problemas en la zona lumbar.
Pero el regreso del pívot quedó rápidamente en un segundo plano, ya que no tardó Mason Plumlee en atraer los focos hacia su espectacular evolución. Su gran actuación, junto con la eficiencia ofensiva de un reaparecido Joe Johnson (27 puntos, 11/19 TC), permitió a Brooklyn mantenerse en el partido cuando más apretaban los Nuggets, guiados por un colosal Ty Lawson (29 puntos, 9 asistencias) y el siempre explosivo «Manimal» Faried (20 puntos, 14 rebotes). Los números de Plumlee no fueron tan espectaculares como el de estas tres estrellas, pero sin duda fue el astro que más brillo en la noche neoyorquina. Sus 19 puntos, 13 rebotes, 3 tapones y 2 robos no reflejan la importancia del pívot de segundo año en la victoria de su equipo, 102-96, en un ajustado final en el Barclays Center.
El partido comenzó con un parcial de 8-0 visitante, pero rápidamente Johnson y Plumlee dieron señales de estar muy concentrados. El buen movimiento de balón de los de Hollins, que tenían en Jack a su director de orquesta, dio la vuelta al marcador a mediados de cuarto. Los Nets mantuvieron esa ventaja hasta al final (30-27), en lo que estaba siendo un partido claramente marcado por la efectividad ofensiva de ambos equipos.
Con el segundo cuarto llegó el retorno a la pista de Lopez, que salía por primera vez como suplente desde noviembre de 2008, su año rookie. Con la segunda unidad en pista, los Nets consiguieron algo de aire en el luminoso, 47-37, gracias a unos buenos minutos de Morris, que confirmaba su buena actuación ante Detroit. Pero volvió Lawson para establecer la igualdad al marcador. El base de Denver anotó 17 puntos en esta primera mitad, acercando a su equipo a 58-54 al final de la primera mitad.
Tras el descanso se siguió con el juego igualado del segundo cuarto, pero con Brooklyn siempre mandando en el marcador. Denver se obcecaba con los tiros de triples, especialmente Wilson Chandler, que acabó el partido con un 1/9 desde esta distancia. Tuvo que ser Faried, imponiendo su potencia en la zona, quien mantenía lo suficientemente cerca a su equipo en espera de una nueva aparición de Ty Lawson, que con un triple ponía por primera vez delante a su equipo desde el primer cuarto, 67-65. Los Nets atravesaban un importante bache ofensivo, pero se las arreglaron para mantenerse en el partido, finalizando el cuarto sólo uno abajo, 77-76, gracias a la aportación de Brook Lopez.
Los Nuggets siguieron apretando en defensa en el inicio del último parcial, abriendo una pequeña brecha en el marcador, 85-78 tras 3 minutos de juego. Pero ahí es cuando se pudo ver a un Plumlee completamente desatado, revolucionando el juego local y despertando al público, que no dudó en corear su nombre tras las espectaculares acciones (tanto en defensa como en ataque) del pívot sophomore. A la chispa de Plumlee le siguió la implacable frialdad de Joe Johnson, poniendo a Nets de nuevo con el mando en el marcador, 97-89 a menos de 3 minutos para el final. Los Nuggets no encontraban respuesta. Faried cedía el rebote ante Plumlee y, con un Lawson maniatado, las segundas espadas de Denver no ofrecían respuesta. Los de Shaw desorganizaron su ataque e intentaron situaciones de 1vs1 que sólo encontraban el aro como resultado. Al final, un robo de Karasev selló la victoria para los locales.
Los Nets consiguen su segunda victoria consecutiva y dejan su balance en 12-15. Además de Plumlee y Johnson, destacaron la dirección de Jarrett Jack, supliendo con solvencia la baja de Deron Williams, que sigue convaleciente de sus problemas en el gemelo derecho. Jack aportó 17 puntos y 8 asistencias. Además, Hollins contó con un creciente Sergey Karasev, que con 12 puntos consolidó su puesto en el quinteto inicial. Brook Lopez jugó tan sólo 7 minutos, y dio muestras de estar lejos de su forma. Aún así, el pívot anotó 6 puntos, dejando clara su facilidad anotadora.
Por parte visitante, sólo Hickson aportó algo positivo desde el banquillo, con 10 puntos en los escasos 12 minutos de los que dispuso. Chandler y Afflalo contribuyeron con 11 cada uno, pero sus porcentajes de tiro dejaron mucho que desear, especialmente Chandler, que falló 12 de sus 17 tiros. Los de Shaw se quedan en un balance de 12-17, muy lejos de los puestos de play-offs en la competida conferencia oeste.
Los Nets jugarán su próximo partido ante Boston, el próximo día 26 y en un muy buen horario para los aficionados españoles, las 7 de la tarde. Denver jugará ese mismo día pero algo más tarde, a las 3 de la madrugada, cuando recibirá en casa a los Timberwolves.