Los Grizzlies echan de menos a sus titulares en Washington

MEMPHIS GRIZZLIES - WASHINGTON WIZARDS

Fuente: Keith Allison (CC)
Fuente: Keith Allison (CC)

Los brujos de la capital han logrado su segundo triunfo de forma consecutiva, después de una mala racha en la que les estaba costando mucho imponerse. Llegaban de pasar por encima de los Hornets, mientra que los Grizzlies no pudieron con los Boston Celtics.

Esta noche el Verizon Center ha acogido un gran partido de baloncesto entre los Memphis Grizzlies y los Washington Wizards. Los Osos Pardos confirmaron horas antes del encuentro las bajas por descanso de Marc Gasol, Tony Allen y Zach Randolph, junto a la lesión de Mike Conley. Los locales por su parte presentaban la baja de Garrett Temple debido a que se resintió de una antigua lesión ante los Hornets, tampoco pudieron contar con el brasileño Nenê Hilario, que no pudo acompañar al equipo ya que nacieron sus gemelos.

Quintetos iniciales:

  • Memphis Grizzlies: B. Udrih, C. Lee, J. Green, J. Green, K. Koufos.
  • Washington Wizards: J. Wall, B. Beal, P. Pierce, D. Gooden y M. Gortat.

El partido arrancaba con unas débiles defensas que permitieron muchos tiros liberados de salida, y numerosos despistes que ayudaron a animar el partido. Marcin Gortat mostraba su superioridad en la pintura ante los teóricos reservas del conjunto rival, mientras que la línea exterior de los Grizzlies catapultaba con facilidad a los suyos pero sin llegar a alejarse en el electrónico. En el banco podíamos apreciar como la pareja formada por Zach Randolph y Marc Gasol conversaba durante el transcurso. Los despistes de los capitalinos daban ventaja a uno Memphis que sabían interpretar sus ventajas. Tanto Kostas Koufos como el polaco dominaron la zona en los primeros compases, pero fue el griego el que ayudó a los suyos a aventajarse por 33-26 al finalizar el primer periodo.

La entrada de Ramon Sessions en el segundo cuarto dio otro ritmo diferente al juego que transmitió mejores sensaciones en la escuadra que dirige Randy Wittman. El encuentro estuvo un tiempo parado debido a que fue necesaria la revisión de los árbitros para finalmente considerar falta flagrante tipo 1 de Bradley Beal a Jordan Adams, por soltar un codazo al proteger el balón. Cuando el partido parecía estar muy tranquilo apareció Paul Pierce para transformar un triple que levantó a todo el pabellón, y posteriormente una serie de robos que pusieron a los Wizards por delante. Los Grizzlies empezaron a despertarse del sueño vivido en los primeros 12 minutos. Al descanso los locales vencían por 47-60.

Tras el paso por los vestuarios los de la capital se propusieron romper la igualdad que había en el electrónico. Ambos conjuntos pudieron dar descanso a sus jugadores que habitualmente van más cargados de minutos y ello llevó a nuevas oportunidades para los reservas. El martillo polaco continuó destrozando el juego interior de los de Tennessee.

En el último y definitivo periodo vivimos la transición final hacia un final que no fue nada reñido. David Joerger tomó la decisión de dar descanso a los jugadores más desequilibrantes y el equipo no pudo competir a excepción del primer cuarto, en el que fue muy superior, contra los Washington Wizards. Se notó mucho que un equipo contaba con casi todos sus jugadores y que el otro quiso se lo tomo en modo de transición. Toure’ Murry pudo debutar con el conjunto que dirige Randy Wittman.

Los de Memphis volverán a casa para recibir a los Milwaukee Bucks y los Wizards se quedarán en casa para enfrentarse a los Sacramento Kings. Ambos encuentros se disputarán la madrugada del sábado al domingo.