Reggie Jackson explota ante los Grizzlies

Memphis Grizzlies 95 - 105 Detroit Pistons

Los Memphis Grizzlies llegaban a Detroit con la importantísima baja de Mike Conley (resentido de su tobillo desde el encuentro contra los Boston Celtics del pasado viernes) y con Beno Udrih ocupando el puesto de base titular que dejaba la baja el de Arkansas.

Por su parte, los Detroit Pistons contaban en sus filas con Tayshaun Prince y Andre Drummond totalmente recuperados de las lesiones que ambos sufrieron el pasado sábado en el partido contra los Utah Jazz, mientras Greg Monroe sí que causó baja para los de Steve Van Gundy a causa de la lesión en la rodilla que sufrió en el entrenamiento del lunes, aunque este último afirmó que no cree que se pierda muchos partidos y será duda para el partido contra Philadelphia 76ers.

Ya en el partido, los entrenados por David Goerger no parecían notar la baja de su base titular, ya que arrancaban el partido con un 18-30 en el primer cuarto, aunque ya empezaban a mostrar alguno de los síntomas que les acabaría contando el partido: muchas pérdidas de balón (acabarían el partido con 16), y sus interiores Marc Gasol y ZachRandolph  (espectacular el recibimiento que dieron en el Palace of Auburn Hills a este último, como cada vez que regresa al estado al que llevó a la Final Four de la NCAA) teniéndose que trabajar muchísimo cada canasta.

Aún así, Memphis Grizzlies conseguiría llegar al descanso con una ventaja de 15 puntos en el marcador (la máxima llegó a ser de +17), que duraría hasta que Reggie Jackson decidió que esta noche era su noche y que iba a bailar con -a – Beno Udrih. Y así fue. Jackson dominó completamente a un Udrih que no sabía nunca cómo defender al ex-jugador de Oklahoma City Thunder, que cuando no quería penetrar o anotar tras pick and roll (acabó el partido con 23 puntos), abría el balón, encontrando siempre a sus interiores en buenas posiciones para el tiro (career high de 20 asistencias).

En resumen, una pesadilla para Udrih y los Grizzlies que poco a poco perdían su ventaja, y el delirio para los aficionados locales, que estaban viendo cómo un jugador suyo estaba haciendo morder el polvo al segundo mejor equipo de la liga.

El resultado fue un +14 y un +11 en el tercer y último cuarto que daba la victoria por 95-105 a los Detroir Pistons.