Ellis y Parsons se llevan la victoria ante la débil defensa de los Thunder

Partido importante el que hemos podido disfrutar en la madrugada del miércoles al jueves en Oklahoma City, partido en el que se enfrentaban los dos últimos equipos en puestos de Playoffs en la conferencia Oeste.

Los Mavericks llegaban al partido en el séptimo puesto de la clasificación con un récord de 45 victorias y 29 derrotas. Por otro lado, los Thunder son sus más inmediatos perseguidores con un récord de 42 victorias y 32 derrotas, pero mucho más centrados en la pelea con los Pelicans que en intentar alcanzar a los Mavs.

El último encuentro de Dallas se saldó con derrota ante Indiana Pacers mientras que, en el caso de los Thunder, llegaban con una victoria más en el casillero tras vencer a los Suns en su último partido.

En el primer cuarto comenzó igualado, pero volvió a mostrarnos uno de los graves problemas de los Thunder, su mala defensa, que permitió a Dallas anotar con mucha facilidad en los primeros minutos, tanto debajo del aro como en tiros de media distancia. Los Thunder se apoyaron en Enes Kanter y su gran inicio de partido en la faceta anotadora para mantenerse en el partido pero, a lo largo de todo el cuarto se mostraron más incómodos sobre el parqué, sobre todo Russell Westbrook, incapaz de anotar ante la buena defensa de los Mavs.

Comenzado el segundo cuarto el partido continuó por el mismo camino, Dallas anotaba con mucha comodidad bajo canasta con Stoudemire cuajando una gran primera mitad desde el banquillo y aprovechando el desbarajuste defensivo de los hombres de Scott Brooks, que mostraban una deficiente preparación tanto a la hora de las transiciones defensivas como en la defensa interior. Los locales comenzaron el segundo cuarto con Morrow como líder en ataque, anotando varias canastas desde la media distancia. La mala racha de Russell Westbrook continuó llegando al descanso con 2 de 10 en tiros de campo pero compensados por la gran actuación de Morrow que sirvió para disimular la sangría de puntos anotados por Nowitzki en los últimos minutos del descanso.

Tras el descanso en el primer minuto de la segunda mitad llegó el primer problema para OKC, Steven Adams cometía su cuarta falta en el partido, lo que le hizo pasarse mucho tiempo en el banquillo. En estos primeros minutos los Thunder comenzaron más enchufados llegando a ponerse por delante por primera vez en todo el partido. Esta mejoría coincidió con el resurgimiento de Russell Westbrook y la falta de acierto de los Mavericks. En este cuarto y gracias a un triple asistimos a la llegada de Dirk Nowitzki a los 28.000 puntos en su carrera. Con el paso de los minutos, Dallas fue recobrando las sensaciones de la primera mitad impidiendo la escapada de los Thunder llegando al último cuarto con el marcador igualado.

En el último cuarto fueros los Mavs los que comenzaron más enchufados, llegando a colocarse 10 puntos arriba en los tres primeros minutos gracias a aumentar la intensidad en defensa. La defensa continuaba siendo el mayor problema de los Thunder lo que complicaba la tarea de remontar el encuentro. Pero llegaron los minutos finales y Russell Westbrook demostró que puede dar la vuelta a una mala noche y celebró su décimo triple-doble de la temporada poniendo a los Thunder por delante en el marcador a falta de 4 minutos para el final. Por parte de los de Dallas fue Parsons el que tomó las riendas del equipo en ataque, haciendo mucho daño a la débil defensa de OKC. El partido llegó al último minuto con los Mavericks 3 puntos por delante en el marcador. A flata de 35 segundos, Westbrook acercaba a un punto a los Thunder pero una gran canasta de Parsons devolvió la ventaja a Dallas, dejando solo 13 segundos a los Thunder, los cuales desaprovecharon dos oportunidades por medio de Russell Westbrook que intentó anotar dos triples. Finalmente Ellis anotó uno de los tiros libres que puso el 135-131 final.

Con esta victoria, Dallas Mavericks se consolida en la séptima plaza del Oeste, mientras que los Thunder continuaran inmersos en una lucha por el octavo puesto y con muy malas sensaciones un un nuevo partido en el que quedó demostrado que Oklahoma City Thunder y su entrenador, Scott Brooks, no tienen peligro a la hora de jugarse la última canasta del partido.

Dallas Mavericks volverá a jugar en la madrugada del jueves al viernes ante los Rockets. Por su parte, los Thunder se enfrentarán en la noche del viernes al sábado a los Grizzlies en una final más por alcanzar los Playoff.