La apisonadora de los Warriors también maltrata a los Grizzlies
Memphis Grizzlies 86 - 101 Golden State Warriors
Victoria sin contemplaciones de Golden State Warriors en este primer partido de las Semifinales de la Conferencia Oeste ante unos Memphis Grizzlies que no supieron encontrar el antídoto para frenar al equipo del «cuasi» MVP 2015, Stephen Curry. Partido marcado por la fuerza del bloque de los locales, y por la ausencia de un plan concreto de los visitantes.
Llegaban los Warriors a estas Semifinales de Conferencia , claro favorito en el Oeste, tras ocho días de descanso después de endosarle un 4-0 a los New Orleans Pelicans, y se fueron de este primer partido de la serie con la sensación de que su eliminatoria contra los Grizzlies podrá volver a ser otro remanso de paz para ellos.
Pese a que los Grizzlies llegaban a este primer encuentro, tras una placida serie ante los Blazers, firmando un 4-1 ante los eternos aspirantes. Los de Memphis comenzaban su nueva eliminatoria, muy castigados por la ausencia de su base titular, un Mike Conley básico para la ofensiva de los visitantes.
Con los Grizzlies, excesivamente castigados por la baja de Conley, los de Golden State solo tuvieron que jugar ofensivamente como saben, la fluidez en ataque de los locales fue suficiente para que hiciesen acto de presencia las lagunas actuales de los visitantes, y que así, el partido se decantase fácilmente para los Warriors.
El partido fue un castigo continuo para unos Memphis Grizzlies que lejos de mostrar su mejor nivel defensivo, único camino factible para ganar a estos Warriors, se centraron en rivalizar con su adversario en ataque, y este fue el principio del fin para ellos.
Sin las buenas defensas que trajeron a los Grizzlies a las Semifinales de Conferencia y jugando a meter más canastas que los Warriors, y en Golden State, los visitantes no tardaron nada en perderse entre la velocidad y el acierto local.
Si bien la insistencia en el juego interior con Randolph y Gasol siendo productivos, y sacando del partido por faltas a Green y Bogut, dio sus frutos, no fue suficiente para frenar el vendaval exterior de los de Golden State.
Por su parte los Warriors jugaban a placer, con problemas en el interior con sus titulares, pero jugando con facilidad desde el exterior dominaron los tres primeros cuartos e incluso pudieron saborear un +20 de diferencia en el tercer cuarto.
Liderados por la inmensa figura de Stephen Curry, en lo que era la previa de lo que significara su primer MVP de la NBA, el genial base de Akron firmaría para los suyos, 22 puntos, 7 asistencias y 4 robos, y contagiaría a su equipo el ritmo electrizante que tanto daño hizo a los visitantes.
Acompañándole, el acierto exterior del cañonero de L.A., Klay Thompson, que añadiría 18 puntos, 6 asistencias y 3 rebotes, siempre sirviendo de perfecto contrapunto a las genialidades de Curry. Sumándose a la fiesta en Golden State Draymond Green, muy productivo, lo que las faltas le dejaron, o un Marreese Speights, que desde la segunda unidad, fue vital para contrarrestar el poder interior de los Grizzlies.
Por el bando Grizzlie, solo Marc Gasol y Zach Randolph hicieron daño real a los locales, Gasol firmaría 21 puntos, 9 rebotes y 3 robos, y Randolph se iría a los 20 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias, pero la ausencia de acierto exterior, y de ningún tipo de defensa, que pudiese restar potencial a los Warriors, hizo que los de Memphis malvivieran en el partido de hoy.
En conclusión, primera victoria de la serie para los todopoderosos Golden State Warriors, donde importa más la sensación de superioridad que un 1-0 , que si bien es un buen camino para llegar hacia las finales de conferencia, no nos habla de la distancia sideral que a día de hoy , hay entre estos Warriors y sus rivales, los Grizzlies.