Vassilis Spanoulis ya tiene hijo feo

Primera final que pierde el griego

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Las grandes citas del deporte siempre estarán rodeadas de ciertas dosis de misticismo, datos morbosos, precedentes, estadísiticas, y hechos, muchos hechos. Y en este hay un tipo que destaca, o desacaba, por encima del resto, ¿su nombre? Vasileios Spanoulis.

Para situarnos, este jugón se presentó el martes en Madrid con 3 Euroligas a sus espalgas, habiendo disputado 3 Final Four y habiéndose proclamado MVP de todas y cada una de ellas, esto ya es digno de estudio. Pero, por si no lo sabías, vamos con el dato que hacía que se tambalease cualquier casa de apuestas. Felizmente casado con Olympia Chopsonidou, es padre de tres hijos, ya, ya se que no te importa, pero ojo, la mujer del apellido impronunciable había llegado embarazada a las tres citas anteriores en las que su marido había logrado reinar en Europa… ¿Contento?

Ya tenemos todos los ingredientes encima de la mesa, pero…

“Nosotros también tenemos embarazada”  decía Sergio Rodriguez en la previa a la gran final

Spanoulis mostraba sus cartas e17786181551_b3cbfe7d09_ol vierenes, se presentó con 0 de 11 a los últimos 3 minutos del partido ante CSKA, y ahí se mostró intratable, 4 tiros encestados de manera consecutiva dieron la victoria a los suyos y el pase a la final.

Su leyenda quedaba a un partido de alargarse hasta el infinito y más allá. Pero ayer no fue su día, 3puntos, 3 asistencias, 4 pérdidas y -2 de valoración.. el mismo partido horrible que ante CSKA, pero la virgen no vino a verle en esta ocasión.

Jaycee Carroll amargó la noche de un jugador desquiciado en los momento finales.

«Estoy acostumbrado a jugar contra Spanoulis de cuando estaba en el Panathinaikos. Siempre está diciendo cosas, y burlarse del rival es parte de su juego. Nos decía que no éramos nadie en el mundo del baloncesto, y ahora estoy orgulloso de decir que sí lo somos» palabra de Maciulis.

Además, Spanoulis puso, junto a Rudy, el punto feo de la noche, dando el griego un pelotazo en la cabeza del balear.

«Es muy buen jugador pero habla demasiado, estaba siendo irónico y perdí los nervios»