James Harden, víctima de una maldición

El jugador ha sido hechizado

FUENTE: Foto de Singapore Sports Council (CC)
FUENTE: Foto de Singapore Sports Council (CC)

Después del espectáculo que dio James Harden en los dos primeros partidos de la final del Oeste, en los que mantuvo en vilo a toda la afición de los Golden State Warriors, un hombre se alzó como el salvador de los de la bahía de San Francisco.

Se que estás pensando en Stephen Curry, o como mucho en Klay Thompson, pero nada más lejos de la realidad. El verdadero héroe de los Warriors es el rapero Lil B.

¿Por qué? Resulta que este curioso personaje dice haber «patentado» el famoso cooking que usa James Harden durante los partidos y asegura que este le ha copiado, y por tal osadía decidió castigar al jugador de los Rockets con una maldición por lo que resta de playoffs.

¿El resultado? Estrepitoso ridículo de los texanos en el primer partido de maldición, derrota 115-80 en Houston y 3-0 en el global, algo que jamás ha sido remontado y que pone casi imposible el sueño de los Rockets de verse en la final. Y para colmo, James Harden hizo un partido terrible, 17 puntos (3/17 TC 1/5 T3), 3 rebotes y 4 asistencias y -31 para los de McHale con él en pista.

El cachondeo llega hasta el punto en el que Lil B afirma «le avise antes del último partido, y no me hizo caso. Sus Rockets perdieron por 35 puntos, el mismo número que lleva su excompañero Kevin Durant, que también está maldito en este momento».

Pintan bastos para los Rockets, con 3-0 en su contra y su estrella siendo víctima de una  maldición. ¿Reconocerá el bueno de Harden el origen de su baile y se librará del hechizo?