En Salt Lake City sobran los millones

Los Jazz tiene 23M para maniobrar

fuente: tm lizzy irwin (cc)
fuente: tm lizzy irwin (cc)

Ayer publicábamos en SomosBasket el límite salarial para la próxima temporada, situado en 70 millones de dólares. Este aumento, superior al esperado en un primer momento, abre un gran abanico para todas las franquicias de la NBA. Algunas buscarán liberar salarios, otras traer picks del Draft y así todos y cada uno de los objetivos que tenga cada equipo en el mercado.

El caso de los Utah Jazz es el típico de un equipo en un proceso de reconstrucción, con una fuerte base y el núcleo joven necesario para devolver a la franquicia a lo más alto del Oeste. Se cuenta con jugadores con talento y, sobre todo, una identidad de juego muy clara establecida por Quin Snyder desde que llegó al puesto de entrenador.

Pero centrémonos en la economía de la franquicia y en el roster. De momento hay 9 jugadores bajo contrato: Dante Exum, Alec Burks, Gordon Hayward, Derrick Favors, Rudy Gobert, Trey Burke, Rodney Hood, Joe Ingles y Grant Jerrett. Además de haber varios jugadores con contrato no garantizado y otros, a la espera de firmar.

De entre estos, sólo Hayward, Burcs y Favors cobran más de 10 millones anuales, por lo que hay dinero de sobra para el resto de la plantilla, compuesta por contratos de rookies, no garantizados y bajos. Hay que analizar qué jugadores se quedarán en la plantilla y ver cuáles saldrían traspasados o directamente no firmarían con el equipo.

  • PG: Dante Exum, Trey Burke, Raul Neto, Bryce Cotton, Olivier Hanlan
  • SG: Alec Burks, Rodney Hood, Elijah Millsap
  • SF: Gordon Hayward, Joe Ingles, Christopher Johnson
  • PF: Derrick Favors, Grant Jerrett, Trey Lyles, Trevor Booker
  • C: Rudy Gobert, Tibor Pleiss, Jack Cooley

Un total de 18 jugadores para formar el roster de los Utah Jazz y obviamente todos no podrán estar en el equipo de Snyder. En la lista aparecen en azul aquellos que son rookies y en rojo los que tienen contrato no garantizado. Los que tienen más opciones de quedarse fuera son Cotton, Hanlan, Johnson, Booker y Cooley.

El brasileño Neto ha llegado recientemente a un acuerdo con la franquicia, mientras que el germano Pleiss ya se ha desvinculado del Barca. Además el pick de primera ronda, Trey Lyles, también ha firmado su contrato con la franquicia mormona.

Con estos tres fichajes ya hay 12 jugadores en el roster y faltaría por incluir otros tres. La continuidad de Trevor Booker parece clara, el año pasado completó una buena temporada y su contrato no garantizado es muy interesante para aquellos equipos que quieren liberar salarios. Elijah Millsap es otro que la pasada campaña demostró un buen nivel y podría continuar para completar la rotación en las alas. Así, Lindsey y Snyder tendrían que decidir entre Cotton, Hanlan, Johnson y Cooley para el último puesto de la rotación.

Entre estos cuatro, el más lejano a la continuidad es Johnson, mientras que Cotton y Cooley los que más han demostrado para seguir, especialmente el primero. Aunque los Jazz podrían optar por la opción de Hanlan y dejar al canadiense como cuarto base.

Una vez que la plantilla esté cerrada, Lindsey deberá decidir qué hacer con esos 23 millones que tienen en Salt Lake City. En la agencia libre no quedan grandes nombres a los que persuadir, por lo que todo apunta a que habrá movimientos en traspasos. En estos movimientos los Jazz podrían adquirir picks del Draft y contratos basura a cambio de contratos no garantizados, por ejemplo:

  • Utah Jazz recibe: Gerald Wallace, Kevon Looney
  • Golden State Warriors recibe: pick primera ronda 2016 y contrato/s no garantizados

Esto es sólo un ejemplo, pero Utah puede ayudar a equipos que quieran liberar salarios, como pueden ser los Warriors si finalmente deciden no contar con Wallace. Estos trades darían a los Jazz o bien jugadores veteranos que ayuden a sus jóvenes, o bien otros jugadores interesantes con los que contar.

La plantilla no está del todo cerrada, pero sin duda en Salt Lake City tienen una gran base, formada por buenos jugadores, un gran entrenador y una identidad clara y sólida. Para completar esto disponen de muchos millones, que irán aumentando según las temporadas pasen por el aumento del margen salarial. Sin duda en Salt Lake City sobran los millones, pero también, las grandes esperanzas que hay puestas en este espectacular bloque.