Los Boston Celtics llevaban varios años detrás de David Lee

Al menos, desde la época del "big three"

Fuente: Keith Allison (CC)
Fuente: Keith Allison (CC)

David Lee hará su debut con los Celtics en este mes de octubre, pero la búsqueda del pívot se remonta hace más tiempo de lo que la mayoría de los aficionados podían haber esperado.
El 6’9» pies, estaba en el radar del presidente de operaciones de los Celtics, Danny Ainge, desde sus días como jugador en la Universidad de Florida. En aquel entonces, un atleta de otro deporte (béisbol) fue el que abrió los ojos del GM Verde y quiso asegurarse de que los Celtics pusieran su debida atención en Lee:

«Lo vi jugar en la Universidad de la Florida cuando era un joven», dijo Ainge en la conferencia de prensa de presentación de Lee en Waltham. «Recuerdo estar trabajando fuera cuando Andy Van Slyke, (jugador de los St. Louis Cardinals) me llamó y me dio un scouting completo de David y me dijo que debía hacer todo lo posible para llevarlo a los Celtics. Nos tomó 10 u 11 años hacer honor a ese scouting, pero aquí estamos”.

Van Slyke parece que no falló al mostrar su atención por Lee, a pesar de que cayó en lo profundo de la primera ronda y fueron los Knicks quienes lo escogieron.  Fue en su segundo año con los neoyorquinos cuando, el nacido en Saint Louis, empezó a hacerse notar en la liga, imprimiendo mucha energía saliendo desde el banco y convirtiéndose en una máquina de dobles dobles.
Con el paso del tiempo Lee se fue desarrollando como una estrella ofensiva, lo que le posibilitó jugar dos All-Star, además de ganar un campeonato recientemente con los Warriors. Pero esto no quita que su lugar en la bahía de San Francisco haya sido ganado por Draymond Green. Ante la posibilidad de vestir de verde y volver a la costa Este, el ex de los Knicks no dudo ni si quiera un momento… aunque sus recuerdos en el TD Garden no sean de los más felices.
En el año 2007 con el Big Three de Garnett/Pierce/Allen atravesando su primer año los por entonces New York Knicks de Lee llegaban al TD Garden:

Recuerdo estar en el vestuario y que algunos compañeros, tras leer el informe previo que nos pasó nuestro cuerpo técnico dijeran: “No son tan buenos”. Era un partido para la televisión nacional y yo era el sexto hombre por ese entonces. Cuando entré a cancha ya estábamos 30 puntos abajo. Me acuerdo que quise hacer un mate en un contraataque y Garnett me metió un tapón tremendo que terminó con la pelota en la cuarta fila. Ahí dije… “ésta no es nuestra noche”. El TD Garden explotaba de gente eufórica… desde ese momento dije “éste es un gran lugar para jugar”.

Más allá del mal desempeño de los Knicks por esos tiempos, los Celtics mantuvieron un ojo puesto en el pívot. Tanto es así, que lo quisieron tentar a unirse al por entonces equipo subcampeón de la liga (los Celtics venían de caer en 7 partidos frente a los Lakers en las finales del año anterior). Pero el poco margen salarial con que contaban los de Massachusetts terminó por decantar la decisión.
Por ese tiempo todavía no había firmado un gran contrato, por lo que declinó la oferta de los Celtics por cinco millones y accedió a los 79 en cinco años que le brindaba la franquicia de Oakland.

Tengo mucho respeto por ellos (el big Three). Creo que ahora mirando en retrospectiva y después de haber ganado un campeonato y de haber peleado en postemporada los últimos tres años de manera consecutiva lo entiendo más.»
“Porque uno puede pasar por la liga y hacer dinero, pero ser parte de una carrera por los playoffs y sobre todo después lo que hemos logrado este año hace que vea las cosas de manera diferente y valore más a esos Celtics de por entonces y por supuesto a la Franquicia.»
«Como sabéis, no es fácil en absoluto. La cantidad de decepciones que tienes que pasar, la cantidad de cosas que tienes que hacer para avanzar en los playoffs – incluso llegar a entrar en ellos en la NBA de hoy es difícil – se necesita mucho. Se requiere de un esfuerzo colectivo por parte del cuerpo técnico, los jugadores, los dirigentes… Así que tengo mucho más respeto por ello ahora de lo tenía antes de esta temporada.»

Cinco años más tarde, Lee finalmente ha llegado a Boston para terminar el último año de ese acuerdo de seis que inicialmente firmó con los Warriors. El roster de los Celtics es muy diferente ahora, pero la admiración que tiene el jugador de 32 años de edad para con la organización se mantiene intacta.

«Es un equipo que compite», dijo Lee del juego de los Celtics el año pasado. «Es un grupo de chicos que juegan muy bien en equipo, y creo que el sistema que el entrenador Stevens ha puesto en pista es muy eficaz. Ahora es sólo cuestión de dar un paso más. ¿Y qué significa ese paso?, no lo sé. Es demasiado pronto probablemente para decirlo. Pero creo que vamos a ser un mejor equipo que el año pasado, y eso… es muy emocionante.»