El tiempo se acaba para Zach Randolph y los Memphis Grizzlies

Será una de las plantillas más veteranas

 

Fuente: Mark Runyon (CC)
Fuente: Mark Runyon (CC)

 

Los Memphis Grizzlies afrontan una nueva temporada llena de retos con una de las plantillas más veteranas de la competición. Tras poner contra las cuerdas a los actuales campeones pese a las lesiones de Mike Conley y Tony Allen, las expectativas son muy altas en el estado de Tennessee.

El anillo es el objetivo, sin embargo, los fichajes realizados este verano no invitan al optimismo. Se esperaba la llegada de un anotador puro que al final nunca llegó. Las nuevas caras: Matt Barnes y Brandan Wright no resuelven las carencias de la plantilla a la que parece faltarle un poco de chispa en ataque para llegar hasta las finales. Al contrario. Barnes y Wright son jugadores muy físicos y excelsos defensores. Este verano la franquicia apostó por reforzar su estilo de juego, olvidándose de su punto débil: la anotación exterior.

Jugadores como Mike Conley (27 años), Jeff Green (29 años) y Marc Gasol (30 años) están disfrutando de sus mejores años de baloncesto. Sin embargo otros jugadores como Randolph (34 años), Tony Allen (33 años), Vince Carter (38 años) o Matt Barnes (35 anos) se encuentran en pleno declive físico.

Especialmente importante para los Grizzlies es el caso de Randolph, único anotador puro del equipo. Al acabar la temporada tendrá 35 años, y pese a que su rendimiento no ha bajado sensiblemente sí es cierto que sus números durante la temporada pasada fueron los peores desde su llegada a Memphis. ‘Z-BO’ ha ayudado a hacer de Memphis sólidos candidatos al anillo durante los últimos años, pero ¿lograrán alguna vez alcanzar la cima?

Marc Gasol acaparó los titulares este verano cuando decidió seguir en Memphis Grizzlies durante la agencia libre. Pero según se acerca la temporada, la clave del éxito de los Grizzlies también por supuesto en Zach Randolph.

Los Grizzlies han sido candidatos en la conferencia oeste desde que en 2011 eliminaron a los San Antonio Spurs cuando estos acabaron la temporada regular en primera posición del oeste, pero nunca han alcanzado las finales. La franquicia sigue apostando por la fórmula del juego interior y defensa que les ha servido para competir al máximo nivel durante las últimas cinco temporadas, pero en la era del «small ball», muchos quieren que Memphis adapte su juego al de un equipo triplista. Con dos años más de contrato, los Grizzlies cuentan con Z-BO pese a sus 34 años. Una cosa es segura: sus oportunidades de ser campeones  están menguando – especialmente si los Grizzlies no pueden ir un paso mas allá de ser un equipo consistente.

Uno de los jugadores mas sólidos de la liga

Raldolph llegó a la NBA después de un año en Michigan State. Jugó a la sombra de Rasheed Wallace en sus dos primeras temporadas con Portland, Randolph promedió unos escasos 2.8 puntos y 1.7 rebotes por partido en su primera temporada y 8.4 puntos y 4.5 rebotes en la segunda. Pero Z-BO apenas dispuso de minutos, promediando solo 5.8 minutos por partido en su temporada de novato y 16.9 en su segunda temporada.

Con un total de 15 temporadas de baloncesto de gran nivel y con 34 años, Randolph no muestra ningún bajón en su rendimiento. Después de esas dos temporadas de escasos minutos, ha promediado siempre más de 15 puntos y 8 rebotes por partido, excluyendo la temporada 2o11-2012 cuando las lesiones solo le permitieron jugar 28 partidos durante la temporada.

Sus sólidos números son comparables sorprendentemente con los de otra estrella: Tim Duncan. El ala-pívot de San Antonio es ligeramente mejor en cada estadística, pero la diferencia es menor de lo que se pueda pensar. Los promedios de Duncan por 36 minutos de juego a lo largo de su carrera son de 20.4 puntos, 11.5 rebotes y 2.3 tapones. Randolph no es el muralla defensiva que Duncan es, pero ha promediado números similares en ataque a los de ‘The Big Fundamental’. Eso sí, Duncan tiene cinco campeonatos.

La importancia de Randolph en los Grizzlies

Randolph no solo encarna el estilo de juego de la organización de Memphis, sino que los Grizzlies son mucho más efectivos cuando está sobre la cancha. Cuando Z-Bo estuvo sobre la cancha la temporada pasada, el promedio ofensivo del equipo (puntos anotados por cada 100 posesiones) fue de 106.1, y el promedio defensivo (puntos encajados por 100 posesiones) de 99.9. Cuando Randolph estuvo en el banquillo, los números del equipo empeoraron sensiblemente, sobretodo el ataque -promedio ofensivo de 98.8 y promedio defensivo de 100-. Los Grizzlies tuvieron una ventaja de 6.2 puntos por 100 posesiones con Randolph en la cancha pero una desventaja de 1.2 puntos cuando el estuvo en el banquillo.

Candidatos a todo

Mientras cada vez más equipos optan por una alineación con cuatro bajitos, los Grizzlies mantienen su estilo de juego basado en estatura y defensa. Casi les funciono el año pasado –forzaron el sexto partido frente a los Warriors en las semifinales de la conferencia oeste pese a las lesiones de Conley y Allen– tal vez solo les faltó un poco de suerte.

Esta temporada los de Tennessee apuestan más que nunca por juego interior y defensa. Es una apuesta segura porque cuando juegan bien (que suele ser casi siempre) ganan. Pero puede ser que se necesite algo más para alcanzar las finales. La solidez es necesaria para el éxito de la franquicia pero tal vez se necesite un poco de chispa, un nuevo revulsivo, para ir un paso mas allá.

A Randolph le quedan dos años de contrato. Hasta ahora su rendimiento apenas ha bajado, pero cuando en dos veranos el jugador tenga 36 años veremos cuánto está dispuesto a ofrecerle la franquicia en un nuevo contrato y cuánto dinero está dispuesto a dejar de ganar el jugador por quedarse en Memphis. Tal vez la sensación de urgencia sea la chispa que el equipo necesita para llegar más lejos que nunca. Pese a la decepción de no haber incorporado a un anotador este verano, el equipo tiene que ser consciente que es ahora o nunca y usar esa motivación para llevarlos a lo más alto.