Brad Stevens recibe una falta técnica… 600 días después

Seiscientos días han pasado desde la última (y única por entonces) falta técnica que hayan pitado a Brad Stevens en su carrera como entrenador en la NBA. Dicho de otra manera, el head coach de los Celtics ha dirigido a su equipo en 122 partidos de forma consecutiva sin recibir ninguna falta técnica.

Pero el pasado viernes en la derrota frente a los New York Knicks, el ex entrenador de Butler paró el contador de días sin recibir la mencionada penalización. Y, como no podía ser de otra forma, tratándose de un partido de pretemporada y con Stevens como protagonista, su señalización fue más que rigurosa.

La acción sucedió en el tercer cuarto: el pívot celtic Tyler Zeller se disponía a finalizar un contraataque cuando recibió un contacto por parte del rival, sancionable con falta bajo el punto de vista de Stevens. Entonces él se acercó a la pista para protestar, demasiado cerca quizás:

«Me dijeron que entré en la pista, pero no lo sé. Obviamente tenía que protestar tras la entrada a canasta de Tyler. No he visto la repetición, así que no hablo más.»

Sin embargo, hubo una acción más curiosa aún, en la que se pudo apreciar que los árbitros no tenían la intención de pasar desapercibidos. Jonas Jerebko fue sancionado con otra falta técnica por, supuestamente, ir desde el banquillo a levantar a su compañero Jared Sullinger que cayó tras una dura falta de Kyle O’Quinn. Finalmente fue anulada tras apreciar en la repetición de la jugada que el forward sueco simplemente esprintaba cerca de la línea de tres puntos próxima al banquillo verde.