Derrick Williams: el correcaminos de los Knicks
Desplega su mejor juego a campo abierto
Derrick Williams fue drafteado en todo un puesto 2 por los Timberwolves, de una elección de esas magnitudes es normal que esperes un gran rendimiento; pero no fue así. Williams se estancó y fue jugando menos minutos cada temporada; fue traspasado a los Sacramento Kings pero allí su rendimiento no fue nada mejor y, de hecho, le quitaron las restricciones este verano y, como agente libre sin restricciones, firmó por los New York Knicks.
En esta pretemporada Williams no causó otra cosa que no fuera ilusión; grandes partidos con un gran rendimiento y dando la sensación de que sería la sorpresa de la temporada; pero en estos primeros meses su aportación ha sido muy irregular y Lance Thomas le ha adelantado en la rotación debido a su escasez de recursos… Tiene buenos partidos cuando puede jugar a su estilo.
Está continuamente corriendo y saltando sobre el parqué, con grandes vuelos espectaculares, algo poco rentable en algunos tramos pero muy útil para cambiar el ritmo del juego. Además, su buen hacer y sus ganas de aprender son muy valorados por el cuerpo técnico y eso le ha permitido recuperar su estatus dentro de la rotación, jugando más minutos y teniendo más importancia.
Si consigue catapultar su juego basándose en esas virtudes que ya tiene, seguro que estamos ante un jugador importante en el futuro a corto/medio plazo de la franquicia neoyorquina.