¿Está equivocándose Carlisle con las rotaciones?
Muchos expertos en USA critican su reparto de minutos
Una de las máximas en el mundo del deporte dice «Por muy bien que lo hagas, siempre habrá alguien que te critique». Y ni siquiera el segundo mejor entrenador de la NBA, tal y como ha sido nombrado Rick Carlisle por ESPN y varios expertos en la mejor liga de baloncesto del mundo, está a salvo de las críticas.
Recapitulemos. Richard Preston Carlisle, entrenador profesional de la NBA durante 14 temporadas, ha obtenido récord positivo en todas ellas excepto en su última temporada con Indiana Pacers, en la que cosechó un balance de 35-47. Desde su aterrizaje en los banquillos como entrenador jefe siempre ha logrado sacar lo mejor de jugadores que, en teoría, no se suponía que pudieran dar el nivel que finalmente mostraron bajo su batuta. No hay más que recordar a los Mavericks campeones de la NBA en 2011 en cuyas filas destacaron un Jason Kidd y un Pedja Stojakovic apunto de retirarse y que contaba en su plantilla con Mahinmi, Brendan Haywood o Brian Cardinal. Esos Mavs de 2011 fueron capaces de batir en Playoffs a unos jóvenes y prometedores Portland Trail Blazers, a los vigentes campeones, Los Angeles Lakers (4-0) y a unos pujantes Oklahoma City Thunder. Y, si por esto fuera poco, en las finales vencieron a los todopoderosos Miami Heat de LeBron, Wade y Bosh.
Las mayores críticas a Carlisle vienen por el uso desproporcionado de minutos de sus jugadores principales, los cuales superan en muchos de los casos los 30 años de edad, veamos:
Dirk Nowitzki, 37 años y 31 minutos por partido. En los últimos tiempos, han sido continuados los problemas de Dirk para aguantar el ritmo de juego, así como sus quejas por su estado de forma.
Deron Williams, 31 años y 31.9 minutos por partido. En este caso, Deron no es un jugador tan veterano como la estrella alemana de los Mavs, pero las precauciones deben de tomarse debido a su historial médico. A favor de Carlisle hay que decir que la rotación de bases, igual que en el caso de la rotación interior, no da para mucho más.
Zaza Pachulia, 31 años y 29 minutos por partido. El veterano pivot está cuajando una de las mejores temporadas de su carrera (incluso ha llegado a sonar en algunos círculos para estar presente en ell All-Star), y se ha convertido en una de las referencias interiores de los texanos. En verano llegó como un «parche» en la zona, y sin duda está rindiendo por encima de lo esperado.
Devin Harris (32 años y 20 minutos por partido), Barea (31 años y 22 minutos por partido), Raymond Felton, el cual ha sido recuperado por Carlisle para el baloncesto (31 años y 27.7 minutos) son los veteranos que más minutos disputan. Entre los menos veteranos, y que disputan una cantidad de minutos importantes encontramos a Wesley Matthews (29 años y 32 minutos) y Chandler Parsons (27 años y 25 minutos); ambos salidos hace poco tiempo de sendas lesiones de gravedad.
Por el otro lado tenemos los jóvenes de la plantilla, que se supone que llegaron en verano para dotar de frescura y hacer la rotación de los Mavericks más amplia, sin cargar de minutos a los veteranos. Entre ellos encontramos a Dwight Powell (24 años y 18 minutos), que si se ha ganado un hueco a pulso en la rotación gracias a su aporte de intensidad y a la supuesta debilidad del juego interior de los Mavericks. Javalee McGee (27 años y 10 minutos por partido), que ha supuesto un extraño caso, ya que llegó lesionado, debutó tarde, y nunca se ha acoplado a las necesidades de Carlisle sobre el parqué. Jeremy Evans (28 años y 8 minutos). La rotación exterior no está tan cara en los Mavericks, pero Evans no ha sabido hacerse un hueco en la rotación. John Jenkins (24 años y 9 minutos) y Justin Anderson (22 años y 6.7 minutos). El rookie ha sido una de las mayores decepciones en los Mavericks en lo que llevamos de temporada, principalmente porque se esperaba que el ex de la Universidad de Virginia se convirtiera en uno de los robos del pasado draft.
Rick Carlisle parece no confiar en las nuevas piezas y haberse confiado en absoluto a los veteranos de la plantilla, cosa que puede ser criticable en el supuesto de que las aspiraciones de los Dallas Mavericks fuera aspirar a llegar lejos en la postemporada (algo que desde dentro de la franquicia se descarta por completo). En realidad, la aspiración de la franquicia es ser competitiva esta temporada, lograr ofrecer una gran imagen durante toda la temporada regular y durante los partidos de Playoffs que el equipo disputase en caso de lograr la clasificación para la postemporada, y así posicionarse de cara a atraer un agente libre importante durante el próximo verano y poder dotar a Dirk Nowitzki de un equipo competitivo de cara al gran baile.
Es cierto que Carlisle debería de repartir los minutos de otro modo, tratando de que los jóvenes se desarrollen de cara al futuro. Pero, si los resultados le avalan y su trayectoria también… ¿Por qué debería de cambiar de método? ¿Estarán trabajando los menos habituales como deberían en los entrenamientos para tratar de aumentar la cantidad de minutos que su entrenador les asigna?
Sea como fuere tanto la afición de los Mavericks, los expertos y la franquicia, solo pueden hacer lo mismo que hacen los resultados de Rick Carlisle, darle la razón.