¿Es Noah Vonleh un fiasco?
El jóven ala-pívot de apenas 20 años continúa sin producir
Ante todo la respuesta es no, aunque no un no demasiado rotundo, sino un no confiado en que con apenas 20 años es demasiado pronto como para darse por vencido. Noah Vonleh es lo que sacaron los Portland Trail Blazers en el traspaso de Nicolas Batum, uno de sus mejores jugadores y todavía lo suficientemente joven como para no haber alcanzado su techo. Con la temporada del francés en los Hornets, y aunque abandonase Charlotte en el mercado este verano como agente libre, el acuerdo sería ya bastante más ventajoso que para los de Oregon, que apostaron por el ala-pívot sophomore de la Universidad de Indiana y que de momento no han visto mucha recompensa. Sin embargo, Vonleh es una apuesta de futuro, y por tanto la paciencia es clave.
El jugador de 2,08m. y natural de Massachussets tan solo estuvo un año en la NCAA, y por tanto ya en el momento del draft se le consideraba con mucho trabajo por delante para desarrollarse como jugador NBA. Sin embargo, sus cualidades físicas – enormes manos, gran envergadura y derroche de esfuerzo – y su aparentemente buen tiro exterior – 48,5% en Indiana – le hacían un nombre muy interesante para cualquier franquicia. Si tenía éxito podía ser el perfecto hombre grande del futuro, capaz de rotar en los bloqueos y además espaciar el campo con su juego de perímetro. Un scout decía esto en un artículo del Boston Globe previo al draft del año pasado:
«Para alguien tan joven con sus habilidades, envergadura y lo duro que juega, no creo que falles con él, al menos que esté absolutamente mal de la cabeza, algo que no parece».
Sin embargo los Hornets se cansaron de esperar en menos de un año, y lo mandaron a Portland a cambio de Batum, que si bien está rindiendo como un All-Star también es agente libre a finales de curso. En su temporada rookie Vonleh apenas tuvo oportunidades, por detrás de jugadores como Al Jefferson, Michael Kidd-Gilchrist, Cody Zeller, Jason Maxiell, Bismack Biyombo o Marvin Williams. Sólo 25 partidos – y 2 sin mayor importancia en la D-League – en los que se vieron algunos detalles, como su tiro de tres – 38,5% en 5 de 13 lanzamientos, una muestra muy pequeña – y su esfuerzo en los tableros, liderando a Charlotte en rebotes por 36 minutos, con 12.
Por otro lado, el mismo artículo cita a un ejecutivo de un equipo de la Conferencia Este que tenía diferentes impresiones de Vonleh tras su año en Indiana y que reflejan mucho más la situación real de su estado de progresión:
«Es el tipo de chico, como un montón de novatos, muestran muchos detalles pero nunca consiguen hacerlo a la vez. Creo que así fue en Indiana. Creo que si eres un ojeador y acertaste con el partido, le viste a su mejor nivel y volviste en plan ‘wow’ y hablando maravillas de él. Y si escoges un partido diferente, puede que veas 4 puntos, 2 rebotes y 5 faltas en 20 minutos. Y pienses, ‘¿de qué está hablando este tío?’. Realmente es o éxito o fallo con él. Pero ahí algo definitivamente ahí».
Los Blazers le han dado un puesto en la rotación desde la lesión de Meyers Leonard, y a su vuelta le han mantenido en el puesto a pesar de que sus números son bastante pobres. Portland no se juega nada esta temporada y lo mejor que pueden hacer es dar minutos a sus más jóvenes, pero Leonard también podría hacer ese mismo argumento ya que es agente libre restringido y la franquicia querrá saber qué tiene en él. Sin embargo Vonleh es aparentemente el jugador con más potencial de todos los interiores que componen la plantilla ahora mismo, y en el futuro podría ser una pieza clave en los próximos Blazers ganadores. El que dispute tantos minutos sin producir mucho un prospect es algo que todas las escuadras en reconstrucción presencian en algún punto; sin ir más lejos Dante Exum en Utah la temporada pasada.
Como decía Dave Deckard en Blazer’s Edge recientemente:
«Ningún jugador grande tiene el potencial que él tiene. Un equipo en la situación de Portland tiene que ponerlo. Es como comprar un ticket de lotería. Las opciones de ganar son ínfimas, pero y si toca… wow. Los minutos son baratos y hay de sobra en un equipo ganando el 40% de sus partidos. Incluso si las apuestas están contra Vonleh, la inversión de Portland es muy pequeña en comparación con la posible recompensa».
Desde principio de campaña hemos venido avisando de la falta de espacio en cualquier combinación titular de los Blazers, y esperando que alguno de los Al-Farouq Aminu o Maurice Harkless desarrollaran el suficiente tiro como para desatascar el ataque. Sin embargo la principal clave para el funcionamiento del quinteto del entrenador jefe Terry Stotts era que uno de sus grandes tiradores se emparejaran o bien con Mason Plumlee o bien con Ed Davis, los dos interiores que viven cerca del aro. Leonard partía con la titularidad ganada tras su buen final de temporada, y Vonleh sería su relevo.
Con la ausencia del ala-pívot de Illinois, Stotts decidió darle su puesto a Vonleh a pesar de que, por ejemplo, su rating ofensivo saliendo desde el banquillo era 70 – una cantidad que ni los 76ers jugando sin Ish Smith podrían soñar -. De esa manera rodearía al joven de origen liberiano de mejores compañeros y le daría minutos más consistentes – el cambio de roles apenas le ha supuesto un aumento 3,1 minutos por partido de todas maneras -, confiando que entonces pudiera relanzar su desarrollo.
Decir que sus números son mediocres sería faltar a la verdad, puesto que en más tiempo de juego que en Hornets, está promediando más pérdidas, menos tapones y menos puntos, y su porcentaje de triples se ha reducido a un 17,6%. Comparado con Davis o Leonard es aparente que Portland se beneficiaría bastante de darle sus minutos a otros jugadores, pero como ya dije anteriormente, Vonleh es una apuesta de futuro, y como toda apuesta hay que darle paciencia. Los Blazers piensan, todo parece, que será mejor para su crecimiento, y por tanto para el del equipo, presenciar muchos momentos frustrantes si ello se traduce en confianza, consistencia y mejora, aunque de momento las cifras indiquen lo contrario.
Es por tanto pronto para responder a la pregunta con la que iniciabamos el artículo, ya que con 20 años los Blazers todavía están tratando de averiguar de qué disponen en Vonleh.