Era casi irremediable que el Movistar Estudiantes cesase a Diego Ocampo después de la nefasta temporada que está haciendo el conjunto colegial. La derrota ayer en la cancha de UCAM Murcia fue la gota que colmó el vaso para el consejo de administración de los de la calle Serrano, que esta mañana han anunciado el despido del entrenador gallego, escudándose en el mal hacer del equipo y a los malos resultados obtenidos hasta el momento, último clasificado en la Liga Endesa y a dos victorias de los puestos de permanencia, una situación límite que exige un cambio inmediato en el equipo.
Una situación extraña, ya que, pese a la mala racha de resultados, gran parte de la afición confiaba en el proyecto de Diego Ocampo, un entrenador que estaba dando rienda suelta a los jóvenes, como el caso de Darío Brizuela o Juancho Hernangómez, jugadores que con otro entrenador habrían tenido complicada su explosión en la Liga Endesa, además, contaba con el respaldo del vestuario, que confiaba en sus métodos. No obstante, una mala, malísima, planificación de la plantilla ha podido con su puesto, una vez más, pagan justos por pecadores.
Paradójicamente ha sido el UCAM Murcia el equipo que ha dado la estacada final a Diego Ocampo, en su partido 50 en Liga Endesa y ante el equipo que debutó como primer entrenador, equipo al que llevó a la mejor temporada de su historia.
Según ha anunciado el propio club, el nombre del nuevo entrenador se dará a conocer en las próximas horas, suena con fuerza el nombre de Sergio Valdeolmillos. Sea quien sea, tiene una papeleta complicada, este domingo el Herbalife Gran Canaria visita el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid, un rival inmerso en la pelea por entrar en la Copa del Rey.