Los Pistons no pudieron culminar la remontada en Indiana
Detroit Pistons 104-112 Indiana Pacers

En un clásico duelo del salvaje Este, los Indiana Pacers y los Detroit Pistons se enfrentaron en el Bankers Life Fieldhouse, con la victoria de los locales, en su tercera victoria ante los Pistons, con un marcador final de 112-104, donde una primera mitad (69% TC) de los Pacers, liderados por Paul George (30 puntos) que llegaban en back to back, dejó la victoria en manos de los de Vogel. Mahinmi volvió a la titularidad tras perderse todos los partidos de 2016 por una lesión en la parte baja de la espalda.
El partido comenzó con el trío formado por George Hill (17 puntos en total), Paul George (que anotó sus 6 primeros tiros, continuando los últimos 7 anotados en Detroit, que acabaría con el encontronazo con Marcus Morris) y Myles Turner (16 puntos) anotando fácil, llegando a ganar por más de 10 puntos en poco más de 7 minutos. Ellos serían los más destacados en ataque durante todo el partido. Por el otro lado, los Pistons tardaron en asentarse en la cancha y solo Marcus Morris fue capaz de desahogar la ofensiva de los de Van Gundy. Con la llegada de las segundas unidades, los Pistons dispusieron de mejores ocasiones, con un Aron Baynes muy peleón (acabaría con 4 rebotes ofensivos en 11 minutos). El acierto de los Pacers fue tal que llegaron al final de los 12 primeros minutos con un 75% en tiros de campo, cifra muy inusual, y con un marcador de 34-22.
El segundo cuarto comenzó con unos Pistons más acertados en defensa, que consiguieron forzar pérdidas pero sin conseguir excesivos puntos en contraataque. Con Andre Drummond secado completamente en ataque, los de Míchigan usaron sus otras grandes armas ofensivas: penetraciones y tiro de tres. Se llegó al descanso con una canasta del rookie Joe Young que dejó el 62-48 en el marcador.
Comenzada la segunda mitad, la constante lucha en la pista entre Marcus Morris y Paul George propició que los dos acabaran en el banquillo con cuatro faltas. Esta situación permitió a los de Detroit acortar distancias, con un gran juego ofensivo, así como no dejando anotar tan fácil a los Pacers, algo perdidos en su ataque sin su líder Paul George. La maquinaria Piston consiguió liberar a sus tiradores con facilidad y Reggie Jackson, Tolliver y el rookie Darrun Hilliard no dudaron en aprovecharse de esta situación. El único hoosier constante en ataque durante este período fue Jordan Hill (acabaría el partido con 12 puntos). Con un parcial en el cuarto de 25-33 a favor de los Pistons, se intuía un final apretado, muy característico de los partidos de los Pacers y así fue.
Se llegó a los últimos 12 minutos de juego con unos Pacers bastante nerviosos, marrando ocasiones sencillas al contraataque, en contraste con unos Pistons motivados, conocedores de los problemas de los de Indiana con cerrar los partidos, aunque quizá demasiado dependientes del tiro exterior. Con CJ Miles haciendo un partido regular (-13 con él en cancha) Paul George volvió a la pista para aliviar la escasa anotación de sus compañeros, consiguiendo viajar asiduamente a la línea de tiros libres. Por parte de los Pistons, Reggie Jackson siguió causando estragos, apenas fallando tiros (Acabaría con un 10-15 en tc) y un Tolliver erigido como héroe, enchufando todas de tres. Pese al esfuerzo, a falta de algo más de un minuto, George Hill consiguió meter una canasta muy forzada cuando solo quedaba 1 segundo de posesión, poniendo a los Pacers en una situación muy cómoda: 8 puntos por delante, por lo que lo poco que quedaba de partido fue un mero trámite.
Con esta victoria, los Indiana Pacers se colocan 7ºs del Este con un récord de 27-24, mientras que los Detroit Pistons están justo por detrás con un récord de 27-25. El próximo rival que visite Indiana serán los Lakers este lunes, en la que será la última visita de Kobe al pabellón de Indianapolis, mientras que los Pistons acogerán en su feudo el lunes a uno de los equipos más en racha de la NBA: Los Toronto Raptors.