D.J. Augustin, a la espera de noticias sobre su posible futuro en Denver

En las últimas semanas hemos leído varias declaraciones tanto de Michael Malone como de Tim Connelly alabando a D.J. Augustin, el base que aterrizó en Denver en febrero en el trade que envió a Randy Foye a los Thunder. El jugador tuvo un impacto muy positivo en el juego de la franquicia, sobre todo en la faceta anotadora, tanto que no tardó en hacerse su sitio como reserva de Mudiay e incluso algunas veces vimos Malone emplear a los dos jugadores juntos en situaciones de “small-ball”.

Darryl Gerard Augustin (D.J. para los amigos y las crónicas), clase 1987, lo hizo bien y se habría ganado con creces una renovación con la franquicia de Colorado, pero el jugador, con 28 años ya cumplidos, ya no es un chiquillo y conoce bien la realidad del negocio de la NBA, por eso prefiere no hacerse demasiadas ilusiones, y seguir la evolución de las situaciones día tras día. Así se sinceró con la prensa local:

“Este será mi cuarto verano como agente libre. Nunca se sabe lo que puede pasar. Ya me prometieron cosas en años anteriores que luego no se cumplieron. He tenido mis esperanzas en el pasado, pero las cosas no acabaron saliendo”.

El base se convertirá en agente libre sin restricciones y los Nuggets ya comentaron que les gustaría tenerlo de vuelta. En 27 partidos disputados Augustin promedió 11.7 puntos y 4.7 asistencias, muy cerca del 4.9 registrado por Mudiay en esta faceta.

La mayor contribución D.J. la dio al equipo con su excelente 40% de acierto desde la línea de los tres puntos, segundo solo a Darrell Arthur en esta estadística y aportando acierto exterior en los últimos partidos en los cuales Danilo Gallinari no jugó por problemas al tobillo.

Su continuidad en los Denver Nuggets sin embargo está en el aire.

“Voy a dejar las cosas en manos de dios y de mi agente y voy a relajarme. Mi esposa está a punto de dar a luz a nuestro tercer hijo, así que tengo cosas importantes en la vida y vamos a ver lo que pasa. Me encanta estar aquí, espero que las cosas funcionen, pero soy consciente que puede pasar de todo”.

La situación en Denver no es tan fácil: Augustin llegó para remplazar al lesionado Nelson y lo hizo tan bien que se ganó su lugar en la cancha, relegando a Jameer a un rol de segundo plano. Pero Nelson, que firmó un contrato por tres temporadas el año pasado, espera volver en plena salud y recuperar su sitio en el equipo.

Qué Augustin vuelva o menos, está claro que aprovechó a lo grande los meses en Denver, demostrando sus habilidades:

“Venía de vivir una situación muy dura en Oklahoma, las cosas allí no funcionaban. Hicimos lo correcto: mi agente habló con la franquicia para que me buscasen una salida, si se hubiese presentado una buena oportunidad más favorable para mi carrera. Y pasó, por suerte todo fue bien y tuve esta grande ocasión”.

¿Algún consejo para los más jóvenes?

“La NBA es un negocio. Nosotros como jugadores solo tenemos que jugar, sin resentimientos. Hay que pensar en ti mismo y tener en mente que todo puede pasar. En realidad en la NBA no se preocupan demasiado de las situaciones personales de cada uno: tenemos familias y las mudanzas y todo esto… pero es nuestro trabajo, es el negocio. Hay que estar preparados para estas cosas. Es la vida que hemos escogido”.

Jameer Nelson o D.J. Augustin: solo puede quedar uno. La situación parece clara en Denver. Y la resolución no es tan fácil como parece: D.J. jugó muy bien desde su llegada, pero va a ser agente libre, mientras que Jameer tiene un contrato en vigor y se merece el respeto ganado en una carrera más que decenal en la NBA.

Una buena una tuerca de roer para Connelly y los suyos, que estudiaran las situaciones de los dos jugadores intentando tomar la mejor decisión para el futuro de la franquicia.