Isaiah Thomas cambia su dieta para poder seguir jugando hasta los 40

El base de Tacoma pretende llegar a los 40 en activo

 

Photo by Odie M
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Cuando pensamos en un jugador activo con 40 años (aproximadamente) que milite en un equipo de la mejor liga del mundo, a todos se nos ocurren diversos nombre a la cabeza: Tim Duncan, Kobe Bryant, Kevin Garnett (muchas y recientes felicidades), Ray Allen, Paul Pierce

Pues bien, ésta es la intención del ‘pequeño’ base de Tacoma. Tras una entrevista, hemos podido conocer las intenciones (en principio una tarea un tanto compleja) del número 4 celtic: unirse al club de los 40. Las declaraciones fueron bien claras, un cambio de dieta para poder conseguir una carrera más longeva:

“No soy tan viejo, pero si ves a los jugadores más grandes, los mejores siempre se hacen cargo de sus cuerpo de la mejor forma”, dijo Thomas, de 27 años. Tú puedes ver a chicos veteranos como Ray Allen. No hay que ir tan lejos como él – en cuanto a cuidar su cuerpo – pero solo quiero jugar a un alto nivel por un largo tiempo«

Durante su aparición en Sirius XM NBA Radio el martes, Thomas añadió:

“Quiero cambiar mi dieta, comer cosas mejores, comer más saludable para prolongar mi carrera. Quiero intentar jugar hasta los 40 años. Esa es mi meta. Eso es lo más importante para mí, cuidar mi cuerpo, transformar mi cuerpo con mejores comidas, poner las mejores cosas en mi cuerpo porque sé qué necesita mi cuerpo. Choco con el suelo mucho, hombre, y mi cuerpo se está dañando”.

El ejemplo más cercano dentro de la parroquia verde ha sido Kevin Garnett. El legendario jugador celtic cumplió recientemente los 40 años, aunque les encante a sus emparejamientos en la pista ya no es la sombra de lo que fue: con el paso de los años KG ha perdido toda intensidad defensiva y todo aporte ofensivo de ala pívot que tuvo. El tiempo pasa factura a todos.

Pero si hay alguien que ha demostrado que no hay nada imposible actualmente en el roster celtic, ese ha sido el bueno de Isaiah. Me siento principal responsable de recordar cómo un base de 1’75 en la NBA, siendo elegido en el Draft en último lugar y no conseguir una estabilidad en la titularidad de ningún equipo, llegó a Massachussets (a base de reticencias por si faltaba algo más) y ha conquistado los corazones de todos los aficionados de la franquicia más laureada de la historia a base de coraje, de nunca rendirse, y de darlo todo en cada partido, y con el principal premio de ser la principal imagen del equipo y consiguiendo su primer All Star.

Isaiah quiere a Boston, y Boston quiere a Isaiah. Sólo el futuro (y los más especuladores y afortunados) saben si se harán eficaces las intenciones de Isaiah y lo más importante, en qué estado de forma.