¿Están los Bulls decantándose por Jimmy Butler?
derrick rose pierde apoyo de la franquicia
Los Chicago Bulls son, sin duda alguna, una de las franquicias cuyo futuro, tanto a corto como a largo plazo, resulta de lo más incierto de la liga. Un fracaso de año que lleva a cuestionarse muchas cosas, desde el cambio de entrenador, hasta las jerarquías en el equipo y la labor de los superiores.
Uno de los temas que más se ha tratado durante las últimas semanas era la, en teoría, obligada elección entre los dos jugadores franquicia de los de Illinois: Derrick Rose y Jimmy Butler.
La situación de Derrick Rose
Bajo mi punto de vista, y si hemos ido siguiendo los movimientos de la franquicia con detenimiento, Rose es el que se encuentra, actualmente, en la situación más precaria. Así lo informó Nick Friedell, de ESPN, asegurando que el futuro de Rose no estaba para nada asegurado en la franquicia de Illinois.
Hay que recordar también que Jen Swanson, que fue contratada en su momento para supervisar la evolución física de Derrick Rose, y además el desempeño de los preparadores físicos del equipo, fue despedida hará un par de semanas, dada la ingente cantidad de lesiones que el equipo había sufrido desde que llegara al cuerpo técnico. Es difícil, sin embargo, no intentar buscarle tres pies a este movimiento, especialmente en un verano en que la franquicia deberá decidir qué hacer para volver a la senda de los PO.
En favor del futuro de Rose hay que decir que, la posibilidad de que tanto Joakim Noah como Pau Gasol dejen la franquicia este verano, obligó a los Bulls a moverse durante los scoutings de los diferentes prospects del Draft de este año, situando su punto de mira en tres interiores diferentes. Esto podría dar a entender que el puesto de Rose (por lo menos esta temporada) podría estar asegurado.
El hecho de que el base deba firmar un nuevo acuerdo el verano siguiente significa, principalmente, que va a tener que jugar cuanto pueda, y lo mejor que sea capaz, para poder volver a firmar ese gran contrato que tanto ansía. Esta temporada ya demostró que poco a poco está recuperando la consistencia en su físico, que su cuerpo puede seguir trabajando de la forma en que lo hacía antes de todas las graves lesiones que tantos partidos le han hecho perderse. Esta extra motivación es lo que me lleva a creer que, de no sufrir ninguna lesión grave de nuevo que le aparte del terreno de juego, Rose va a tener un gran año.
A pesar de esto, Jimmy Butler es el jugador mejor posicionado para ser considerado tanto el pilar del equipo como el jugador franquicia de los Bulls, ya sea por su contrato (podría estar atado hasta 2020), como por ser una referencia en la liga como top-3 en su posición, algo que, a día de hoy, Rose ha perdido.
La situación de Jimmy Butler
A priori, Jimmy Butler era el hombre que parecía estar destinado a ser traspasado durante este verano. Los Chicago Bulls pueden conseguir mucho a cambio de Butler, sin duda más que por Rose, y los problemas que ocurrieron a principio de temporada, más unos obvios «desajustes» en la química del equipo, nos llevaban a pensar que el escolta estaba más fuera que dentro de la franquicia. Pero, ¿sigue siendo así?
En las últimas semanas hemos podido ir observando ciertos movimientos en la franquicia que parecían mostrar su apoyo al ex jugador de Marquette. Podemos retomar de nuevo el despido de Jen Swanson, y el hecho de que sonara el nombre de Travelle Gaines (entrenador personal de Butler) para uno de los puestos de preparador físico. También podemos pensar en el hecho de que la franquicia le pidiera al propio Butler que representara a los Bulls durante la noche de la lotería del Draft, algo que el jugador hizo encantado. Y por último, podríamos pensar también en las últimas palabras de Fred Hoiberg, en que aseguraba que la relación con Butler iba viento en popa:
“Pasar tiempo con Jimmy más allá de los límites del baloncesto es genial. Obviamente este es un verano muy importante para nosotros, y planeo pasar más tiempo con él”.
El propio jugador ha repetido varias veces que no quiere marcharse a ningún lado, que quiere lograr grandes éxitos en los Bulls, y parece que quiere hacerlo como la principal referencia del equipo. Se dio a conocer en su momento que Joakim Noah era uno de los hombres que más en contra estaba del nuevo rol de Butler (resulta difícil ver cómo el hermano pequeño acaba pasando por delante de todos), y con la posible salida del mismo (a pesar de que su agente haya desmentido los rumores sobre su anticipada marcha) el terreno de Jimmy para consagrarse como el líder del equipo se allana bastante.
La decisión de Chicago Bulls
Las decisiones que se puedan tomar este verano estarán condicionadas por dos factores:
- Jerry Reinsdorf, propietario de los Bulls, es un hombre de negocios, y como buen hombre de negocios le gusta ganar dinero (a quién no realmente). ¿Y qué no da dinero? Exacto, un equipo que no llega a PO.
- Gar Forman quiere aferrarse sea como sea a su puesto de trabajo. El GM ha tomado buenas y malas decisiones (estas últimas mucho más abundantes en los últimos tiempos), pero lo que es seguro es que intentará tomar la vía rápida para un arreglo que vuelva a llevar al equipo a PO.
Estos dos puntos son lo que, principalmente, me llevan a pensar que los Bulls no traspasarán a Butler. El equipo quiere volver a ganar cuanto antes, y es el valor más seguro para hacerlo de nuevo. Derrick Rose puede ser también un gran valor, cierto, como he mencionado antes, creo que tendrá un gran año, pero es imposible obviar los últimos movimientos de la franquicia y el hecho de que, de traspasar al base por piezas que no contaran con un gran contrato bajo el brazo, el potencial económico de los Bulls aumentarían tremendamente, llegando a estar alrededor de los 40 millones de dólares.
Es imposible saber a día de hoy qué decisión tomará la franquicia, pero las últimas apuestas de la misma me hacen pensar que los Bulls podrían haber empezado a registrar el nuevo rumbo del equipo.