Elton Brand, una estrella en la sombra

Después de dedicar 17 años de su vida a hacernos disfrutar viéndole en las pistas de la NBA, Elton Brand ha decidido colgar la botas definitivamente, después de que la temporada pasada anunciara esta misma decisión de la que parece que se arrepintió en muy poco tiempo, pues decidió volver con los Philadelphia 76ers. El ala pívot conocido como “Mr. 20-10” pone fin a su vida como jugador profesional con unos promedios totales de 16 puntos, 8.5 rebotes, 2.1 asistencias y 1.7 tapones por partido, formando parte durante 2 temporadas de los Chicago Bulls (20`1 ppp y 10`1 rpp), 7 temporadas con Los Angeles Clippers (20`3 ppp, y 11 rpp), 5 campañas en los Philadelphia 76ers (12`7 ppp y 7`2 rpp), 1 año con los Mavericks de Dallas (7`2 ppp y 4`2 rpp) y otro año más con Atlanta Hawks ( 4`7 ppp y 4`2 rpp).

Esta temporada 2016/2017 está aún bajo el contrato que firmó en verano con los Philadelphia 76ers a razón de un año y 1`55 millones de dólares, pero al ver al equipo de la ciudad del amor fraterno plagada de jóvenes jugadores con talento, se ha dado cuenta del papel secundario que iba a tener, por no decir que iba a ser sencillamente un figurante en la rotación. En 17 partidos que disputó la temporada pasada, obtuvo un promedio de 4`1 puntos y 3`7 rebotes en 13`2 minutos por encuentro, lo que refleja su continuo declive debido al envejecimiento y a las lesiones que le han apartado durante los últimos cinco años, suficientes razones para que el equipo llegara a un acuerdo con el jugador para preparar su retirada.

Desde que era muy joven Brand ya brillaba en esto del baloncesto. Como miembro de los Blue Devils de la Universidad de Duke entre 1997 y 1999 se le podía ver su gran talento ofensivo jugando en el poste y su capacidad reboteadora, sólo hay que ver sus promedios de 17`8 puntos y 9`8 rebotes de media que le valieron para lograr el premio al mejor jugador universitario del año y para alcanzar las finales del campeonato de la NCAA, acompañado del que volvería a ser su compañero más adelante en Los Angeles Clippers, Corey Maggette, dónde cayeron ante la Universidad de Connecticut que lideraba Richard Hamilton con un marcador de 77-74.

Elton Brand llegó a la NBA elegido como el número 1 del Draft de la NBA de 1999 por los Chicago Bulls, un equipo que se encontraba en pleno proceso de reconstrucción tras la retirada de Michael Jordan y la salida de otros grandes jugadores como Scottie Pippen y Dennis Rodman, que llevaron a los Bulls a vivir la época más gloriosa de su historia.

Rápidamente se convirtió en el referente ofensivo junto a Toni Kukočy  Ron Artest de un equipo abocado al fracaso. En su primer año logró unos promedios de 20`1 puntos y 10 rebotes en 37 minutos por encuentro, suficiente para conseguir al final de la temporada el premio al mejor novato del año, galardón que tuvo que compartir con el base de Houston Rockets, Steve Francis, como ya pasó en 1971 con Dave Cowens y Geoff Petrie y en1995 con Jason Kidd y Grant Hill.

En su segundo año continuó a buen nivel con unos promedios casi idénticos a los de su año rookie, pero al final de la temporada, los Chicago Bulls buscaban un cambio de aires de la plantilla, y le traspasaron a Los Angeles Clippers a cambio de su elección del Draft, Tyson Chandler, un jugador procedente directamente del instituto y que en ese momento prometía tener una mayor progresión que la de Elton Brand, sin duda, un movimiento muy arriesgado, pues las lesiones, y los problemas familiares lastraron la estancia de Chandler en los Bulls.

Antes de los días del “Lob City” con Chris Paul, Blake Griffin y DeAndre Jordan, otra estrella era la encargada de llevar al éxito a los Clippers, y ese no era otro que Elton Brand, quién dominaría la zona en Los Angeles durante 7 años, acompañado de su antiguo compañero de la Universidad de Duke, Corey Maggette.

Cuando llegó a L.A. se encontró con un equipo en la misma situación que los Chicago Bulls, por lo que los aficionados angelinos vieron un rayo de esperanza en la llegada de Elton Brand y el objetivo de la franquicia no sería otro que el de rodearle de buenos jugadores para optar a los playoffs.

Con Brand como líder indiscutible de un equipo que contaba con jugadores como Kenyon Dooling, Quentin Richardson, Corey Maggette, Darius Miles, Lamar Odom y Eric Piatkowski entre otros convertía a los Clippers en uno de los equipos más atractivos de la liga, formados por una plantilla de jugadores muy jóvenes y con una gran proyección que devolvería a los Clippers a la postemporada por primera vez desde 1997. Algunos de estos jugadores no cumplieron las expectativas, y otros pasaron por graves lesiones, lo que provocó que una vez más no clasificaran para los playoffs.

Durante los siguientes años, Brand continuaba mejorando en cuanto a números individuales, y consiguió ser escogido para disputar el All Star que se celebró en Philadelphia en 2002, su cuarta temporada en la NBA, aunque lo cierto es que no fue escogido por el público ni por los entrenadores, sino por el comisionado David Stern para cubrir la baja de Shaquille O´Neal. Pero los objetivos del equipo continuaban sin cumplirse, y los Clippers no lograban conseguir la pieza que les faltaba para ser un equipo competitivo.

No fue hasta la temporada 2005-2006 cuando llegaron los éxitos tanto como para Brand como para los Clippers. El ala-pívot conseguía los mejores números de su carrera con 24`7 puntos, 10 rebotes, 2`6 asistencias y 2`7 tapones de media por partido y fue seleccionado para disputar su segundo All Star Game y al final de la temporada regular formó parte del segundo mejor quinteto de la liga. Los angelinos lograron 47 victorias en la temporada, y se clasificaron para los playoffs como 6º mejor equipo de la conferencia oeste, pero no quedó ahí, y tras eliminar a los Denver Nuggets 4-1, lograron el pase a la siguiente ronda por primera vez desde 1975, cuando el equipo aún jugaba en Buffallo con el nombre de “Braves”, liderados por un Bo McAdoo recién nombrado MVP. Una vez en semifinales de conferencia, rompieron todos los pronósticos que afirmaban que los Phoenix Suns de Steve Nash y Amar`e Stoudemire ganarían por 4-0, y llevaron la serie hasta el séptimo partido, pero se quedaron a las puertas de clasificarse para las finales de conferencia por primera vez en su historia, una serie que todos los fans de los Clippers recordarán durante toda su vida por el triple que anotó Raja Bell desde la esquina que le dio la victoria a los Suns en el último segundo de la prórroga y que forzó el 7º partido.

Pero tras una memorable temporada, en la temporada 2006/2007 los Clippers volvieron a su relación con la mala suerte, Brand bajó un poco su nivel, Sam Cassell jugó sólo 58 partidos y Shaun Livingston sufrió una espantosa lesión en febrero, que si eres muy sensible, no te recomendamos que la busques en Youtube. Tras terminar con 40 victorias y 42 derrotas, se quedaron a las puertas de la post temporada, algo que deberían arreglar de cara a la siguiente temporada, pero la mala suerte volvería a Los Angeles en forma de lesión.

En agosto de ese año, durante una sesión de ejercicios de rutina, Brand se rompió el tendón de Aquiles, que requirió cirugía y lo dejó fuera durante toda la temporada, salvo los últimos ocho partidos, en los que promedió 17,6 puntos, 8 rebotes, 2 asistencias y 1,9 tapones por partido.

Después de la temporada 2007-08, en la que los Clippers terminaron 23-59, Brand optó por salirse del último año de su contrato y no ejercer la opción de jugador, para dar a los Clippers la flexibilidad financiera y así fichar un jugador estrella de la lista. Los Clippers hicieron tal que ficharon con un contrato de 5 años y 65 millones de dólares a Baron Davis, quien venía de una gran temporada con los Golden State Warriors (21.8 puntos, 7.6 asistencias, 4.7 rebotes y 2.3 robos por partido). Pero por desgracia para los Clippers, Brand decidió cambiar de opinión y firmó con los 76ers de Philadelphia en un período de cinco años y 82 millones de dólares, algo más de lo que le ofrecían los Clippers. Aunque el equipo pudo sobreponerse a la salida de su estrella (sólo 5 días después de anunciar la decisión de no renovar, ficharon a Marcus Camby, y en febrero llegaría Zach Randolph) no contaban con una estrella encargada de dirigir al equipo.

Brand tuvo que luchar durante toda su estadía con los 76ers por su puesto, pues le llegaría otra grave lesión, esta vez una luxación de hombro en diciembre de 2008, de la que fue operado en unos pocos meses después, que puso fin a su temporada. Terminó jugando durante cuatro temporadas en Philly, pero no volvió a ser el mismo, nunca promedió más de 15 puntos y 8,8 rebotes por partido, y finalmente fue amnistiado en 2012 para hacer espacio salarial y firmar a Nick Young.

Los Mavericks se hicieron cargo de su último año de contrato y jugó un total de 72 partidos con los Mavs, aportando su veteranía en la zona. Después de una temporada en Texas,  terminaría firmando con los Atlanta Hawks para estar en Georgia dos temporadas antes de retirarse por primera vez. Asumió la suplencia que limitaba su tiempo en la cancha a menos de 20 minutos por partido. Su nuevo papel consistía en una presencia sólida que aportaba experiencia en el vestuario y nunca se recuperó el nivel de consistencia que tenía en temporadas anteriores, algo comprensible tras tantos años en la liga, y tras sufrir dos graves lesiones.

Finalmente, tras anunciar su primer retiro de la NBA, decidió volver otro año más con los Philadelphia 76ers, dónde más que jugar, se dedicaría a enseñar el juego interior a los jóvenes que acaban de llegar al equipo.

Quizás Elton Brand no fuera una estrella muy conocida a nivel global, por eso, a parte del apodo de “Mr 20-10” también podríamos llamarle “La estrella en la sombra”, pues coincidir en el tiempo con algunos de los mejores ala-pívots de la historia como fueron Kevin Garnett, Tim Duncan, Chris Webber y muchos otros, hacían pasar algo más desapercibidos sus buenos números. Lo que sí es cierto es que en Los Angeles Clippers sí dejó una gran huella, convirtiéndose en uno de los jugadores más importantes de la historia de la franquicia angelina, y ahora sólo nos toca esperar a ver si el primer número retirado de la franquicia será el número 42 de éste gran jugador, que tan buenos momentos nos dejó para el disfrute de todos y se convirtió en una leyenda en Los Angeles.