La envidia sana de Carmelo Anthony

Tras meses de sinsabores, hoy por fin empieza la NBA. Y lo hace con el equipo que se coronó la temporada pasada, Cleveland Cavaliers, en un encuentro muy especial.

Especial, primero, porque su rival serán los New York Knicks, un equipo renovado al que todo el mundo desea ver si es capaz de una vez por todas de luchar por los playoffs. En segundo lugar, por la celebración que tendrá lugar antes del partido, en la que se entregarán los anillos a los actuales campeones de la NBA.

Así, Carmelo Anthony verá desde el banquillo rival cómo su gran amigo LeBron James y sus excompañeros, Iman Shumpert y J.R. Smith, reciben el anillo, lo que debe de ser un momento difícil para el All-Star. Todo el mundo se hace una pregunta: ¿Qué le rondará por la cabeza al neoyorquino en ese momento?

«Estaré deseando que ese fuera yo».

Esta frase, dicha por el propio Anthony en la previa, revela algo que ya se sabía con certeza: Carmelo Anthony desea conseguir un anillo. Sus ansias por lograr más éxitos de los que hasta ahora ha tenido en los Knicks han sido caldo de cultivo de numerosos rumores sobre su posible salida de la franquicia. Sin embargo, el alero lidera un año más el proyecto de NY, tremendamente ambicioso este año, aunque de momento más por nombres que por expectativas reales. Su «no tengo ni idea» a la cuestión planteada de si lograrían alcanzar las 50 victorias esta temporada es un claro ejemplo de ello.

En cuanto al partido de esta noche, Melo analiza al rival haciendo hincapié en el hecho de la celebración del campeonato y la extramotivación que eso supondrá para los de Ohio:

«Sabemos que ellos van a estar muy motivados por debutar en Cleveland y contra nosotros. La entrega de anillos va a suponer un gran cúmulo de emociones. Pero es algo que nosotros tenemos que aguantar, sobre todo en los primeros compases del partido. Ellos van a tener mucha adrenalina, emoción e ímpetu, por lo que tenemos que resistir ante eso y practicar nuestro juego«.

A pesar de que los Cavs son favoritos, es necesario tener un dato muy en cuenta, y es que los Knicks han ganado el primer partidos de las últimas cinco temporadas, incluido uno a los Cavs hace dos años, curiosamente en la que sería la peor temporada de la historia de los de New York. Fuera como fuera, nos espera un partidazo esta noche.