¿Karl Anthony-Towns o Anthony Davis?
Empieza la pugna por dominar la NBA en unos años
Ahora mismo (casi) nadie cuestiona que el reinado de la NBA pertenece a Lebron James, pero vamos a comparar dos nombres que se postulan como sucesores para el trono en un futuro no demasiado lejano: Karl Anthony-Towns y Anthony Davis.
Dos caminos que, a priori, pueden parecer semejantes pero que tienen diferencias muy importantes.
ÉPOCA UNIVERSITARIA
Para empezar, ambos jugaron en la Universidad de Kentucky, jugando solamente una temporada universitaria antes de dar el salto a la liga profesional. Anthony Davis lo hizo en la temporada 2011/2012, en un equipo con nombres conocidos como el de Kidd-Gilchrist y Marquis Teague, consiguiendo el título para los Wildcats. En cambio Karl Anthony-Towns jugó en la temporada 2014/2015, compartiendo equipo con Devin Booker, Willy Cauley-Stein o Trey Lyles entre otros, cayendo derrotados en semifinales de la NCAA ante un Wisconsin liderado por Frank Kaminsky y Sam Dekker.
Los números de Anthony Davis en la NCAA en los 40 partidos que disputó fueron, 14,2 puntos por partido, 10,4 rebotes por partido y 4,7 tapones por partido.
Los de KAT llamaban menos la atención, ya que en 39 partidos consiguió 10,3 puntos por partido, 6,7 rebotes por partido y 2,3 tapones por partido.
TEMPORADA ROOKIE
En cuanto al impacto mediático generado al aterrizar en la NBA, da la sensación de que Davis gana la partida a KAT.
Anthony Davis fue elegido como primer pick del Draft de 2012 por New Orleans Hornets (tras su año de rookie este equipo cambio de denominación y pasaron a ser conocidos como New Orleans Pelicans). Las razones de su impacto mediático fueron la inclusión del pívot de los Pelicans por Mike Krzyzewski en el roster final de la selección norteamericana para los Juegos Olímpicos de Londres 2012, ya que era el único miembro de la plantilla que aun no había llegado a debutar en la NBA. Además, las opiniones de los analistas ya indicaban desde un primer momento que era un jugador llamado a dominar la competición americana en un futuro, y aunque parezca una nimiedad también hay que recordar la popularidad que consiguió con su curioso aspecto físico, ya que era conocido como «La ceja» por tener un entrecejo muy marcado.
En cuanto al pívot de ascendencia dominicana, recaló en Minnesota Timberwolves como primer pick del draft de 2015. Llegaba entonces a un equipo propicio para jóvenes talentos, en el que jugadores como Ricky Rubio o Zach Lavine cumplían roles principales, y donde Andrew Wiggins, primer pick del Draft 2014 en una elección de Cleveland Cavaliers y que llegaría a la franquicia de Minneapolis en un traspaso a tres bandas junto con Cleveland Cavaliers y Philadelphia 76ers, se erigía como jugador con más proyección de la plantilla.
Esta temporada como rookie es quizá la comparación más justa que podemos hacer de los dos jugadores, ya que Anthony-Towns lleva solamente un año en la liga, mientras que Anthony Davis afronta este año su 5ª temporada en la máxima competición.
ESTADÍSTICAS DE AMBOS JUGADORES COMO NOVATOS
Ninguno de los dos jugadores consiguió llegar a las 30 victorias con su equipo. Mientras que los Hornets de Davis tuvieron un récord de 27-55, los Timberwolves de Towns sumaron únicamente dos victorias más, para un balance de 29-53.
Davis solo pudo disputar 64 partidos, jugando 28,8 minutos por partido, anotando 13,5 ppp, capturando 8,2 rpp, 1,0 app y 1,8 tapones por partido.
KAT el año pasado disputó todos los encuentros en su primera temporada, 82, jugando 32 minutos por partido para 18,3 ppp, 10,5 rpp, 2,0 app y 1,8 tapones por partido.
Es curioso que, causando menos expectación que Davis, KAT ha conseguido hacer un primer año bastante más sólido, con unos números que firmarían la mayoría de jugadores NBA en algún momento de su carrera. De hecho estas estadísticas le han valido para llevarse el galardón de «Rookie of the year» que se entrega al novato del año. Este premio en 2013 no fue a parar a Anthony Davis, sino que de forma unánime se decidió que fuese para Damian Lillard.
ESTILO DE JUEGO
Ambos jugadores ejercen un estilo de juego parecido, dominando la pintura (ambos capturaron más de 10 rebotes por partido la pasada temporada) pero a la vez con un rango de tiro muy amplio, ya que el año pasado KAT intentó 1,1 triples por partido (34,1% de acierto) mientras Davis intentó 1,8 triples por partido (32,4% de acierto). De hecho ambos son sorprendentemente rápidos y ágiles para el tamaño que tienen, por lo que resulta muy complicado encontrar un defensor que pueda frenarles dada su polivalencia. Los dos anotan en torno al 80% de sus tiros libres, pero mientras Davis el año pasado lanzaba 7 tiros libres por partido, Anthony-Towns solamente lanzaba 3,4 cada partido. Además, el pívot de los Pelicans asumió la temporada pasada 18,6 tiros de campo por partido (49,3% de acierto) mientras que el de los Timberwolves lanzó 14,1 (54,2% de acierto).
EXPECTATIVAS PRESENTES Y FUTURAS
Ahora mismo ninguno de los dos se encuentra en un equipo con aspiraciones reales de anillo esta temporada. Si bien parece que Anthony Davis se encuentra en peor posición que Karl Anthony Towns.
Davis ha firmado el año pasado una renovación con New Orleans Pelicans por 145 millones y 5 años. Ahora mismo el equipo, por lesiones o situaciones como la de Jrue Holiday que son ajenas a la franquicia, no está siendo capaz de rodear jugadores de suficiente entidad como para conseguir luchar por los Playoffs. Si no se ven esfuerzos por parte de la franquicia no sería extraño que el jugador pidiera una solución en verano, bien a base de agentes libres o incluso traspasando a Davis a otro equipo que pueda satisfacer sus pretensiones.
Sin embargo, Minnesota Timberwolves con Tom Thibodeau a los mandos parece un lugar prolífico para Anthony-Towns. Junto a Andrew Wiggins debe ejercer ya como líder de la franquicia, y con la presencia de jóvenes como Zach Lavine, Kris Dunn y la consistencia de Ricky Rubio y Gorgui Dieng deben pelear ya esta temporada por un puesto en playoffs. Es un equipo aun joven y con mucho potencial por explotar, pero si el equipo sigue creciendo y no hay fugas inesperadas, en tres o cuatro años quizá podamos estar hablando de los Timberwolves como un contendiente al anillo.