Anthony Davis, suficiente para derrotar a los Wolves

Minnesota Timberwolves visitaba Louisiana para enfrentarse contra New Orleans Pelicans en un partido que era, entre otras muchas cosas, el choque entre dos de los interiores más jóvenes y talentosos de toda la NBA. Hablamos obviamente de Karl Towns y Anthony Davis, los dos ex-Kentucky que se enfrentaban cara a cara para deleite de los aficionados al buen baloncesto. Sin embargo, eso había estado en duda hasta el último momento, pues el de los Pelicans había sido duda hasta el último momento por unas molestias que finalmente quedarían atrás.

Los locales llegaban con una racha de tres victorias seguidas y eso se notó en el arranque, saliendo mucho más enchufados que los de Minnesota liderados precisamente por AD y consiguiendo ventajas superiores a los 10 puntos rápidamente. Davis forzó dos personales a Towns y anotó 21 puntos en el primer cuarto, a lo que los Timberwolves solo pudieron contrarrestar a su manera; forzando jugadas en la pintura y sacando tiros libres y «dos más uno» constantemente. Eso les ayudó a calmar el ritmo del encuentro y acercarse de nuevo hasta el 26-31 del final del primer cuarto. Con el descanso de Davis llegaron los problemas para New Orleans Pelicans y para cuando su jugador estrella volvió a la pista ya se encontraban por debajo en el marcador gracias al ataque de LaVine y la defensa de Dunn. Con la vuelta del ídolo local el equipo fue volviendo a la normalidad, mientras que en los Timberwolves los problemas de faltas de Towns y la mala noche de Wiggins se les empezaban a hacer cuesta arriba; al final 50-53 al descanso.

La ya habitual desconexión defensiva de Minnesota Timberwolves en la segunda mitad volvió a hacer acto de presencia y los Pelicans lo aprovecharon. Tom Thibodeau se hartó a pedir tiempos muertos para intentar solucionarlo, pero nada parecía despertar al equipo visitante de su letargo post-vestuarios. Los Pelicans, cómodos en la pista como nunca, corrían en transición, movían bien la pelota y anotaban con total comodidad hasta el 68-89 con el que terminó el tercer período. Quedaban 12 minutos de la basura tras tal destrucción en el tercero y solo faltaba por saber el resultado final, que sería de 96-117.

Karl Towns vs Anthony Davis, no hubo color

Al igual que el partido en sí, no hubo ningún tipo de debate sobre cuál de las dos promesas de Kentucky fue el mejor. Ya en el primer cuarto, Anthony Davis pasó forzó problemas de faltas a Towns y anotó 21 puntos. Finalmente terminaría con 45, para solamente 9 tantos del interior de los Timberwolves.

El gran duelo deberá esperar a otra ocasión, pues en esta la superioridad de los locales fue demasiado grande para ver un bonito espectáculo.