James Michael McAdoo, el héroe inesperado
Está supliendo a la perfección la baja de David West

Golden State Warriors sufría la lesión de un jugador clave de su rotación, David West. El equipo perdía esa veteranía y minutos de calidad a una plantilla que necesitaba su aportación en los momentos en los que los titulares necesitaban tomarse un descanso. Ese pulgar izquierdo que le hizo abandonar el partido frente a Oklahoma City Thunder en el Oracle dejaba en las manos de Steve Kerr un rompecabezas que debía resolver de la mejor manera posible para intentar dañar lo menos posible la rotación que parecía empezar a funcionar tras las victorias frente a rivales muy complicados como Cleveland Cavaliers u Oklahoma City Thunder. Lo que no sabían era que ese pulgar iba a significar la gran oportunidad de James Michael McAdoo.
Las posibilidades eran muy variadas, Kevon Looney, JaVale McGee, Damian Jones, Anderson Varejao… Pero a nadie se le pasó por la cabeza uno de esos nombres disponibles, James Michael McAdoo. Tras su casi desaparición del equipo en estas dos temporadas, nadie iba a pensar que el ala-pívot procedente de la Universidad de Carolina del Norte iba a ser capaz de tomar esta responsabilidad y ser el encargado de no dejar huérfanos esos minutos que solía tener el nombre de todo un veterano de la liga que ha pasado por equipos como New Orleans, Indiana Pacers o San Antonio Spurs.
James Michael McAdoo llevaba mucho tiempo esperando este momento. En la sombra, se estaba preparando para ello. Él sabía que esto debía pasar tarde o temprano y, como bien supuso, consiguió tener su oportunidad y no podía decepcionar. Su momento llegaba en Houston, partido muy complicado contra unos Rockets de Mike D’Antoni que han conseguido convertir al equipo en toda una revelación y a James Harden como claro candidato al premio de mejor jugador de la temporada. Disfrutó del mayor número de minutos en toda la temporada con 12 en total, que aprovechó para terminar con ocho puntos y dos rebotes. Nadie esperaba que McAdoo fuera la primera opción de Kerr; de hecho, ni el propio Kerr lo sabía, pero ese partido contra los Rockets causó una buena impresión al entrenador de Golden State, que decidió volver a probarlo cuando era más necesario.
En Orlando apenas jugó, 4 minutos, y en Miami ni siquiera llegó a saltar a la pista; pero el equipo llegó a Charlotte y era el momento perfecto para que McAdoo volviera a ser el protagonista. Steve Kerr decidió darle más minutos que nunca. El ala-pívot de los Warriors disputó 20 minutos y nos dejó una gran actuación que fue clave para la victoria de su equipo en un partido que se complicó más de la cuenta. Ocho puntos, siete rebotes y dos tapones. El propio McAdoo está volviendo a disfrutar con el baloncesto. Gracias a la lesión de West ha conseguido salir adelante y no va a parar. Necesita jugar lo mejor posible en estas ocasiones para poder disputarle el puesto a West cuando vuelva a estar disponible. Es su deber, su obligación. James Michael McAdoo sabe que tiene la oportunidad de ser importante en un equipo en el que ya ha sido campeón. Ya tiene su anillo, no va a tener que luchar toda su carrera para obtener uno. En 2015 ya fue premiado, aunque no tuvo participación alguna. No vio ni un minuto de esa final contra Cleveland Cavaliers, pero por lo menos tiene un anillo de diamantes con el Golden Gate y con el número 20 y su apellido grabado en él.
Frente a Los Angeles Clippers, pasó lo mismo. Volvió a tener minutos y respondió a las mil maravillas, 10 puntos, 4 rebotes y 1 robo de balón. Mucha gente no le conocía, otros tantos le ninguneaban por el simple hecho de ser un jugador sin protagonismo en uno de los equipos más odiados de toda la liga; otros le subestimaban por ser un jugador que no había demostrado nada, pero solo necesitaba eso, minutos. O quizá también un poco de cariño, algo que ha recibido en gran cantidad desde que se ha colado en la rotación siendo el héroe inesperado de estos Warriors.
James Michael McAdoo llegaba al Draft de 2014 siendo un jugador con proyección de final de primera o segunda ronda. Nadie esperaba que no sería seleccionado y Golden State lo aprovechó firmándole, ya que Bob Myers sabe lo que hace y conoce su juego. McAdoo nunca tuvo esa oportunidad de jugar a pesar de estar en la plantilla, pero nunca había tenido la opción de demostrar de lo que es capaz. Promediando 16 puntos y 5 rebotes por partido durante su etapa universitaria con los Tar Heels de Carolina del Norte, siempre había deseado demostrar que es capaz de hacer lo mismo en la mejor liga de baloncesto del mundo.
James Michael McAdoo se ha convertido en el héroe inesperado de los Warriors, o quizá lo era para algunos. Lleva todos estos años trabajando duro para conseguir esto y solo tiene que materializar sus oportunidades. Si ahora no lo aprovecha, será un jugador irrelevante para el cuerpo técnico, pero si continúa de la misma manera podríamos estar delante de un jugador con mucha más importancia en la rotación de Steve Kerr.