¿Hasta dónde pueden llegar estos Indiana Pacers?
¿playoffs o algo más que eso? lo debatimos
Una estrella y poco más para salvar los muebles
FERNANDO GARCÍA, @fergarcia303
Los Indiana Pacers parecen que han conseguido la estabilidad que necesitaban y todo gracias a Paul George, el alero y líder del equipo, que tras la confirmación para jugar por 4º vez el partido del All-Star parece que ha vuelto a acordarse de lo que es, una estrella. Aunque ya era el jugador más clutch de la NBA, ahora parece que ha decidido asumir más tiro y echarse al equipo de verdad a la espalda. Tras el anuncio de su cuarto All-Star todo son victorias y unos números personales dignos de un MVP: es el George que estábamos esperando desde el comienzo de la temporada.
La gran pregunta es ¿podrá mantener el nivel o incluso aumentarlo? ¿O por el contrario será flor de un día y en un par de semanas volveremos al mismo George y por lo tanto un bajón del equipo?
En mi opinión, pese a tener uno de los mejores calendarios posibles y aunque George mantenga este nivel, cosa que no veo posible durante tanto tiempo (ojalá me equivoque), el resto de sus compañeros, a excepción de Jeff Teague y Myles Turner, son como poco, irregulares y no especialmente fiables. Esto creo que es clave a la hora de analizar las posibilidades de que Indiana siga en ascenso, tal y como lleva haciendo desde hace un par de semanas.
El puesto de escolta titular sigue siendo un quebradero de cabeza para McMillan, no sabe cómo hacer para que funcione sin trastocar el conjunto de la rotación. Parecía que Robinson III le había dado la solidez en defensa necesaria y la posibilidad de jugar sin balón añadido a una gran eficacia en el lanzamiento exterior. Sin embargo, el jugador de tercer año proveniente de la Universidad de Michigan ha bajado su rendimiento en el último mes, especialmente de cara al aro. Por ello McMillan en los últimos partidos ha decidido comenzar con C.J. Miles, que hasta este momento era el jugador más sólido y regular del banquillo.
Todo este desorden, que, si un más que improbable traspaso no lo remedia, acabará afectando al rendimiento general del equipo, que, aunque consiga mantenerse en los puestos de playoff, no creo que consiga el tan ansiado objetivo de tener factor cancha. Aunque a priori un traspaso pueda suponer que el nuevo jugador se adaptase al equipo y a su “casi” definido estilo de juego, la realidad es que parece que ningún escolta está adaptado, al menos totalmente. Por otro lado si se consigue un traspaso aceptable, en mi caso pienso en dos jugadores de Atlanta Hawks como Tim Hardaway Jr. y Thabo Sefolosha, o jugadores de perfil 3&D, anotadores exteriores sin necesidad de balón con buena defensa.
Como dudo que esto ocurra y teniendo en cuenta el nivel del banquillo que tenemos, creo que nos será muy difícil, sino imposible, ser capaces de meternos en playoffs con factor cancha.
Llegar a las Finales de Conferencia, ¿por qué no?
SAMUEL DELGADO, @sam__93
Es cierto que las expectativas que se tenían en estos Indiana Pacers eran muy elevadas. El verano había sido fructífero para Larry Bird, pero conforme han ido pasando los partidos se han ido viendo las carencias del equipo, que para mí son claramente dos: un escolta titular (que parece que C.J. Miles puede ser la solución) y un cuatro suplente de garantías (Lavoy Allen y Kévin Séraphin sufren en esa posición). Y a pesar de todo se encuentran en la 6ª posición de la Conferencia Este, y con récord positivo (25-22).
Los Pacers han sido una montaña rusa en lo que llevamos de temporada, pero sin duda en el mes de enero hemos visto las cartas que pueden jugar, y a pesar de las carencias antes mencionadas, como se puede plantar cara a todos los equipos de la NBA. Es por ello que no me parece descabellado que este equipo pueda llegar a las Finales de Conferencia (abro paraguas).
Me explico. Los Pacers cuentan con un factor en la Conferencia Este que solo otro equipo posee: una superestrella. Y sí, estoy hablando de Paul George y de LeBron James en los Cleveland Cavaliers. Y una superestrella como George, que aporta tanto ofensiva como defensivamente, es un plus que pocos equipos tienen, y desatado en ambos lados (como vimos anteayer ante los Houston Rockets) es imparable. El claro ejemplo es la serie de playoffs del año pasado ante los Toronto Raptors, segundos en la Conferencia por séptimos de los Pacers, que estuvieron a cuatro puntos de ganar el Game 7, y en gran parte gracias a la eficacia defensiva de George sobre DeMar DeRozan y su aportación en ataque.
Y el año pasado no tenían a Jeff Teague, para mi el mejor base que han tenido los Pacers en mucho tiempo, que juega y hacer jugar. Myles Turner no era ni la mitad de lo que es ahora; lo que ha crecido como jugador y con tan sólo 20 años es asombroso, gracias al nuevo sistema de los Pacers que le permite jugar más abierto para anotar de tres y luego ser un gran protector del aro en el otro lado de la cancha. A todo eso le añadimos un ala-pívot titular que siempre aporta, como es Thaddeus Young, y uno de los mejores tiradores de tres de la NBA, como C.J. Miles.
Es posible que no se consiga el factor cancha del que habla mi compañero Fernando, pero aun así, este equipo va a dar mucha guerra. Y lo mejor es que es un equipo que pasa desapercibido, ya sea porque no es un gran mercado o porque no es un equipo que atraiga mucho, y como he dicho que las expectativas eran tan altas, ahora se habla de decepción: para nada. Un equipo nuevo siempre necesita tiempo de adaptación y los Pacers no iban a ser menos, incluso, en menor medida, Kevin Durant y Stephen Curry han necesitado bastantes partidos para mejorar su química.
Que nadie de por muertos a estos Pacers. En playoffs van a ser un duro escollo para el equipo que tengan enfrente, y con Paul George jugando como él sabe, el cielo es el límite.