D’Angelo Russell: «Dejamos de competir»
Mostró su enfado tras el partido frente a Celtics
Los partidos entre Los Ángeles Lakers y los Boston Celtics ya no son lo que eran. Los de Massachusetts han conseguido realizar una reconstrucción impresionante que les mantiene en la segunda posición de la Conferencia Este y a un tiro de sobrepasar a los Cleveland Cavaliers de LeBron James. En Los Ángeles, las cosas siguen igual que siempre. Anoche, los Lakers recibían a los chicos de Brad Stevens, uno de los rivales más competitivos del Este en estos momentos y el resultado fue buena prueba de ello. D’Angelo Russell, Jordan Clarkson, Julius Randle y compañía no fueron competencia suficiente para los Celtics.
Los Lakers se marcharon de la primera mitad del partido por debajo en el marcador con una ventaja de 70-45 a favor de los Celtics. Las cosas no estaban funcionando de ninguna de las maneras y Luke Walton ya había tenido suficiente. Decidió dejar en el banquillo a los titulares para darle una oportunidad a los chicos de la segunda unidad. De esta manera, consiguieron un parcial de 22-7 y cerraron el cuarto a 10 puntos de diferencia de los visitantes. Todo sea dicho, la segunda unidad de los Lakers no tuvo que enfrentarse a los jugadores más talentosos de los Celtics, pero consiguieron hacer un nudo en la garganta de Brad Stevens.
A día de hoy, los Lakers han demostrado ser capaces de enfrentarse a cualquier equipo si se encuentran bien concentrados, pero eso parece toda una utopía. Luke Walton mostró su enfado con la plantilla y transmitió de la mejor manera posible el mensaje a los jóvenes. Tras el partido, D’Angelo Russell y Brandon Ingram fueron el mejor reflejo de los pensamientos de Walton.
“Sentimos que dejamos de jugar, en un momento del partido no pensábamos en seguir compitiendo. Eso es inaceptable, no podemos dejar de jugar, siempre hay que creer en la victoria y seguir luchando sean cuales sean las circunstancias.” – dijo D’Angelo Russell.
“Aún no somos capaces de jugar a gran nivel las dos mitades del partido. No somos capaces de aguantar el nivel más de dos cuartos. Tenemos que concentrarnos y dar lo mejor de nosotros durante los 48 minutos del partido.” – concluyó Brandon Ingram.