El Draft de Divac, parte III: Willie Cauley-Stein
El center es el nuevo líder de la pintura de los Kings
Willie Cauley-Stein, de 21 años y 2,13 metros de altura, llegaba al draft con la etiqueta de ser uno de los mejores defensores de la camada, promediando 1.5 tapones, 1.2 robos por noche, formando parte del primer quinteto All American y siendo elegido defensor del año en la NCAA. Además de ser el primer jugador de la historia de Kentucky en conseguir atrapar 500 rebotes, taponar 200 tiros y robar 100 balones y ser el segundo taponador de la historia de la universidad con 233 tiros rechazados.
Sus méritos universitarios le sirvieron para acaparar el interés de varias franquicias como los Boston Celtics o New York Knicks. Además de recibir los elogios de toda una leyenda de la NBA y GM de los Indiana Pacers en ese momento Larry Bird.
«Larry [Bird] me dijo: ‘Creo que eres un jugador de 100 millones de dólares‘ «, aseguró el joven center. » Ellos me ven como un ‘5’ y poner a Paul [George] de ‘4’. Van a reajustarme».
Finalmente Willie Cauley-Stein sería seleccionado por los Sacramento Kings en la sexta posición de la primera ronda del Draft de 2015, por delante de nombres que se intuían más beneficiosos para los de Sacramento como Enmanuel Mudiay o Justise Winslow. Este hecho sumado a la existencia de la figura de DeMarcus Cousins en la plantilla, con quien compartía posición, provocó que su llegada a la capital de California fuese una elección muy discutida, haciendo que el rendimiento del joven center fuese puesto a examen desde el primer minuto de la pretemporada.
Primeros pasos en Sacramento
El primer escenario en el que Willie Cauley-Stein debería justificar su elección sería la Summer League de Las Vegas, torneo en el que tuvo una gran actuación con 11 puntos, 5.4 rebotes y 2.8 tapones en 22 minutos durante los 5 partidos que disputó con los Sacramento Kings. Además de ser el cuarto jugador, dentro de los 14 primeros seleccionados del draft, a nivel eficiencia con 1,023 puntos por posesión.
Su gran rendimiento, sobre todo a nivel defensivo, no pasó desapercibido para Vance Walberg, entrenador asistente por aquel entonces de los Sacramento Kings. A pesar de que el joven interior no pudo disputar todo el tiempo esperado durante los enfrentamientos debido a su restricción de minutos, dado que todavía debía adecuar su físico al alto nivel de exigencia que requería el sistema ideado por George Karl.
«Podéis ver su progresión», dijo Walberg. «Defensivamente puede cambiar los partidos. Además aunque la gente no crea que tiene un gran nivel ofensivo, pienso que acabará sorprendiendo a todo el mundo».
Un año rookie irregular
Lo que se intuía como un gran año para Willie Cauley-Stein se convirtió en un sueño muy difícil de digerir. El joven interior llegó al Training Camp de los Sacramento Kings en un flojo estado de forma, hecho que recogió el periodista James Ham.
“Cuando te presentas en el training camp y no puedes subir y bajar la pista dos veces sin quedarte sin aliento y apenas puedes salir al parqué, es que algo va mal”.
Aún así el entrenador George Karl decidió darle la oportunidad al rookie de demostrar su valía y éste no defraudó aportando intensidad y defensa en la zona de los Kings, promediando 6.5 rebotes, 1.3 tapones y 0.7 robos en casi 24 minutos sobre el parqué.
El buen hacer de Cauley-Stein en la pretemporada le consiguió un puesto en la rotación y minutos. En los 20 primeros partidos de la temporada el rookie sumaría 14 titularidades, aportando 1.1 tapones y más de medio robo por noche en 18 minutos, además de anotar 4.5 puntos y atrapar 5 rebotes.
La progresión de center se vio cortada por una lesión que lo alejó de las pistas durante 11 partidos, alejándolo de la titularidad e incluso viendo 3 partidos desde el banquillo sin disputar minutos debido a su mal estado de forma como señalaba Karl.
«Tengo la sensación de que probablemente está todavía un poco atrasado para poder jugar tan rápido como queremos», decía George Karl. «Pienso que tengo grabado en la cabeza el hecho de que no creyese que estuviera en buena forma durante el training camp, estoy preocupado«.
Willie tuvo que comenzar varios partidos desde el banquillo hasta volver a conseguir su puesto en el quinteto titular, algo que ocurriría poco después gracias a actuaciones como los 12 puntos, 10 rebotes y 2 robos y tapones frente a los Lakers o los 4 tapones con 12 puntos y 7 rebotes contra Portland.
El interior se había destapado como el mejor complemento para DeMarcus Cousins, sirviéndole para volver a ser titular durante los próximos 15 partidos, la racha más larga para el rookie de partidos seguidos el quinteto inicial. Aunque una serie de 5 derrotas consecutivas de los Kings lo relegaría al banquillo en busca de soluciones por parte de George Karl.
Durante su nueva etapa desde el banquillo Cauley-Stein comenzó a mostrar un rendimiento muy irregular, combinando grandes actuaciones, esporádicas titularidades, partidos con apenas participación e incluso visitas a la grada. En medio de la montaña rusa en la que Willie y su juego se veían sumidos el novato tuvo la oportunidad de entrar a formar parte de la historia reciente de la franquicia, siendo el primer novato en anotar 20 o más puntos desde el banquillo en 2 partidos consecutivos, algo que no ocurría desde que Walt Williams lo hiciese en la temporada 92-93.
Finalmente Willie terminaría la temporada como titular en unos Kings que habían cambiado la lucha por entrar en los playoffs por la de la lotería del draft. Entrando a formar parte del segundo quinteto de rookies de la temporada, siendo el cuarto novato de los Sacramento Kings en conseguir entrar en los mejores quintetos desde el cambio de siglo.
Un difícil comienzo bajo los mandos de Joerger
Tras otro año decepcionante por parte de los Sacramento Kings, hecho que provocaría el despido de Karl, llegaba a la dirección del banquillo de los californianos Dave Joerger. El ex entrenador de los Memphis Grizzlies llegaba a los Kings con fama de no mirar hacia los jóvenes a la hora de repartir los minutos, algo que se puedo apreciar en la decisión de Joerger de enviar a todas las elecciones del draft de 2016 a la D-League, sin apenas darles la oportunidad de demostrar su valía.
Willie Cauley-Stein se había salvado de la quema y seguía formando parte del primer equipo, pero en un rol mucho más secundario que en su primera temporada en la NBA. El sophomore intercambiaba partidos saliendo desde el banquillo con otros en los que veía su nombre fuera de la lista de convocados, una situación que no era del agrado del pívot.
«No se pueden hacer las cosas bien si solo juegas tres minutos, o diez, o 48 segundos«, afirmó Willie. «Todo esto tiene que suceder durante el partido. Luego está nuestro estilo de juego, que es más lento que el año pasado, el reloj se agota y al final tienes cinco segundos para decidir cómo anotar, lo cual es difícil. Solo tengo que seguir trabajando y esperar que las cosas cambien».
Para mayor desgracia los Kings se encontraban en plena lucha por la octava plaza y estaban sondeando el mercado en busca de la pieza que les faltaba para completar un puzzle en el que parecía que el ex de los Wildcats sobraba, siendo Willie el señalado para abandonar la franquicia. Algo que posteriormente la franquicia desmentiría.
Un movimiento inesperado que cambiaría todo
La madrugada del 20 de febrero, en plena celebración del All-Star, se llevaría a cabo una operación por parte de los Kings que sacudiría a media liga y cambiaría el destino de los californianos y del propio Cauley-Stein. Los Sacramento Kings traspasaban a la que era su estrella, DeMarcus Cousins, a los Pelicans de Nueva Orleans en un movimiento que apostaba claramente por la reconstrucción.
Este hecho dejaba al joven interior como el único pívot puro de la plantilla, proporcionándole una oportunidad de oro para dar un golpe sobre la mesa y reclamar el liderazgo de la zona en Sacramento. Willie no malgastaría su momento y firmaría su mejor actuación hasta el momento en la NBA frente a los Denver Nuggets, anotando 29 puntos en 35 minutos a los que se sumaban 10 rebotes.
Cauley-Stein reclamaba para sí los focos del Golden One y la titularidad, algo que Dave Joerger no le negó en lo que sería la mayor explosión estadística del jugador. Willie vería como sus minutos casi se triplicarían y con ellos su aportación en la pista, convirtiéndolo en una pieza clave en el futuro de la franquicia.
| Willie Cauley-Stein | J | MP/J | PTS/J | TC% | RBT/J | DBL-DBL | TP/J | RB/J |
|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
| Pre All-Star | 50 | 13.0 | 5.8 | 56.1% | 2.7 | 0 | 0.5 | 0.5 |
| Post All-Star | 25 | 30.9 | 12.9 | 50.4% | 8.1 | 8 | 0.9 | 1.1 |
Además de la explosión estadística del sophomore también hay que remarcar su cambio en el juego en cuanto a la forma de plantear su ofensiva, apoyándose mucho más en el tiro en suspensión. El interior ha lanzado 106 suspensiones los últimos 25 partidos de la temporada, casi duplicando los 63 intentos de los 50 primeros partidos del año.
Evolución en su juego y liderazgo
Willie Cauley-Stein ha pasado de ser un buen complemento en defensa a ser un jugador que aporta en ambos lados de la pista. A su altura y atletismo se les une una buena visión de juego y un nuevo repertorio de armas ofensivas. Un crecimiento provocado en gran parte gracias a los esfuerzos del jugador de segundo año y a la buena mano de Joerger con los hombres altos, algo que ya se vio con la gran evolución que sufrió el juego de Marc Gasol en los Grizzlies bajo su tutela.
El joven jugador ha visto como su juego maduraba durante estos últimos meses, pero también lo hacía como persona, consciente de que él y Skal Labissière son el futuro de la pintura de Sacramento ha adoptado al haitiano como ‘hermano pequeño’, tutelándolo y ayudándole a mejorar al mismo tiempo que él crece.
«Me gusta jugar con él, es un jugador capaz de hacer buenas jugadas y joven, con tiempo para aprender a hacer las cosas bien. Ambos tenemos que aprender al mismo tiempo, juntos. Está bien, soy como ese tipo mayor del colegio. Cuando tenemos días libres, siempre está llamándome. Es como mi hermano pequeño«, dijo Willie.
