Mercado NBA: Golden State Warriors, mejor imposible

Llevamos prácticamente casi un mes entero hablando del mercado NBA de los Golden State Warriors y cómo, de alguna manera, han conseguido mantener no sólo el núcleo esencial de su plantilla de cara al próximo año, sino que lo han mejorado aún más si esa posibilidad era meramente real. Ya no sólo por hablar del tema renovaciones, que tantas letras ha derramado en nuestros artículos, sino también por hacer mención a las incorporaciones que Bob Myers y compañía han conseguido atraer a la bahía, con el poco margen de maniobra que tenían para operar en el mercado NBA.

Las renovaciones

El foco debe y estará dirigido hacia las renovaciones, pero deben mención especial la labor de la gestión deportiva de la franquicia al poder convencer a todas sus estrellas que expiraban contrato para que permaneciesen en la bahía al menos otra campaña más juntos. La más esperada fue la de Stephen Curry, que con una cifra que rondó los 201$ millones de dólares, se convirtió (por unos pocos días) en el contrato más lucrativo de toda la historia de la NBA. Ya le tocaba al bueno de Steph cobrar lo que debía tras años de escuchar cómo jugadores de rotación en otros equipos tenían contratos más extensos que el suyo. A la de Curry seguirían renovaciones esperadas como la de Shaun Livingston, David West o Zaza Pachulia. Sin embargo, la más costosa fue la de Andre Iguodala, un breve pero intenso drama en el que todo apuntaba a que el alero se marchaba de los Warriors rumbo a una franquicia que le brindase más protagonismo. Sin embargo, la historia tuvo final feliz e Iggy se quedará en la bahía tres años más. Como guinda del pastel, Kevin Durant sorprendía otro año más a todo el mundo perdonando mucho dinero a cambio de que el núcleo duro de los Warriors quedara intacto, objetivo que en última instancia se cumpliría. Con la suya, los Warriors cerraban el capítulo de renovaciones de forma magistral.

Las incorporaciones en el mercado NBA

Sólo dos fichajes hicieron falta en el último mercado NBA por parte de los Golden State Warriors para prolongar su reinado en la NBA, y ésas recayeron en los nombres de Omri Casspi y Nick Young. Sin embargo, no han sido más porque la directiva de la franquicia así lo ha deseado, no por falta de oportunidades. Por nombres, saltarán a la mente los de jugadores como Beasley, Jamal Crawford, o el mismísimo Paul George. Sin embargo, Myers, perro viejo ya en los despachos a pesar de su corta edad para un puesto directivo, supo abstenerse y pensar con la cabeza qué era lo que más convenía a nivel deportivo y humano a la organización.

Omri Casspi y Nick Young

El israelí apareció de la noche a la mañana, en unas negociaciones que ningún analista pareció percibir, y de un chasquido el que fuera jugador de Timberwolves, Kings o Pelicans pasó a vestir la elástica azul y dorada, bajo un contrato que desde luego está muy por debajo de sus posibilidades. Sin embargo, preocupaciones monetarias aparte, Casspi se ha mostrado muy ilusionado con su nuevo equipo, al que espera poder ayudar con valiosos minutos desde el banquillo gracias a su gran versatilidad de movmientos y facilidad para la anotación.

Por otro lado, y ésta sí que fue más esperada que la anterior, los Golden State Warriors firmaron a Nick «Swaggy P» Young, luego de unas negociaciones que estuvieron cierto tiempo a la espera de la situación con Jamal Crawford. Sin embargo, mientras que tanto Crawford como los Warriors se alejaban progresivamente de la posibilidad de acordar un contrato, los de Oakland confraternizaban más con la posible llegada de Young al equipo. Así, tras unos días en los despachos, los Warriors añadieron otro componente más a la ‘Splash Family’ tras este mercado NBA con Nick Young, que tras varios años malviviendo en los Lakers, su buena temporada de resurrección la ha colgado buen cartel de mercado, donde los Warriors fácilmente se han colocado como el mejor postor. Con su tiro de tres, los Warriors respirarán tranquilos cuando la segunda unidad entre en acción cada partido. Nombres como Iguodala, Casspi, Livingston McCaw o el de Young bien podrían conformar un equipo que estaría luchando por entrar a playoffs. Todo ello a la espera de la decisión de JaVale McGee, que sigue sin dar una respuesta oficial a los Warriors.

Los rookies

Lejos del "Death Lineup", tenemos futuro con Jordan Bell y Patrick McCaw. ¿Qué opináis, #DubNation ? pic.twitter.com/stn4ywwOyz

— RUN&DUB (@SomosRunandDub) July 25, 2017

No podemos hablar del verano de los Warriors sin echar una vista al Draft, donde, nuevamente, los californianos han encontrado la manera de robar una promesa en el momento menos esperado, que ha sido el caso de Joordan Bell. Tras el aparente éxito que han tenido los Warriors con Patrick McCaw, que se está ganando los galones a la fuerza con los Dubs, Myers y sus ojeadores han vuelto a protagonizar otro robo en el Draft, donde compraron el pick de los Chicago Bulls, el cual les otorgaba los derechos sobre Jordan Bell, jugador procedente de la Universidad de Oregón con un perfil muy similar al de Draymond Green, y que en la Summer League ya ha dado ciertos retazos de lo que es capaz de hacer, con partidos de doble-doble. Si los Warriors muestran confianza en él, el futuro de la franquicia puede reposar con gran tranquilidad sobre los hombros de Jordan Bell y Patrick McCaw. La otra incorporación de la noche del Draft fue la de Chris Boucher, jugador descartado de entre las 60 elecciones

El mercado NBA perfecto, por Golden State Warriors.