Nick Young y la difícil manera de adaptarse a los campeones

Nick Young es uno de esos pocos jugadores que es más conocido por lo que hace fuera de la pista que dentro. Es poseedor de una de las mayores colecciones de zapatillas de todos los jugadores de la Liga, cuenta con numerosos coches de lujo con los que le gusta pasearse, es dueño de su propia marca de ropa de diseño y tuvo una aventura amorosa que terminó de la peor manera posible con la cantante Iggy Azalea. Siempre se refugió en el baloncesto para evitar ese estilo de vida y ha querido dar un paso más allá en su carrera para unirse a los Warriors y competir por el anillo.

“Creo que sería más ‘Swaggy P’ que nunca con un anillo en el dedo”. Dijo tras el entrenamiento en el día de ayer.

Los Warriors vieron en él a un tirador de élite que podría beneficiarse de una cultura ganadora por encima de su mala reputación. En otras organizaciones lo ven como un jugador más famoso por su ego que por su juego en la pista. Formar parte de equipos que aspiran a todo suele amueblarte la cabeza, y si no que se lo digan a su gran amigo JaVale McGee que resurgió de las cenizas para convertirse en un jugador importante en unos Warriors que volvieron a alzar el Larry O’Brien. Firmó un contrato de 5,2 millones y dejó mucho dinero de por medio para estar aquí.

Sin embargo, el experimento de Nick Young no ha comenzado de buena manera en la organización. Llegó al training camp pasado de peso, lo que le costó una buena bronca por parte de su nuevo entrenador. A pesar de haber jugado en un sistema similar la temporada pasada con Luke Walton, no parece estabilizarse del todo bajo las órdenes de Steve Kerr y se le ve un poco perdido y tomando decisiones poco elaboradas durante los partidos de pretemporada que ha disputado. La pasada campaña terminó con un 41,9 por ciento en tiros de tres y eso es lo que buscan en Golden State.

En la franquicia confían en él y en las posibilidades que puede ofrecerles en la pista saliendo como uno de los principales líderes ofensivos de la segunda unidad. Poco a poco está impregnándose de la cultura y el estilo de juego del equipo y cada entrenamiento es un paso hacia delante para él. Esto no pasa desapercibido para el cuerpo técnico que es conocedor del esfuerzo que está haciendo para mejorar su juego y adaptarse a su nuevo equipo.

“Nick Young está teniendo unos muy buenos entrenamientos estos últimos días desde que volvimos de China. Entiende que nunca es fácil ir a un nuevo equipo, especialmente tras haber estado en la liga durante 10 años. Es un nuevo ambiente, nuevos compañeros de equipo… Se está mostrando mucho más cómodo en pista”. Dijo Steve Kerr