El Real Madrid ha puesto fin a su racha de imbatibilidad desde que comenzó la temporada. El Khimki ruso llegó al WiZink Center para aprovechar los fallos de un Madrid con la puntería desviada. Aleksei Shved lideró a los suyos en una importante victoria frente a uno de los favoritos para hacerse con el título europeo. Luka Doncic con 12 puntos y Taylor, Causeur y Ayón con 10 puntos fueron los máximos anotadores blancos en un partido donde casi consiguen ganar con un esfuerzo mínimo.
El Real Madrid no consiguió mantener el ritmo anotador del rival, mientras que Gill, Anderson y Shved se hinchaban los bolsillos punto tras punto. Sin embargo, no dejaron que el Khimki se marchara en el marcador con un buen Causeur que firmó cuatro puntos y dos asistencias que dieron vida al equipo en los primeros diez minutos de partido.
En el segundo cuarto, a causa de la falta de acierto en el triple consiguieron cavarse su propia tumba. Un solo triple de once intentados. Mientras tanto, los rusos seguían sumando desde la línea de larga distancia mientras su rival moría en la orilla. Parcial de 2-15 a favor de los de Bartzokas. Los locales tuvieron su pequeña reacción con la salida de Doncic que consiguió anotar siete puntos. Mejoró la defensa en los últimos minutos antes del descanso y consiguieron recortar la diferencia que se quedó en seis puntos al final de la primera mitad, 39-45.
Los blancos salieron enchufados tras el descanso. Un ya habitual en este inicio de temporada para el Madrid, Jeff Taylor, se puso el mono de trabajo para ayudar a su equipo a recuperar la ventaja. Causeur lo encontró en un corte por detrás de la defensa para acabar machacando de espaldas. Esta jugada daba vida al Madrid para comenzar el cuarto. Charles Jenkins mostró su mejor juego defensivo consiguiendo robarle la cartera a varios jugadores locales. Luka Doncic sufrió en sus carnes la angustiosa defensa del norteamericano y el Khimki se hizo de nuevo con el colchón que contaban anteriormente.
Los últimos diez minutos sirvieron para dejar a los merengues con la miel en los labios. Facundo Campazzo, al que podríamos llamar ya el hombre del último cuarto, consiguió dar energía al equipo para acercarlos más en el marcador. La defensa fue la gran protagonista para poner fin al aluvión ofensivo de los rivales. Jaycee Carroll consiguió poner el 80-82 a falta de 48 segundos. Ejecutaron una jugada de pizarra donde Campazzo se quedaba solo para anotar una bandeja, pero la aparición de un Doncic libre por detrás del triple le hizo cambiar de opinión pero el esloveno falló sobre la bocina y el Real Madrid acabó perdiendo su primer partido en Euroliga.
