#RoadToBelgrado – Zalgiris Kaunas
La gran revelación de esta edición de la Euroliga
Si un equipo no tiene nada que perder en Belgrado, ese es Zalgiris Kaunas. Han llegado a la cita serbia por méritos propios, pero sorprendiendo a todos (aunque ya no es tan sorpresa viendo su temporada) y pueden cerrar por todo lo alto un gran año a las órdenes de Jasikevicius, una de las claves del éxito de los lituanos.
Zalgiris llega a Belgrado, no solo avalado por una gran trayectoria, sino con un precedente a repetir, pues en su única participación en una Final Four, se llevaron el título europeo venciendo a Kinder Bolonia, en 1999. Antes de ello, se habían desecho de Olympiakos. ¿Coincidencia?
Los griegos han sido el rival europeo favorito por los lituanos, pues le han ganado en cinco de las seis ocasiones en las que se han visto las caras durante esta temporada. Y fueron el escollo que salvaron para estar esta semana en Belgrado, con lo que ¿repetirán el bonito final? El baloncesto lo dirá, pero lo que está claro es que son de los más peligrosos porque el llegar a la Final Four no era el principal objetivo, y no tienen nada que perder en la cita, con lo que la presión no será tan alta.
No es lo mismo para su rival, el Fenerbahce, que llega como vigente campeón y que está “obligado” a revalidar título tras otro magnifico año a las ordenes de Obradovic. El 18 de mayo, turcos y lituanos se citan en la capital serbia en el que promete ser un gran enfrentamiento, y en el que los de Istambul son claros favoritos. Sin embargo, en esta campaña, Zalgiris Kaunas puede decir lo que es vencer a los turcos, a los que ganó en su pabellón por tan solo un punto (89-90), aunque luego Fenerbahce devolvió la moneda en casa de los lituanos. Por lo que si atendemos a lo sucedido en esta temporada, y por como son los dos equipos, un buen baloncesto está asegurado.
El camino hacia Belgrado
Como hemos comentado, los de Jasikevicius lograron el pase a la Final Four gracias a una gran eliminatoria ante Olympiacos, al que vencieron 3-1. Fue clave para Zalgiris Kaunas hacerse con el primer encuentro en Atenas, para descolocar a los locales, que, aunque se llevaron el otro de los partidos en su casa, nada pudieron hacer en Lituania. Y es que no les pudo tocar mejor rival, pues Zalgiris ha demostrado tener cogida la medida a Olympiacos, al que ganó también en los dos partidos de la liga regular.
Antes de los playoffs, los lituanos ya demostraron su solvencia, con un balance de 18 victorias y 12 derrotas, siendo solo tres de ellas en casa, donde se hicieron fuertes. En el Zalgirio Arena, el conjunto fue capaz de vencer a rivales fuertes como CSKA u Olympiacos, perdiendo solo ante Real Madrid, Khimki y Fenerbahce. Uno de los mejores momentos de los de Jasikevicius fue una racha de cinco victorias consecutivas, ganando a Panathinaikos, Brose Bamberg, Fenerbahce, Valencia Basket y Olympiacos, en una liga regular que cerraron con dos victorias de prestigio ante los griegos y CSKA Moscú.
Dejando de lado la competición europea, Zalgiris Kaunas también se ha mostrado casi invatible en la liga lituana. El equipo lituano terminó en la primera posición la liga regular con un balance de 32 victorias y solo cuatro derrotas, seguido de cerca de Lietuvos Rytas, pero lejos ya del tercer clasificado. Han comenzado a disputar los playoffs del campeonato ante Kedainiu Nevezis, ante el que ya van ganando 1-0.
Una plantilla competitiva
Una de las cosas que destaca en Zalgiris Kaunas, a parte de la figura de su entrenador, es el juego en equipo, pero sin duda, tienen nombres propios a tener en cuenta. Uno de sus líderes ofensivos es el director de juego, Kevin Pangos, ya deseado por varios equipos de Europa, entre ellos el FC Barcelona Lassa. El esloveno ha sido el jugador con mejores números en Euroliga por parte de los lituanos, con un promedio de 12’7 puntos, 2’7 rebotes, 6 asistencias y 14’1 de valoración.
Pero más allá de Pangos, surgen otros nombres, como son el de Paulius Jankunas, cuyos números tampoco dejan indiferente – 11’4 puntos, 4’9 rebotes y 13’9 de valoración- siendo uno de los jugadores referentes en la pintura. En playoffs, además, se reivindicó Brandon Davies. El estadounidense fue el máximo anotador ante Olympiacos con una media de 17 puntos. Con el director esloveno y la pintura con Jankunas y Davies, también aparecen otros como Edgaras Ulanovas y Aaron White, a quien siempre pueden completar jugadores experimentados como el fichaje de invierno, el esloveno ex NBA Beno Udrih, entre otros.
Y no podemos dejar de analizar la plantilla lituana sin nombrar una de las mayores hazañas colectivas que han conseguido. El conjunto de Kaunas ha promediado un total de un 42 % de anotación en el tiro exterior, de las más altas, no solo de la temporada, sino de la historia de la competición. Una herramienta peligrosa, a la que pueden acudir en cualquier momento.
El gran secreto: Jasikevicius
No podemos desligar el éxito de Zalgiris Kaunas de la dirección de Sarunas Jasikevicius. El ex jugador lituano ha demostrado dar en la tecla para llevar al equipo de su ciudad a lo más alto del baloncesto europeo, un trabajo que alaban ya en toda Europa y en el entorno del deporte de la canasta. Si ya destacó como jugador, como entrenador no está defraudando, ya que apenas lleva dos años en el puesto y ha llevado a un equipo sin grandes nombres a una Final Four de Euroliga. Y en el primer partido en Belgrado, Jasikevicius se verá ante Zeljko Obradovic, considerado el maestro europeo de los banquillos. Se podría decir aquello que el aprendiz se ve las caras ante el maestro (más o menos).
Una de las cosas que más destaca el entrenador es a la hora de aportar disciplina a sus jugadores, a los que ha convertido en un equipo que se entiende a la perfección y donde cada uno sabe lo que hacer y cual es su papel, sin duda, uno de los mejores caminos hacia el éxito. Y todo ello, más o menos, en tiempo récord, dos años, pues Sarunas Jasikevicius se hizo cargo de Zalgiris en enero de 2016, siendo antes ayudante, y no defraudó desde los primeros momentos. Y pronto su buen trabajo llamó la atención de varios equipos, entre los que se encontraba el FC Barcelona Lassa, donde el lituano desarrolló parte de su carrera. Dijo que no al proyecto blaugrana, pues creía en la idea de Zalgiris Kaunas y en ella continua inmerso. Quien sabe si puede seguir escribiendo la historia de los de Kaunas en Belgrado, y demostrar que el quedarse con el equipo de su ciudad, fue un acierto.