Devin Booker y los Suns asaltan el Oracle Arena
El cuadro de Kokoskov decidió en la recta final un duelo muy intenso
Phoenix Suns y Devin Booker firmaron la sorpresa de la jornada en el Oracle Arena. Phoenix Suns, el equipo con El Segundo peor balance de victorias y derrotas de toda la temporada, viajaba hasta Oakland para medirse al número uno del Oeste, además, lo hacían en back-to-back y habiendo perdido una hora de descanso en el vuelo por el cambio horario en Estados Unidos.
Golden State Warriors quería reforzarse ante su público, ese al que le queda poco para ver a su equipo mudarse al otro lado de la Bahía para jugar en el Chase Center. Llegaban a este duelo tras una gran victoria ante Denver Nuggets que les permitía ganar ventaja en la carrera por el número uno de la Conferencia, y su pensamiento estaba en dejar atrás a unos Suns que poca competencia están plantando.
Sin embargo, Devin Booker volvió a firmar un excelso partido en el que rozó el triple-doble para la amargura de los aficionados de Golden State. El escolta consiguió 37 puntos, 11 asistencias y 8 rebotes siendo decisivo en el tramo final de partido anotando las canastas que terminaron por desequilibrar la balanza. Hasta el último cuarto, ambos equipos habían mantenido igualada la contienda, pero todo cambió cuando el mejor jugador en pista en ese momento, Kevin Durant, se retiró por un aparente esguince de tobillo.
Stephen Curry no tuvo su noche, cerró el duelo con un 4 de 15 desde más allá del arco, 26% de acierto en triple. Klay Thompson no pudo completar tampoco el intento de remontada de los Warriors a pesar de su gran inicio de partido. Se instaura una sensación muy extraña en el vestuario de los Warriors, algo bastante parecido a lo que sucedió a finales del curso anterior. Deben solucionar sus problemas cuanto antes si quieren llegar reforzados a su lucha por el ‘three-peat’.