A pocas horas del Draft presentamos el análisis de la gran decepción, en mayúsculas, de la temporada en la NCAA. Pero a pesar de su triste paso por la universidad de Kentucky, Skal Labissiere sigue siendo uno de los jugadores con más potencial de la camada.
Análisis anteriores en el mock de SomosBasket: Timothe Luwawu, Dragan Bender, Jakob Poeltl, Demetrius Jackson,Ben Simmons, Brandon Ingram, Henry Ellenson, Deyonta Davis, Marquese Chriss, Buddy Hield, Ivica Zubac, Jaylen Brown, Denzel Valentine, Wade Baldwin IV, Kris Dunn, Furkan Korkmaz, Jamal Murray y Juancho Hernángomez.
Con potencial para brillar y someter rivales en ambos tableros, Skal Labissiere es el pívot con más potencial del Class 2016 y solo se puede equiparar en este aspecto a Marquese Chriss. Joven, 20 años (18/03/96), llegará a la NBA como una de las promesas más mayores del Draft. A pesar de no haber brillado por su constancia y trabajo en los Wildcats, precisamente todo lo contrario, se puede definir como un «boom or bust prospect», o bien dejará las bocas abiertas de todos los seguidores o será un pufo. Puede jugar tanto de PF (power-forwward/alero) como de C (center/pívot), mide 2.13 metros, pesa 98 kilogramos y tiene una envergadura de 2.20 metros.
Esta temporada en la NCAA ha promediado 6.6 puntos, 3.1 rebotes, 1.6 tapones, 0.3 robos y 0.3 asistencias por encuentro en 15.8 minutos de media, con unos porcentajes del 51.6 en tiros de campo y 66.1 en tiros libres con los Kentucky Wildcats.
Puntos fuertes
Lo primero que destaca del interior es su físico. Labissiere es alto y es capaz de moverse muy bien por la pista que, junto a su envergadura de 2.20 metros, le convierten en un jugador que puede ejercer perfectamente de PF y C. Algo ligero todavía pero con potencial para ser más fuerte. Cuenta con un buen salto vertical, sólido atleta que sabe finalizar a la perfección cerca del aro con potentes mates, tanto en alley-oops como tras rebote ofensivo.
El punto más interesante de Skal son sus habilidades ofensivas. El que en su día fuese primero en los mocks de los expertos cuenta con unas habilidades impresionantes, más aún teniendo en cuenta el nivel al que juega y ha jugado. Sus movimientos son uniformes y equilibrados, destaca por su footwork y el touch para anotar. Labissiere también añade spacing a su equipo, sobre todo gracias a su sólido tiro desde media y larga distancia, con una mecánica rápida y con un punto de lanzamiento muy elevado que hacen difícil el taponarle. Prefiere el pick&pop que la continuación al aro, gracias a sus ya mencionadas habilidades como tirador y su muy buena colocación de pies. Destaca también su tiro tras bote, movimiento que realiza mucho acompañado de una finta de tiro, aunque en ocasiones abusa de él. Poco a poco va desarrollando el tiro de tres puntos, que en los workouts demuestra tenerlo, con rango de tiro NBA, pero en la NCAA no se vio a Labissiere lanzar desde el exterior y genera dudas a nivel de juego. Le gusta mucho, tras recibir de espaldas a canasta, darse la vuelta y jugar de cara al aro, donde combina ganchos con ambas manos, tiros a la media vuelta y otros movimientos que realiza con mucha agilidad como los reversos. De espaldas al aro es el juego que más le gusta, donde destaca que es capaz de anotar sobre los dos hombros con ganchos técnicamente muy buenos.
El potencial defensivo que atesora el joven Wildcat es una de sus armas más destacadas, aunque a día de hoy esté verde en dicho aspecto. Tiene el físico para ser un two-way player a medida que madura y gane experiencia en la NBA. Ya con Calipari promediaba 4.2 tapones por 40 minutos, gracias a su buen timing e instintos para taponar. Sabe aparecer de la nada y colocar el gorro, utiliza para ello ambas manos y cuando recibe contacto es capaz de saltar y mantenerse vertical, además de saber recuperar la posición. Labissiere todavía está muy verde en este aspecto pero es versátil y se mueve de forma fluida. En P&R destaca por saber cuando cambiar y quedarse con el bajito, al que sabe defender perfectamente en el exterior gracias a esa cuerpo ligero y envergadura.
Por último hay que tratar su potencial en general. Skal es uno de los jugadores freshman más «viejos» entre los nombres destacados del Draft, con sus ya cumplidos 20 años. A pesar de esto su combinación física y de habilidades son realmente intrigantes, incluso sin haber desarrollado aún su cuerpo. Cabe destacar además que antes de llegar a Kentucky no había jugado a grandes niveles competitivos y que en su país natal, Haití, sufrió en su cuerpo las consecuencias del brutal terremoto de 2010 en el que murieron más de 300.000 personas. Dejando a un lado las incógnitas que crea este jugador, Labissiere tiene como base la protección de aro y el spacing para crear un jugador que encajaría a la perfección en el baloncesto actual.
Puntos débiles
Hemos destacado su físico sí, pero en cambio no se puede decir lo mismo ni de su dureza ni de su fuerza. Cuenta con poca grasa corporal, pesa poco y no tiene mucho músculo, su parte superior del cuerpo apenas está desarrollada. Tampoco está mentalmente preparado para dar el salto a la NBA, donde realmente necesita trabajar y lo pasará mal en su primera temporada. Labissiere es un jugador de rachas, su confianza viene y va y es incapaz, a día de hoy, de mostrar una versión regular. Además es blando, los rivales buscan atacarle a él, incluso los exteriores, y ganarle por potencia, aunque muestre flashes de potencial, sufrirá contra pívots grandes en la liga, ya que huye del contacto. Lo último en este punto es la cantidad de pérdidas (13.2 por ciento) que realiza con el balón en las manos por no agarrarlo bien y no ver cuando el defensor se le echa encima.
Pero sin duda uno de los aspectos, o el que más, preocupa a expertos y equipos es lo mal que trabaja Labissiere el rebote defensivo. En esta tarea lo pasa realmente mal dados unos pobres instintos y poco físico. Sus 5.6 rebotes defensivos por 40 minutos son la peor cifra entre los grandes nombres del Draft. Peca en muchas ocasiones de querer taponar tiros a los que es muy difícil llegar y es ahí cuando deja el hueco para que su contrincante capture el rechace. Además Skal pierde la concentración fácilmente, se queda mirando el balón, no hace el box-out y su rival se cuela.
Si bien la ofensiva es uno de sus puntos destacados, con ese paquete que ya se ha comentado anteriormente, tiene algunas carencias y necesita unir todos sus puntos fuertes en ataque, donde la anotación es su punto clave. Además el haitiano es un pasador realmente malo, ya no solo por sus bajísimos números en asistencia, sino por su pobre visión de juego, es incapaz de ver a un compañero solo al lado si tiene el balón. Esta falta brutal de visión, su todavía inconsistente tiro y sus problemas para leer las situaciones de P&P generan demasiadas dudas sobre las posibilidades de ejercer como PF en la NBA y le desplazan más al puesto de C. Cuando recibe el balón, lo primero que hace Labissiere es tirar o fintar y en este último caso siempre pone el balón en el suelo antes de mirar a un compañero. Toma muchas decisiones erróneas relacionadas con el bote, dónde colocarse cuando un compañero penetra (especialmente off-ball), etc.
Otro de sus puntos fuertes, uno de los más interesantes de hecho, era su potencial defensivo, aunque precisamente uno de sus puntos débiles son sus fundamentos en este aspecto. Skal comete muchísimas faltas, de hecho es el jugador del Draft que más faltas comete por 40 minutos, le falta mucha disciplina defensiva. A pesar de saber cambiar en el P&R y ser capaz de defender a exteriores tiene una serie de hábitos realmente malos, como perder el equilibrio o caer en prácticamente todas las fintas que le hacen, incluso aquellos jugadores que no son tiradores. Por último, como rim protector, no tiene demasiada conciencia sobre dónde están los jugadores y sólo se centra en el balón, por lo que muchos defensores se cuelan por el lado débil sin que se entere.
Comparación y proyección
Antes de la temporada Skal Labissiere apuntaba a número uno del Draft, incluso por delante de Ben Simmons, pero unos meses después la situación ha cambiado de forma radical. Su decepcionante temporada le baja en todos los mocks y crea dudas reales, y justificadas, en todos los expertos y equipos que le pueden draftear. Cae del primer pick hasta fuera del top 10 en la mayoría de mocks e incluso en algunos se sale de la lotería. Tampoco ha impresionado en los workouts y no hay noticias sobre algún equipo que esté realmente interesado en adquirir sus servicios.
En aquel momento en el que llegaba a Kentucky se comparaba al haitiano con dos jugadores de San Antonio Spurs, LaMarcus Aldridge y Tim Duncan, por sus movimientos en ataque, su potencial defensivo y su agilidad para jugar de PF a pesar de su altura. Sin embargo, aunque el potencial sigue ahí y la comparación con Aldridge sigue siendo «realista», genera dudas para jugar de PF en la NBA. Con su habilidad para defender el aro y su habilidad para tirar es un perfil parecido a Channing Frye, aunque con menos tiro de tres y con más movimientos al poste. Repito el concepto de «boom or bust prospect», donde Labissiere parece encajar a la perfección.
https://www.youtube.com/watch?v=5R0eFmSoGvU