La Mesa Redonda: ¿Cuál ha sido el mejor fichaje de esta Agencia Libre?

Nuevo capítulo de La Mesa Redonda

«Primer» capítulo de La Mesa Redonda de esta temporada 2020-21 en la NBA. Hay muchos equipos que han conseguido reforzarse bien, pero ninguno como los que venimos a defender a continuación.

Ibaka, Hayward, Harrell, Schröder… ¿Quién es para nosotros el mejor fichaje de esta Agencia Libre? Como siempre, venimos a no responder a la pregunta que nosotros mismos nos hacemos.

No demasiado (por Adrián Senés)

Hayward, Ibaka… y poco más. Fuente: News Today

Estamos ante la peor y más descafeinada Agencia Libre que los jóvenes (y no tan jóvenes) recuerdan. Y además, por mucho. Si en lo que agentes libres puros y duros nos centramos, descontando tanto rookies como renovaciones y extensiones de contrato por el mismo equipo, vemos que ninguna súper estrella ha cambiado de equipo como es usual, ya sea en mayor o menor medida. De esta manera, la inmensa mayoría de equipos mantienen el  statu quo con el que acabaron la extraña temporada anterior, y los únicos cambios en la ilusión de las aficiones vienen más de la mano de jugadores de primer año, el crecimiento de jóvenes y la recuperación de algunos lesionados (Curry, Durant e Irving). Sí que se ha movido el mercado de trades (Paul, Westbrook, Adams…), pero sin llegar a tambalear los cimientos de la NBA.

Así pues, si eliminamos todo esto, nos quedan una serie de movimientos que, lejos de ser trascendentales, sí que son bastante interesantes. Dentro de ellos destacan tres nombres por encima del resto: Ibaka, Hayward y Harrell. El último de ellos, quizá sea haya perdido un poco de fuerza en las últimas semanas después de que su equipo haya firmado a Marc Gasol. De tendencia agitadora, veremos si Harrell tiene el mismo rol que venía teniendo hasta ahora en Clippers con un entrenador como Vogel de pizarra tan disciplinada. Su rol es otra de las incógnitas ya que está por ver si tiene minutos como center o como “cuatro” junto a Davis y Gasol, dos pívots con más centímetros…y más rango de acción, tanto por tiro como por visión. Así pues, pese a sus muchas virtudes, nos hemos decantado por dejarlo en tercer lugar de este pódium.

A suplir a Harrell llegará, precisamente, Serge Ibaka. El hispano-congoleño presenta unas virtudes que eran necesarias en la plantilla de Clippers. Tiene envergadura y potencial defensivo cerca del aro, algo de lo que adolecían en gran medida hasta ahora y que les debe hacer dar un paso más hacia adelante. Por otra parte, su físico y capacidad de sumar teniendo poca carga de balón encajan de maravilla en el estilo intenso y carga creativa para Kawhi y George que los angelinos, presuntamente, tratarán de realizar. Su experiencia también es vital tras sus años en Toronto, anillo incluido, en una franquicia que nunca ha alcanzado siquiera unas Finales de Conferencia. Y van muchas décadas ya. Es aquí, de hecho, donde residen las principales dudas. El año pasado el vestuario fue una bomba de relojería que Doc Rivers no supo encauzar, con demasiados lujos para sus estrellas y no es Ibaka un jugador que  sea pegamento en vestuarios. Sus salidas de tono dentro de la pista, con peleas incluidas, son habituales y su actitud cuando no ha sido importante (final de su etapa en Oklahoma y en  Orlando) ha dejado que desear. En Toronto, en un vestuario que era una piña y con líderes claros (Nurse y Scariolo en el banquillo; Marc y Lowry en pista) se ha reconducido pero está por ver si, en el caso de que el vestuario siga desunido, se convierte en un sujeto estabilizante o inestable. La falta de un base experto en pick&roll también impedirá que saque su mejor arma en ataque.

Por último, el de Hayward es el más criticado por lo excesivo de su precio (30 millones, cuatro años), pero lo cierto es que deportivamente encaja como nadie. Cubre necesidades que en Hornets era imprescindible cubrir para poder seguir creciendo: IQ, potencial creativo en estático, tiro de tres, ocupación de esquinas, experiencia… Además la versatilidad de Charlotte le hará poder jugar tanto de “tres” como de “cuatro” y será el mentor perfecto para jóvenes promesas como Ball, Bridges, Whasington, Graham, etc. Si deportivamente encaja, también lo hace en lo relativo al proyecto, dotándolo (junto a Lamelo) de una identidad de la que adoleció el año pasado. Su fichaje ilusiona y da a entender que la franquicia aspira a ganar más partidos en los próximos años. Movimiento ambicioso que tiene la duda de la enorme inversión acometida, sobre todo en sus últimos años, cuando cobre 30 millones teniendo 33 y 34 años. Sin embargo, en Hornets tienen espacio -más todavía el año que viene- y, tras no darlo todo por la continuidad de Kemba Walker, el mensaje es claro: si es posible, la gerencia tratará de pujar por ser competitivos pronto y no malgastar temporadas de travesía por el desierto.

Más B y más D (por David Sánchez Laso)

Tras ser finalistas de conferencia en la temporada 2018-2019, los Portland Trail Blazers completaron un curso 2019-2020 por debajo de las expectativas. Aun así, los de Oregón cuajaron una burbuja estupenda, especialmente gracias a un Damian Lillard estratosférico y un Jusuf Nurkic recuperado de su grave fractura en la tibia izquierda, que les permitió situarse en la octava posición. Al ganar su partido de Play-in, pudieron enfrentarse a los Lakers en la primera ronda de los Playoffs de la que caerían eliminados con un contundente 4-1. Esta temporada se avecina más ilusionante para los de Terry Stotts, cuyo objetivo es ganarse un puesto como cabeza de serie en la salvaje Conferencia Oeste. Por ello, Neil Olshey ha realizado una agencia libre sobresaliente en la que la franquicia ha conseguido sumar piezas muy importantes para su proyecto, además de desprenderse de otras que no habían funcionado.

RoCo llega para solventar los problemas defensivos de los Blazers. Fuente: Oregon Live

Robert Covington es, sin duda, su principal acierto en esta agencia libre. Los Portland Trail Blazers han conseguido uno de los mejores jugadores defensivos disponibles únicamente por el pick 16 del Draft (Isaiah Stewart), una primera ronda protegida de 2021 y Trevor Ariza. El ex de los Houston Rockets aportará a Blazers la defensa que tanto añoraron la pasada campaña, así como una polivalencia en sistemas de small ball de la que Portland aún no había disfrutado. En Houston hemos podido ver a Covington jugar tanto en el tres como en las dos posiciones interiores, además de hacer gala de su capacidad reboteadora y tiro desde las esquinas del perímetro. Asimismo, Portland ha conseguido suplir sus problemas de profundidad de banquillo con piezas veteranas como Enes Kanter o los jóvenes Derrick Jones Jr. y Harry Giles, que aportarán aún más defensa a la plantilla.

Portland Trail Blazers ha conseguido suplir en esta agencia libre sus principales carencias y, desde luego, es uno de los equipos a seguir muy de cerca en la nueva temporada que está a punto de arrancar.

Invierno verde (por Javier Expósito)

Jeff Teague será importante con los problemas físicos de Kemba Walker. Fuente: Cape Cod Times.

Los Celtics son los máximos ganadores de este invierno atípico. No porque hayan reventado el mercado con ninguna incorporación, tampoco lo necesitaban, sino por haber cubierto todas las necesidades de la plantilla a la chita callando, de manera muy efectiva. Entre Draft y Agencia Libre, los Celtics se han hecho con las contrataciones de Aaron Nesmith, Jeff Teague y Tristan Thompson, que añaden al núcleo formado por Jayson Tatum, Jaylen Brown, Marcus Smart, Kemba Walker y Daniel Theis, además de profundidad, soluciones a las dos principales carencias que salían a la luz de manera continuada la pasada temporada; desorden ofensivo y debilidad interior. Y lo han hecho, además, con jugadores de un caché significativo, que eran titulares en sus anteriores equipos.

Jeff Teague, All-Star en 2015 y uno de los bases más infravalorados de los últimos años, mayoritariamente por la escasez de recursos con la que cuenta, es el complemento perfecto para Kemba Walker, tanto para cuando esté lesionado (se perderá con toda seguridad el inicio de temporada) como para cuando esté disponible, ofreciendo esa alternativa más organizadora y pudiendo compartir con él minutos de escolta (o de doble generador, a la europea). Para el rol de «base de sistema», junto a Brad Stevens, Jeff es quizás de las mejores opciones que había en el mercado. Por otra parte, Tristan Thompson llega exactamente en el mismo momento de su carrera que Teague; ya ha demostrado su valor dentro de la liga, y está preparado para ser un jugador de rol que aporte fiabilidad y experiencia a un equipo contendiente. Es casi matemático: un pívot duro y fuerte reboteador para formar tándem con Daniel Theiss (10,1 capturas por 30,2 minutos y un 18,6 % en TRB%) para uno de los peores equipos en cuanto al rebote la pasada campaña (18º, no es un buen dato para un contender). Por último, Aaron Nesmith, un 52% en tiros de tres en NCAA que llega para apuntalar el proyecto joven del equipo, que ya tiene a su tirador de confianza para los próximos años.

Pero el objeto de placer de los aficionados verdes este año es, sin duda, los 27.5 millones de trade exception conseguidos por Gordon Hayward. Y no sólo por haberse quitado a Gordon Hayward. La situación en la que se encuentra Kemba Walker en el plano físico deja un montón de dudas en la franquicia, que tiene un dineral de maniobra en materia traspaso para poder solucionar los problemas que la ausencia del base pueda plantear. Si ya los Celtics tienen una plantilla lo suficientemente competitiva como para colocarse dentro del TOP-4 del Este (Brooklyn, Miami y Milwaukee, eso sí, están delante), la firma de otro peso pesado podría ayudarles a equilibrar la balanza. Eso, junto al crecimiento de los Jay’s, a los que como mínimo les queda un año más de mejoría, la adaptación de las nuevas piezas y el factor Brad Stevens, que nunca hay que olvidarse, son bazas más que suficientes para mejorar el resultado cosechado en la burbuja.

Nombres ya han empezado a barajarse; Aaron Gordon, Victor Oladipo… Posición privilegiada para Danny Ainge.

Ibaka llega para que los Clippers parezcan Toronto (por JuanPe  Belmonte)

Ibaka apuntala un plantillón. Fuente: Orange County Register

Tras la decepción en la burbuja y la salida de Doc Rivers, Los Ángeles Clippers necesitaban reforzar su plantilla con jugadores de un perfil muy específico, que permitieran aportar al roster carácter, liderazgo y calidad para así poder crear una nueva identidad y pasar página con una plantilla mucho más fuerte. En la agencia libre sufrieron una salida muy sensible como la de Montrezl Harrell, que se unió a los vecinos de los Lakers, pero justo un día después consiguieron incorporar al que considero que es el mejor fichaje de la agencia libre.

Serge Ibaka se incorpora a los Clippers con un contrato de 2 años y 19 millones de dólares, un movimiento muy importante, pues consiguen mejorar las prestaciones que les daba Harrell, ya que encontramos a un jugador mucho más versátil y con una capacidad defensiva mejorada y respetada en la liga. Hay muchos que pueden argumentar que Harrell podría ser un jugador mucho más importante que Ibaka en esta plantilla, pero nada más allá de la realidad, Ibaka pasa a ser uno de los pilares del núcleo de este equipo, un titular consistente que puede jugar tanto en el 4 como en el 5 y que viene de hacer una bruja muy buena con los Raptors. Mientras que Harrell era, simplemente, un gran revulsivo desde el banquillo, lo que le permitió ganar el premio a mejor sexto hombre.

Ibaka aportará a este grupo más experiencia de campeonato, pues consiguió su primer y único anillo en 2019 con los Toronto Raptors, junto con Kawhi Leonard con el que desarrolló una buena relación de amistad, y también ayudará a mejorar las malas vibras en el entorno del equipo. Ibaka aportará dos cosas muy necesarias a este equipo, en primer lugar una voz reconocida en el vestuario, pues Kawhi Leonard y Paul George no han ejercido especialmente bien este papel y Serge es conocido por ser un jugador pegamento, que une a sus jugadores y permite llevar la voz cantante en los momentos de máxima presión.

Por otro lado, lo que aporta Ibaka que no podía aportar Harrell es una amenaza de lanzamiento exterior constante, pues viene de una de sus mejores temporadas en el tiro de tres puntos desde la 2016-17. El hispano-congoleño finalizó el pasado curso con un 38,5% de acierto en el triple, siendo un arma fundamental en los Playoffs de Toronto Raptors, que se quedaron a un partido de meterse en las finales del Este contra Miami Heat. Los Lakers han fichado a dos de los mejores sextos hombres de la liga en Schröder y Harrell, así como Marc Gasol, veterano que podrá aportar mucho, pero el fichaje de Ibaka por Clippers, cuenta por dos o tres de los que han realizado los vecinos. Justo lo que necesitaban cubrir en la agencia libre, ni más ni menos. El conjunto de Steve Ballmer dio en el clavo.