El orgullo de la familia Buss

te contamos el por que del no regreso de Phil Jackson

Quedan lejos aquellos Lakers que ganaron el campeonato de la NBA en 2010, concretamente solo Kobe Bryant, Pau Gasol y Jordan Farmar son los únicos integrantes de aquel conjunto ganador. A partir de ahí, todo fueron decepciones… decepciones que año a año irían tocando más fondo. De ser un equipo ganador, pasaron a ser un equipo competitivo y después a no aspirar al campeonato.

Ahora toca remontarse un tiempo atrás, al fallecimiento del Doctor Buss (Jerry Buss). Tras esto sus hijos Jim y Jeanie Buss quedaron al mando. Por otro lado, sabemos que Phil Jackson, el que fuera entrenador de los Lakers, es actualmente esposo de Jeanie. Hasta ahí bien, pero llegaría tal día en el que Mike Brown, quien sucediera a Phil Jackson al mando de los banquillos, fuera despedido. Entonces solo sonaba un nombre, el de Phil, el «maestro Zen».

He aquí el momento en el que sucede una extraña historia, a día de hoy incomprendida por todo seguidor de la NBA y sobre todo, de Los Angeles Lakers. Cabe añadir que en esta época Jerry Buss continuaba con vida y en mal estado, sería el año en el que Dwight Howard y Steve Nash llegaran a la franquicia. Volvemos a la historia pendiente: el teléfono de Phil Jackson suena para ofrecerle una oferta. Jackson dejó claro que no volvería a los banquillos, sin embargo la oferta es muy considerable. La franquicia angelina quiere tenerle de nuevo al mando de un nuevo proyecto muy interesante, con dos nuevas estrellas y un Kobe Bryant rejuvenecido. Además, los fans dejan clara su postura, «We want Phil». ¿La contestación de Phil Jackson? «Me lo pensaré«.

Así pues, los fans angelinos parecen muy emocionados con esto, aunque tal vez la posibilidad de que el «maestro Zen» aterrizara de nuevo en el banquillo era demasiado… ¿fantástica? Tal vez, pero los rumores fueron creciendo e incluso llegaron a salir a la luz afirmaciones del propio Jackson. Y cuando todo estaba más cerca… ¡pum! Los Angeles Lakers contratan a un nuevo técnico: Mike D´Antoni.

Kobe Bryant And Phil Jackson Address The Media

Los lakers fans quedaron pretrificados. ¿D´Antoni? ¿Ese mismo técnico que tuvo al mando un tiempo a los Suns de Nash? ¿El mismo que practicaba el estilo «run and gun» en New York Knicks? ¿Quién podía explicar qué hacía esa clase de entrenador en un equipo en el que precisamente correr no era su mejor virtud? Pero lo que más le interesaba a la gente era la opinión del propio Phil Jackson y este no dudó en decir la verdad: «Simplemente dije que me lo pensaría y me dieron hasta cierto día para pensármelo. Antes de que llegara el día señalado, me llamaron para decirme que habían contratado a D´Antoni«. Corazones rotos para los Lakers fans y cierta frustración con los Buss y Kupchak.

Al menos, los aficionados (y el propio equipo) pensaban que el nuevo entrenador se adaptaría al equipo, y no el equipo a él. Pero no. D´Antoni aplicó su filosofía y llovieron derrotas y más derrotas, entrando los Lakers en Playoffs gracias a un extraordinario Kobe Bryant que cayó lesionado por exceso de minutos y su equipo eliminado en Primera Ronda. Muy bien.

Pero ahí seguiría D´Antoni esta temporada, cuando las derrotas siguen acumulándose, las lesiones se abultan; Kobe recae, los tres bases se lesionan, la estrella emergente Henry cae por desgracia del equipo también. Y Mike D’Antoni sigue dejando que su equipo corra y tire. ¿Qué es esto?

Los hermanos Buss, ahora como sabéis al mando, siempre han tenido una excusa para cualquier cosa tras la muerte de su padre, el doctor Buss. Si hacemos esto y lo otro, es por lo voluntad de nuestro padre… Eso suelen decir. Lo cierto es que es difícil de entender para el mundo en general y sobre todo para los aficionados angelinos, cómo un entrenador (y ojo, no un mal entrenador) cuya filosofía no concuerda absolutamente nada con el equipo, puede continuar en el banquillo tras un año de fracaso y este que va en camino.

Puede que el equipo acabe en mala posición y así se agarre a un buen número del draft, además de acumular salario para un gran jugador (o varios jugadores) pero el entrenador, como opinión personal, es objeto de sobra en este equipo. La mayoría estamos de acuerdo en eso. Sin embargo, me temo, hay un factor que todos conocemos y que hará que, bajo alta probabilidad, D´Antoni termine al menos el año en la franquicia. Y ese factor no es otro que el orgullo de los Buss.