¿Quién será el campeón del Este?

Quedan dos duelos antes de Playoffs

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La tónica general en este curso en la conferencia Este venía marcado por la diferencia de nivel entre el grupo de cabeza (Heat y Pacers) y el resto de equipos, que solían perder estrepitosamente contra los equipos del Oeste. El nivel de los anteriores finalistas de conferencia era tal que parecía que el único aliciente era saber quién de los dos iba a quedar primero y qué equipo quedaría fuera de Playoffs. Que ambos equipos estuviesen por encima del 70% en victorias reflejaba la completa autoridad con la que dominaban partido tras partido a sus rivales, sobre todo de su división y conferencia. Sin embargo en el último mes ambos equipos parecen algo aletargados.

El bajón desde el All-Star sobre todo de unos Indiana Pacers que parecía que este año iban a ser capaces de vencer a los Heat contando con la ventaja de campo ha sido grande. Las críticas que decían que el cambio Granger-Turner podía romper la química de un equipo se han visto apoyados con la mala racha de resultados de un grupo antes imparable. Derrotas por más de 20 puntos con noches terribles de los Paul George o Roy Hibbert han cambiado el discurso de muchos analistas que antes mostraban a los de Indiana ganadores del anillo con facilidad. En estos momentos siguen manteniendo un 72% de victorias pero que lleven una racha de cinco partidos ganados por otros tantos perdidos en los últimos diez nos hace pensar que hay una crisis de juego y resultados en Indianapolis.

En la acera contraria tampoco marchan bien las cosas. La teoría de que Miami Heat acabaría consiguiendo el primer puesto en el Este cobró mucha fuerza después de que todos comprobásemos que el muro defensivo de Indiana tenía fisuras. Pero los vigentes campeones no han sido capaces de alcanzarlos y están pasando también por malos momentos. El racionamiento de Dwyane Wade está afectando al ritmo del equipo y últimamente están encontrando dificultades para cerrar los partidos, sobre todo contra los equipos del Oeste que necesitan desesperádamente victorias para entrar en Playoffs. A pesar de todo, los vigentes campeones deberían ser capaces de reagruparse y prepararse para la post-temporada ya que de la formación del equipo del año que viene depende en gran parte los resultados de la presente.

¿Serán capaces los aspirantes de dejar fuera de las Finales al gran equipo en el que se ha convertido Miami? ¿Éste puede ser el año en el que el Rey se vea derrocado tanto en el MVP como en el anillo?

Las adquisiciones de Bynum y Turner reflejan que Larry Bird no quiere ningún cabo suelto en esta ocasión, ya que deben tener suficientes opciones ofensivas y defensivas como para derrotar de una vez por todas al equipo de Florida. Por otro lado, la habilidad de Spoelstra y de los jefes del vestuario de integrar a los nuevos en la dinámica del equipo puede convertir a Michael Beasley y a Greg Oden en los refuerzos necesarios para instaurar una dinastía duradera.

Las espadas siguen en todo lo alto y nos quedan dos duelos antes de Playoffs, el primero el miércoles en Indiana y el 11 de abril, en Miami. De esos choques puede depender quién obtenga la ventaja de campo tan favorable a la hora de determinar de qué lado caiga el anillo. Esperemos que ambos equipos vuelvan a su mejor nivel y nos hagan disfrutar de lo que mejor saben hacer: baloncesto.