¿Alarma en los Clippers?

LOS PRIMEROS PROBLEMAS AFLORAN

Si todo el mundo esperaba que los Clippers, tras pasar los problemas institucionales del caso Sterling y su posterior marcha, iban a iniciar un camino no demasiado complicado hacia unas Finales de Conferencia donde luchar por fin con probabilidades de victoria, estábamos equivocados. En términos teóricos la plantilla no ha hecho sino mejorar tras el verano de 2014 y Doc parece que se desenvuelve bien en los despachos, además todos los jugadores se mostraban muy ilusionados con las posibilidades de este equipo de llegar al anillo de una vez por todas. Sin embargo, el antaño equipo pobre de Los Ángeles, no ha conseguido llevar un verano de mejoras a la pista ya que ha perdido todos los encuentros que ha disputado en pretemporada dejando problemas que creíamos solucionados de nuevo abiertos, la defensa del triple, y otros viejos conocidos que se deben erradicar para luchar con Spurs o Cavaliers, el rebote y la debilidad en la posición de ‘3’.

Los fans de los Clippers no deberían preocuparse, siguen teniendo una estrella en pleno auge como Griffin, otra consagrada como CP3 y jugadores de gran nivel en sus facetas como Crawford, Redick o DeAndre Jordan, el entrenador-GM mejor pagado de la liga y una organización que vuelve a rezumar alegría ¿o sí? Se han perdido tres partidos contra conjuntos iguales sino inferiores en auténticas exhibiciones de lo que no debe hacer este grupo si quiere llegar a lo más alto por primera vez en un historia. Las rotaciones defensivas han sido nefastas, los Blazers sin Lillard consiguieron convertir casi un 60% de los tiros de 3 lanzados además de que la zona sin DJ o Udoh es demasiado blanda; aún no sabemos con certeza quién será el alero titular: Chris Douglas-Roberts, Matt Barnes y Reggie Bullock han dejado unas sensaciones muy mediocres para lo que se les pide; por último, sigue costando cerrar el rebote y mantener la concentración en los tableros, Rudy Gobert consiguió 20 rebotes en 21 minutos contra una rotación de interiores en teoría de gran calibre como la de los de Rivers.

No se debe iniciar una revolución en el sentido deportivo pero si hay que tener claro que este equipo aún no ha carburado como debería dado el arsenal que tiene en todas las líneas. El sábado toca contra los Denver Nuggets, un grupo muy intenso y joven que sacará lo mejor de los pupilos de Steve Ballmer si quieren marcar la primera victoria en el casillero y así acallar las primeras dudas que se ciernen sobre el gran nuevo proyecto de la ciudad de LA. ¿Una victoria contundente daría el impulso necesario para aprovechar la baja de Durant e ir a por todas en el Oeste?