El ‘clutch’ de los Hornets

Acumulan cinco derrotas cuando llegan al final con el marcador apretado

Los Charlotte Hornets han perdido 11 de sus 15 encuentros disputados hasta la fecha, lo que les coloca en el puesto número 12 de la Conferencia Este. Esta es una marca muy lejana de lo que los directivos y los fans esperaban antes del comienzo de la regular season, aunque los jugadores no se cansan de repetir que son pequeños fallos que se pueden corregir con el tiempo.

Lo único cierto hasta ahora es que en 5 de las 11 derrotas, la victoria se ha decidido por una sola posesión, que en el caso de los Hornets se convertían en pérdidas tontas, mala selección de tiro, o posesiones agotadas. ¿Hay algún tipo de patrón? Rick Bonell, del diario Charlotte Observer, ha hecho un pequeño resumen de los partidos perdidos en una posesión, que contribuyen al penoso récord de 4-11:

1 de Noviembre: Memphis Grizzlies 71 – 69 Charlotte Hornets

Como señala el marcador, este partido fue un partido dedicado por entero a la defensa, siendo los únicos anotadores fiables los dos pívots de ambos equipos, Marc Gasol y Big Al.

Ganando de uno a falta de 58 segundos, Marc Gasol consiguió un 2+1 que a la postre le daría la victoria a los de Tennessee, ya que los Hornets no serían capaces de anotar en ninguna de las dos posesiones que tuvieron; primero Al Jefferson cometió pasos, y más tarde Kemba Walker erró el lanzamiento.

2 de Noviembre: New York Knicks 96 – 93 Charlotte Hornets

A 24 segundos del final, Carmelo Anthony anotó un lanzamiento que les daría la victoria a los de La Gran Manzana, aunque los de Charlotte tuvieron hasta tres posesiones para ganar, aunque todas se tradujeron en pérdidas de balón, primero de Stephenson y luego de Marvin Williams.

Aun así, los Hornets pudieron ganar, pero nuevamente Kemba Walker falló el lanzamiento y la victoria voló a Nueva York.

11 de Noviembre: Portland Trail Blazers 102 – 100 Hornets

Este es uno de los casos que más chirrían entre los seguidores de los Hornets. Pese a la ventaja de 23 puntos que consiguieron tener frente a los Blazers, éstos remontaron en el último cuarto para acabar consiguiendo una sufrida victoria.

Esta remontada fue fruto de un gran LaMarcus Aldrige que, secundado por los exteriores, malogró la ventaja de los visitantes, aunque tuvieron posesión para ganar tras un triple fallado por Damian Lillard, pero Clifford no disponía de tiempos muertos, y con 3,5 segundos por jugarse no hubo tiempo para conseguir un tiro cómodo.

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19 de Noviembre: Indiana Pacers 88 – 86 Charlotte Hornets

Con empate a 86 a falta de un minuto, el encuentro se convirtió en un mar de fallos para ambos equipos: primero falló Luis Scola los tiros libres, más tarde los Hornets fallaron en dos posesiones seguidas, un triple de Stephenson y un lanzamiento de dos de Williams.

En este punto del partido tenía la bola el equipo local con 18 segundos por jugarse, y tras el error en el lanzamiento de Rodney Stuckey, todos creíamos que el partido continuaría otros cinco minutos, pero un sorprendente palmeo de Solomon Hill ante la pasividad de los interiores de los Hornets le dio la victoria al conjunto de Indiana.

23 de Noviembre: Miami Heat 94 – 93 Charlotte Hornets

30 segundos por jugarse. Bola para Chris Bosh que anota pese a la buena defensa de Cody Zeller. Es el momento de los Hornets. Tienen que ganar y despejar todas las dudas sobre ellos. La bola es para Walker, pero no anota el lanzamiento, aunque tras una pérdida de Chalmers, los visitantes tienen de nuevo bola para ganar.

De nuevo ‘Mr. Step Back’ no anota el lanzamiento, pero el rebote le cae a Al Jefferson, que, completamente solo, palmea el balón hacia canasta antes de que suene la bocina, pero increíblemente falla y los Hornets vuelven a perder.

Estas han sido las derrotas del equipo de Michael Jordan, ahora vamos a explicar a que se han debido estas derrotas bajo nuestro punto de vista:

  • Problemas con el rebote

En el encuentro ante los Trail Blazers, ¿por qué los Hornets tiraron a la basura esa ventaja? La respuesta está en los rebotes ofensivos que permitieron. En la segunda parte de este encuentro, los Hornets encajaron 12 puntos tras rebote ofensivo, lo cual es claramente inaceptable.

Pero el caso más sangrante es ante los Pacers de Indiana, en el que un jugador de apenas dos metros de altura como Solomon Hill, capturó el rebote y anotó un palmeo ante la pasividad de los defensores interiores.

Por todos es sabido que ni Al Jefferson ni Marvin Willims son conocidos por su habilidad para bajar rebotes, más bien todo lo contrario, pero deben hacer un sobreesfuerzo en los últimos minutos para cerrar el rebote correctamente. Otra solución pasa por sacar del quinteto en los últimos minutos a Marvin Williams por Cody Zeller o Bismack Biyombo, jugadores que si son conocidos por su tenacidad la hora de capturar los rechaces.

  • Pérdidas de balón

Ante los Knicks, el conjunto de Carolina del Norte perdió el balón hasta en dos ocasiones en el último minuto al intentar elaborar una jugada para colocarse arriba en el marcador.

Esto es una cuestión de actitud y nerviosismo, más que de entrenamiento físico y/o técnico. Los jugadores deben tomar las riendas y asumir la responsabilidad que supone el jugar en esos momentos, no deben esconderse y actuar “como si les quemara el balón”, pues así lo único que se consigue es forzar pérdidas tontas que acaban por tirar todo el esfuerzo de 48 minutos.

  • Uso de la pizarra en el clutch 

Esto no es ninguna crítica hacia Steve Clifford, pues el trabajo que ha llevado a cabo hasta la fecha es realmente encomiable, pero parece que en este comienzo de temporada está abusando de los aclarados a Kemba Walker y Al Jefferson en los últimos instantes.

Como ya he dicho, no es ninguna crítica hacia el entrenador que llevó a los Hornets a Playoffs por segunda vez en su historia, pero creo que debería usar más la pizarra en el clutch para crear jugadas, ya sean para Kemba, Jefferson o Stephenson, pero no dejar que los dos primeros se jueguen el lanzamiento forzado en un uno contra uno. Sin ir más lejos, en el partido contra los Atlanta Hawks del 7 de noviembre, Clifford elaboró una jugada bastante efectiva, que consistía en lo siguiente: Walker se abría para recibir el balón, para que la atención del rival se centrara en él, mientras que Stephenson se abría hacia el triple para recibir más o menos solo y lanzar. Esto se tradujo en un espectacular game-winner de Born Ready.

http://www.youtube.com/watch?v=00e2bpnFo6M

Pues bien, estos son, para nosotros, los problemas de los Charlotte Hornets en el clutch. Esperamos que Clifford y compañía hayan tomado notas de sus errores en los últimos minutos y estén trabajando para mejorarlos, ya que urge levantar el desastroso récord de 4-11 que atesora la franquicia en estos momentos.