Afflalo lidera a los Nuggets en el Target Center
DENVER NUGGETS 110-101MINNESOTA TIMBERWOLVES
Siempre hay luz al final del túnel. Pero parece que el túnel en el que están metido los Timberwolves es bastante largo. Anoche sumaron otra derrota más, van doce con récord 5-28, quedando la última victoria casi un mes atrás, cuando ganaron a los Blazers 90-82 en un lejano día diez de diciembre. No olvidar que no pueden contar con tres titulares de nivel por lesión: Ricky Rubio, Kevin Martin y Nikola Pekovic. Los tres deberían volver a lo largo de este mes de enero.
«Lo único que podemos hacer es pasar estos días de perros como podamos», declaraba Sam Mitchell ante la imposibilidad de Flip Saunders anoche de dirigir a su equipo por enfermedad.
Los Nuggets por su parte intentan recuperarse de un mal comienzo, y bien saben en Colorado que una parte importante en esa recuperación es Arron Afflalo. El escolta de UCLA no termina de encajar a la perfección, alternando actuaciones destacadas como la de anoche con otras muy por debajo de su nivel. Sin embargo, poco a poco las cosas se van poniendo en su sitio.
«Cuando no te encuentras cómodo, que es lo que me pasaba, tan sólo intentaba encontrarme a mí mismo y lo que me hacía mejor jugador, más efectivo», decía Afflalo. «Pienso que he empezado a darme cuenta en los últimos dos o tres partidos, cómo ser más efectivo y eficiente.»
Sólo viendo los números parece cierto. Durante los últimos tres partidos ha promediado 25.3 puntos con un porcentaje de tiro del 61%. Anoche el encargado de frenarlo fue el número 1 del draft y recién elegido rookie del mes de diciembre, Andrew Wiggins. Mientras que Wiggins se fue a los 20 puntos con 8 de 18 en tiro, Afflalo anotó 34 con 11 de 18 en tiro, incluidos 4 de 6 en triples.
«Pienso que lo podría haber hecho mejor, mucho mejor,» declaraba Wiggins al final del partido. «No creo que haya sido una de mis mejores actuaciones defensivas.»
Autoexigente el joven alero. Esa misma exigencia es la que todo entrenador tiene con sus jugadores. Y con eso en mente Brian Shaw decidió el día del partido con Memphis el pasado sábado no realizar la matinal ronda de tiro, en un intento de dejar más tiempo de sueño y reposo a sus jugadores para que así en el partido tengan un punto más de esfuerzo. El cambio fue efectivo ya que los Nuggets firmaron una gran actuación ante uno de los equipo contender de la liga, ganándoles por 114-85.
Anoche repitió fórmula y volvió a funcionar. Denver pareció un equipo fresco y energético, con muchas canastas en transición, otras tantas de hustle, en la pintura y un alto porcentaje de tiro de campo, 55%. Ventajas de hasta 24 puntos en momentos del partido como el segundo cuarto. El banquillo fue parte fundamental también, con un claro 47-10 los reservas de Nuggets sobre los de Wolves.
En las estadísticas, destacar por parte de los locales a Gorgui Dieng con 22 puntos y 12 rebotes; 20 puntos y 7 rebotes para Andrew Wiggins; 19 puntos, 6 rebotes, 4 asistencias para Shabbazz Muhammad; y 17 puntos, 7 asistencias para Mo Williams.
Por los visitantes, el mejor fue Arron Afflalo con 34 puntos; acompañado por JJ Hickson con 16 puntos, 11 rebotes; Kenneth Faried con 15 puntos, 7 rebotes; Jusuf Nurkic con 14 puntos, 6 rebotes, 4 tapones; y Ty Lawson, que aunque sólo anotó 8, dio 12 asistencias.
Próximo partido para Minnesota el miércoles reciben a Phoenix y para Denver también el miércoles reciben a Orlando.
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