Unos Spurs imperiales humillan a los Thunder

Oklahoma City Thunder 91-130 San Antonio Spurs

Fuente: en.wikipedia.org [CC]
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La pasada madrugada en Texas se jugó un partido crucial para ver el nivel de los Thunder y los Spurs de cara al final de temporada. El partido empezó muy igualado, con una anotación muy repartida. De Oklahoma destacó en especial la pareja Kanter-Adams y por parte de los Spurs contaron con un Parker muy enchufado desde el principio del partido, asumiendo todo el peso en ataque y terminando el cuarto con 13 puntos y 1 asistencia. Al final del primer periodo, Westbrook sufrió un fuerte golpe en la cara, que hizo saltar todas las alarmas y que quedó en una mera anécdota para alivio de los aficionados de Oklahoma pudiendo terminar el cuarto con total normalidad y anotando una canasta espectacular para cerrarlo.

El segundo cuarto empezó con los reservas de ambos equipos. Un buen parcial de los de San Antonio, colocaba al equipo con la máxima diferencia del partido, con un Belinelli encendido el día de su cumpleaños. Los Thunder estaban pasando serios apuros a la hora de anotar tiros de campo, con un Westbrook muy errático. Los triples caían uno tras otro del lado local,  estuvo acompañado de un gran movimiento de balón y unos pivots que estaban superando en todo momento a los de los Thunder. Los Spurs se fueron al descanso con un triple de Leonard que les colocaba con una cómoda ventaja de +21 puntos, con un asombroso 62,8% en tiros de campo.

El tercer cuarto dio comienzo con un Westbrook que empezaba a despertar y que se acercaba tímidamente al Triple-Doble. Pero sus esfuerzos por dar la vuelta al marcador se quedaron sin recompensa, debido a que los Thunder no dejaban de fallar tiros de campo, que eran contestados por una efectividad inexpugnable del equipo local. El acierto era tal, que hasta Duncan se animaba desde la línea de 6,75. Con otro triple de los Spurs este partido estaba visto para sentencia, era momento de replegar las velas y procurar que ningún jugador sufriese ningún percance. Russell se mostró especialmente frustrado con la actuación de su equipo.

En el último cuarto ya estaba todo decidido y los San Antonio Spurs se habían hecho con  una victoria contundente frente a uno de los mejores equipos de los últimos meses, consiguiendo frenar a Russell Westbrook, que ni si quiera jugó un solo minuto en el último cuarto. Los suplentes de San Antonio fueron los encargados de aumentar la diferencia, hasta convertirlo en una auténtica humillación.

¡Seguidores de la NBA! los San Antonio Spurs acaban de dar un golpe encima de la mesa, ganando a uno de los peces gordos del Salvaje Oeste con una diferencia de 39 puntos. ¿Seguirán con esta dinámica? Faltan pocos días para descubrirlo.