Análisis de temporada 2014/2015: Memphis Grizzlies

De más a menos con final amargo

Fuente: MIKEJAYPRUITT2015 (CC)
Fuente: MIKEJAYPRUITT2015 (CC)

UNA TEMPORADA ILUSIONANTE

Después de una temporada en la que los Grizzlies consiguieron llegar a las 50 victorias por tercera vez en su historia de la mano de un entrenador rookie como David Joerger, y caer eliminados en primera ronda antes los Oklahoma City Thunder de Kevin Durant en una serie que llegó a un séptimo partido, esta nueva temporada llegaba con muchas ganas de poder tener la oportunidad de resarcirse y pelear de verdad por el tan ansiado anillo de campeón. 

Todo comenzaba por un verano en el que como siempre, primero tendría lugar el Draft y posteriormente el periodo de la agencia libre donde los de Tennessee también pescaron lo suyo. En primer lugar, Jordan Adams (#22) y Jarnell Stokes (#35) eran los dos elegidos en el Draft que tuvo como primera elección a Andrew Wiggins. Dos jugadores que como se preveía, no iban a tener gran protagonismo esta temporada dentro del primer equipo de los Grizzlies y que iban a pasar mucho tiempo en el equipo filial de los Iowa Energy, que disputa la liga de desarrollo de la NBA. Antes de eso, los dos disputaron la Summer League con los Grizzlies, dejando muy sabor de boca al promediar 14.8 puntos, 3.4 rebotes, 2.4 asistencias, 2.2 robos y 12.2 puntos y 9.4 rebotes respectivamente.

Echando ya la mirada hacia la agencia libre, los Grizzlies consiguieron hacerse con el veterano Vince Carter, que son 37 años firmaría en el mes de Julio por tres años con los de Tennessee. Un fichaje con el que buscaban una amenaza exterior más y que, a pesar de su edad, venía de hacer un buen papel en la franquicia de los Dallas Mavericks, tanto dentro (11.9 puntos con 39.4% en T3, 2.6 asistencias y casi un robo por encuentro) como fuera de la pista gracias a su experiencia.

Una contratación la de Vince Carter que no fue la única, ya que las renovaciones de Zach Randolph y Beno Udrih supusieron un gran alivio para la franquicia, sobre todo en el primer caso, ya que en los últimos años el ala-pívot viene siendo uno de los pilares fundamentales dentro del conjunto de Joerger. Por otro lado, Beno Udrih, después de llegar al equipo en el mes de Enero consiguió ganarse un puesto en el equipo para la siguiente temporada.

Y para terminar con el tema contrataciones, en las oficinas y en el cuerpo técnico tuvo lugar una remodelación completa a excepción del GM, Chris Wallace, quién fue renovado también en el verano de 2014. En este sentido, podemos destacar nombres nuevos como ya hemos dicho, nombres como Jeff Bzdelik (asistente), Trevor Moawad (psicólogo) o Ed Stefanski (vicepresidente del personal de jugadores).

La temporada no podía comenzar mejor para la franquicia de Tennessee, que se colocaban en las primeras semanas de liga regular como uno de los favoritos a alzarse a final de temporada con el anillo: En los primeros 25 partidos (mediados del mes de Diciembre) los de Joerger consiguieron un récord de 21-4 con el que lideraban la liga y con el que avisaban sobre sus intenciones para esta temporada. Además, Marc Gasol, en su último año de contrato y antes de convertirse en agente libre sin restricciones se postulaba como MVP en estas primeras semanas de competición, que le valdrían para llegar a ser titular en el All-Star game junto con su hermano Pau.

Sin embargo, los de Tennessee acabaron sufriendo su nula capacidad de generar peligro en ataque, sobre todo en su zona perimetral, y la total dependencia de su pareja interior. Con ello, les costaba demasiado cerrar los partidos a pesar de hacer honor a su defensa asfixiante, lo que suponía aún más dudas en mitad de una regular season que no se detenía y en la que tenían que reaccionar para poder seguir aspirando a competir con los mejores de la liga de cara a playoffs. Se podría decir que los de Memphis han ido de más a menos a lo largo de la temporada, a pesar de conseguir finalmente dar la cara en unos playoffs en los que mucha gente, antes de comenzar, ya les daba por vencidos. Partiendo de esto, marcaremos como punto de inflexión el All-Star: Antes del fin de semana de las estrellas los de Memphis habían conseguido un balance de 39-14 con el que se mantenían en la pelea, liderando su división y dejando muy buenas sensaciones para la segunda parte de la temporada. Sin embargo, los de Joerger, en la segunda mitad de la temporada firmarían un 16-13 que les haría llegar muy justos a un final de temporada en el cual se pagarían muy caras las derrotas como veremos luego.

A pesar de los malos momentos que atravesaban los Grizzlies, la directiva de los Grizzlies iban a emprender negociaciones para conseguir un exterior que de verdad aportase amenaza exterior y que reforzarse el equipo de verdad, ya que a pesar de las grandes expectativas que se generaron a principio de temporada el roster de los Grizzlies no daba más de sí y necesitaba aire fresco. Un aire fresco que llegaría de la mano de Jeff Green, que llegaba desde los Celtics hasta final de temporada y una opción de jugador para la temporada 2015/2016 a cambio de Thaysaun Prince y una primera ronda para Celtics y Quincy Pondexter y la segunda ronda para el Draft de este verano que ya hemos vivido y que os retransmitimos en exclusiva en Somosbasket.com. La polivalencia de Jeff Green desahogó en parte al equipo, ya que podía alternar entre las posiciones de alero y de ala-pívot, pero tampoco resultó ser el jugador que iba a sacar a los Grizzlies de sus problemas en ataque.

Finalmente, el equipo de Joerger conseguiría acabar la regular season en la quinta posición de la conferencia oeste con un balance de 55 victorias por 27 derrotas. Un final amargo después de tener que disputar los últimos partidos sin su base titular, Mike Conley (fascitis plantar), y sin uno de sus sellos de identidad dentro de la pista, Tony Allen (tendón de la corva).

Llegamos por lo tanto a los playoffs. Como ya hemos marcado anteriormente, las dudas con las que llegaba el equipo de Tennessee a la postemporada hacían presagiar lo peor para un equipo que había prometido mucho a principio de temporada pero que se había ido desinflando poco a poco a causa del agotamiento de la poca capacidad de hacer daño ofensivamente a sus rivales. Sin embargo, los Grizzlies supieron reubicarse, consiguiendo endosar sin problemas un claro 4-1 a los Portland Trail Blazers que también llegaban con grandes deficiencias físicas en su roster, con sus estrellas habiendo jugado muchos minutos a lo largo de la temporada. Y aquí llegó el momento en el que los osos pagaron las derrotas cosechadas a lo largo de la segunda parte de la temporada. Los Golden State Warriors serían el siguiente rival de los Grizzlies en segunda ronda. Unos Warriors que, han acabado siendo campeones de la NBA superando a sus rivales con claridad al final. Pero de nuevo, los Memphis Grizzlies dieron nota del equipo que son y del espíritu que rodea a este equipo. Los Warriors, a lo largo de todos los playoffs solo perdieron cinco partidos, dos de ellos contra los pupilos de Joerger. Dos victorias seguidas de la mano de un Mike Conley que jugó con la fascitis plantar que venía arrastrando desde final de temporada y con una máscara que le protegía de posibles golpes en su pómulo izquierdo, donde había recibido un fuerte golpe durante el tercer partido contra lo Blazers, y el cual le había ocasionado numerosas fracturas en el rostro. Dos victorias que llegaron después de un primer partido en el que los Warriors consiguieron sobreponerse sin ningún tipo de oposición, lo que hacía esperar una seria más bien corta. Finalmente la serie se alargó hasta un sexto partido en el que de nuevo los de Steve Kerr tuvieron el mando en todo momento, sabiendo lo que se jugaban y anulando a los Grizzlies como bien hicieron anteriormente en el quinto partido de la serie, el cual se llevaron por veinte puntos de diferencia. Por el lado grizzlies finalmente, se marchaban de vacaciones con un 4-2 en contra y con la sensación de haber podido hacer mucho más, sobre todo en los dos últimos meses de competición regular.

MARC GASOL, PRESENTE Y FUTURO

Fuente: Sean Davis (CC)
Fuente: Sean Davis (CC)

Como bien hemos marcado en repetidas ocasiones a lo largo del texto, Marc Gasol ha sido el faro que ha guiado a los Grizzlies esta temporada. Líder indiscutible dentro del campo junto con su pareja de baile dentro de ella, Zach Randolph, quien le ha brindado todo el protagonismo posible en ataque, saliendo muy beneficiado el equipo al final. El nivel de juego del pívot de los Grizzlies a lo largo de estos últimos años ha crecido de manera exponencial, pasando de ser un buen titular, a llegar a postularse como MVP de la temporada regular, entrar en el primer quinteto de la liga y ser titular en el All-Star, dejándonos una imagen con su hermano Pau en el Tip-off que pasará a la historia y la cual nunca se borrará de nuestras retinas.

Una temporada regular en la que acabó promediando 17.4 puntos (49.4 % TC), 7.8 rebotes, 3.8 asistencias, 1.6 tapones y 0.9 robos en 33.2 minutos en un total de 81 partidos (todos de titular). Y por si esto no fuera suficiente, demostró también que bajo presión también funciona al máximo nivel, consiguiendo mejorar todas sus estadísticas durante los playoffs: 19.7 puntos, 10.3 rebotes, 4.5 asistencias, 1.7 tapones y 0.9 robos en 37.8 minutos a lo largo de los 11 partidos que disputaron en postemporada.

Por todo esto, la agencia libre de Marc Gasol se espera muy movida, ya que después de consolidarse totalmente como uno de los tres mejores pívots de la NBA si no el mejor, las novias que le saldrán al de Sant Boi no serán pocas. Aún así y como ya os hemos informado en primicia en Somosbasket.com, Marc Gasol ya ha rechazado a franquicias como Los Angeles Lakers o los New York Knicks, dos de las mayores franquicias de toda la NBA. Muy cerca de renovar con el equipo que le dio la oportunidad de mostrarse al mundo como jugador de la NBA y de jugar en la ciudad que le ha visto crecer desde que era apenas un joven que acompañaba a su hermano a su particular aventura americana.

VALORACIÓN FINAL (@GNGrind): 8